𝗖𝗮𝗽𝗶𝘁𝘂𝗹𝗼 26;

1.2K 108 13
                                    

"𝗜𝗻𝗳𝗶𝗲𝗿𝗻𝗼"

;Adele

Un mes después;

El tiempo con Jungkook parecía ir volando, cada día aprendiamos más a cómo ser una pareja y era maravilloso saber que de alguna manera podíamos complementarnos el uno al otro. Poco a poco mis temores iban desapareciendo y se podía decir que ya me estaba mostrando un poco más abierta con él. Aún tenía miedo, pero mis ganas de intentarlo de verdad eran más fuertes.

Desafortunadamente no todo puede ser bueno, aún seguía recibiendo mensajes de WooSeok, en algún punto me atemorizaban, por ende procedía a ignorarlos. Jungkook también se había hecho cargo de eso, logró amenazarlo a él y a su hermana, tampoco habíamos tenido noticias de esa mujer, pero según Jungkook ella había llegado a su oficina para tratar de convencerlo de que yo era una mala persona.

Sabía con mucha conciencia que ella estaba obsesionada con mí marido, pero no la dejaría ganar, menos ahora que estaba decidida a intentarlo.

Nuestra relación era tan maravillosa en estos momentos que dudaba que algo pudiese dañarla y si había algo, por muy pequeño que pareciera, no iba a destruir mi matrimonio.

Mientras meditaba sobre mis futuras decisiones, con una taza de café en la mano, recibí una llamada de Jungkook. Sin pensarlo dos veces la atendí.

— Hola Jeon, ¿qué quieres? — aunque parecía ser desagradable, mi tono de voz no lo fue.

¿sabes? Siempre es un placer llamarte, es que eres tan cariñosa cuando atiendes mis llamadas — había un tono de broma en su voz, él nunca se enojaba si yo le respondía de esa manera.

— Al grano, Jeon...

Jimin y los chicos me invitaron a tomar unas copas, porque dicen que desde que me casé no he salido con ellos...

— ¡Sí, nos ha abandonado por tu culpa! — a lo lejos podía escuchar la voz de un Jimin indignado.

¿Entonces qué, me das permiso? — con su voz más angelical trato de parecer un hombre que obedecía a su mujer.

Eres peor de lo que pensé, Jeon — sí no me equivocaba, la voz que ahora se escuchaba era la de Hoseok, también burlándose de Jeon — aún recuerdo como decías que jamás serías gobernado por tu mujer, pero aquí estás, pidiendo permiso para ir a tomar. Las cosas cambian, viejo.

— No los escuches, Adele, nunca dije eso — me reí detrás de la línea, porque el de verdad estaba apurado.

—¿No es muy temprano para tomar? — él no dijo nada — ¿Tardarás en venir? — pregunté, porque si me preocupaba que tomara hasta tarde.

Prometo que no ¿voy o no?

Pierdete un rato Jeon. Y si tomas demasiado, asegúrate de no conducir, y cuando vengas a casa, no enciendas las luces, menos hagas escándalo. — podía escuchar la risa de los chicos.

No prometo nada, cuando estoy ebrio, no soy muy listo que digamos. — me reí, porque aún no podía dar fe de ello.

— Cuidate, Jungkook...

Regresaré temprano — respondí con un pequeño "ok", pero él no había terminado de hablar aún — ah, y Adele...

— ¿Sí?

𝐋𝐚𝐬 𝐥𝐮𝐦𝐛𝐫𝐞𝐫𝐚𝐬 𝐝𝐞𝐥 𝐨𝐜𝐚𝐬𝐨©|𝐉𝐞𝐨𝐧 𝐉𝐮𝐧𝐠𝐤𝐨𝐨𝐤|Where stories live. Discover now