Viaje a Hogwarts

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...

--¿¡Sirius!? ... ¡Apresúrate! - exclamó Elena al salir de la casa mientras terminaba de ponerse la chaqueta que su novio le había regalado unos meses atrás.

--Ya vengo respondió-- él, terminando de colocar la carta en el pico de Hachi, lechuza que ahora él y la bruja compartían, para que después el ave emprendiera un veloz vuelo.

--¿A quién rayos le mandas cartas a esta hora?-- preguntó caminando hacia el coche de su difunto padre.

--A... James-- mintió, y fue fácil para la castaña notar la mentira, pero no pudo decir nada acerca de ella ya que otro tema desvió su atención, y es que Sirius se estaba subiendo a su moto.

--No me subiré en esa cosa-- dijo de brazos cruzados, observando disgustada al pelinegro en su vehículo.

--Ay, por favor, ya hasta la condujiste-- Elena lo miró de igual manera --Vamos, será divertido, sé que en el fondo te gusta.

--No porque la haya montado unas cuantas veces significa que me guste-- contradijo a su novio, tomándolo del brazo para dirigirlo a la fuerza al coche.

--Bueno, sé de otras cosas que has montado y en efecto, te encantan-- dijo su novio pícaro una vez que ambos estaban dentro del coche.

Elena negó con una sonrisa en el rostro, pues no lo podía llamar mentiroso, porque la única que mentiría, sería ella.

--Entonces, capitán ¿A dónde primero?-- preguntó Sirius una vez que el coche arrancó, subiendo los pies cómodamente al frente de su asiento, con ambas manos soportando su cabeza.

--Primero bajas los pies-- lo regañó, limpiando con su manga donde sus zapatos estaban, pues paneaba firmemente cuidar el coche de su padre --Y abróchate el cinturón-- y de paso la vida de Sirius --Respondiendo a tu pregunta, pensé que te había dicho ya que íbamos al cuartel de la Orden.

--Oh, sí, déjame sacar el mapa para llegar directamente con los broches que nos hacen falta-- dijo burlón, actuando tomar un mapa invisible y buscar una dirección en este --¡Lo encontré! - exclamó señalando un punto en el aire --Está en medio de la nada-- dijo serio, haciendo a Elena poner los ojos en blanco.

--¿En serio perdiste la placa?-- preguntó incrédula, y Sirius la miró de la misma manera.

--Tú ni siquiera la tienes-- Elena volvió a poner los ojos en blanco --Sé que no te gusta hablar del tema-- dijo después de unos segundos de silencio --¿Pero no crees que puede haber algún mortífago esperándote?.

--¿Hablas de que haya un mortífago infiltrado en la Orden ?.

--Los hay en todos lados-- respondió preocupado.

--Lo creo, pero no ahí, es decir, el profesor Dumbledore se daría cuenta... ¿Verdad?-- Sirius se encogió de hombros.

--Estaba con el señor Weasley hace unos días cuando escuchamos decir algo parecido a Ojo-loco, hablado con Remus y Peter, sus nuevos "aprendices", sobre la posibilidad de que Voldy logré infiltrar a su gente a la Orden.

--No lo sé, Sirius, sabes que Moody siempre ha sido así de paranoico, estoy segura de que incluso le da desconfianza su propia sombra-- Sirius rio levemente ante la comparación.

De reojo, Elena vio el rostro agachado de su novio, en verdad estaba preocupado porque algo malo le pasar, así que aprovechó el semáforo en rojo para tomar su mano.

--Hey-- lo llamó tomándolo por la barbilla para que la viera a los ojos --Jasper hizo un juramento inquebrantable ¿Recuerdas ?.

Sirius desvió la mirada, no muy convencido.

Historia Mi felicidad y mi tristeza (Pt.2) (Continuación)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora