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-¡baku-bro!- el pelirrojo movía fuertemente a su amigo. - ¡Despierta!- volvieron por su amigo y lo encontraron tirado afuera del lugar.

El pelinegro solo se le quedó mirando y se le ocurrió una idea estúpida.

-Solo un beso de amor de verdad lo despertara. -.

El pelirrojo lo miro con cara de ¿Enserió? Ni el era así, pero su amigo no despertaba y ya hasta le habían tirado agua.

-Son solo cuentos, ademas ¿quien podrá amarlo de esa manera?- se quedo pensando. - midoriya, se fue muy enojado con el la última vez.

- si, pero eso no significa que lo haya dejado de querer - señala el otro chico , se rascan la cabeza y se miran a los ojos para asentir.

El pelirrojo lo subió al hombro del pelinegro.

-llegaremos en unos minutos si nos apuramos. - su cuerpo se empieza a deformar y de el salen escamas rojas. Dientes más grandes pero igual afilados.

En otro lugar.

- Tropas de búsqueda y rastreo - decía el rubio que estaba a cargo de las fuerzas militarizadas.

-M-mirio - susurra tamaki .

-Ahora no cielo, tengo que ir. Izuku nunca jugaría con eso . - agarra la cintura del ninfa para besarle.

-C-cuidate - le da un rápido y tímido beso a su pareja para retirarse.

-Quédate aquí, protege a izuku. - años de paz no los habían hecho débiles, sus tropas siguen al tanto y con la misma calidad  que se ha de esperarse.

No es como todos dicen, ellos son mas que curar o hacer uniformes de guerra, o solo ser los que se ven bonitos, su poder va mas allá de lo que los otros carecen, son deidades menores, pero siguen siendo deidades. Era normal que solo las vieran como belleza y ya, pero adentro eran mucho mas que eso.

Para ponerlos mas en contexto, las apariciones raras y 0 cautelosas han aumentado en los últimos 2 días que ha transcurrido y muchas ninfas dicen haber vistos en pueblos cercanos, personas de habla y vestimenta carroñosa, aspecto peligroso.

-yo debería ir con ellos - menciona desesperado el pecoso. 

-No izuku, es peligroso, bastante tuve con tu secuestro creo que otro caso así me enfermaría mas. - La mujer de cabello verde retenía a su hijo. - Nuestras tropas están bien preparadas. 

En la habitación se abre la puerta y una muchacha entra desesperada. -Líder inko, la gema no esta y un dragón se aproxima. - Eran bienvenidos pero para no alterar a nadie era mejor que enviaran un aviso.

-Déjenlos pasar pero manténganse al pendiente. - la mujer busaca a su hijo pero este ya desapareció y el otro ninfa también. -ay izuku, espero que sepas lo que estas haciendo.

el dragón ayudo a bajar con una de sus alas a sus amigos, y el rubio ya estaba consiente. Lo mas graciosos fue que a la mitad del camino casi se cae por sus gritos y desorientación, busco en sus bolsillos la gema y no llevaba nada, se busco y nada.

Pero ese viejo no le pudo haber mentido, la tiene pero a la vez no y sabe como hacerla aparecer, por que en su brazo había escrita solo una palabra en color verde. 

izuku

El ninfa del rey Donde viven las historias. Descúbrelo ahora