∆Capitulo 18∆

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El sol se alzó y se volvió a esconder el día martes sin que nada fuera de lo rutinario sucediera, y

eso incluía la mala cara de Kelian. Sus burlas que empezaban a esta altura a importarme poco y nada. Nueve vueltas a la alambrada, sentadillas, lagartija y abdominales, luego ducha, almuerzo, facultad con Vero, estudio y finalmente cama.


Por su parte, el miércoles, transcurrió de la misma manera que el día anterior, al igual que el jueves y también el viernes, con la excepción de que hoy viernes, era la cita con Benjamín. Eran ya las cuatro y media de la tarde, me encontraba en un baño de facultad intentando arreglarme un poco, colocándome maquillaje, entre otras cosas. Había salido a las cuatro de clase, y a las cinco debía encontrarme con Ben, así que el baño de la facultad fue mi mejor opción.


Hice un par de rabietas, me golpee algunas veces la cabeza contra la palangana, y luego de eso y solo cinco minutos antes de la hora acordada con Benjamín, estuve más o menos presentable.


Como me encontraba en uno de los baños del subsuelo, subí las escaleras, encaminándome a las puertas exteriores de la facultad, y me encontré con Ben esperándome en el umbral.


-Hola- salude con una gran sonrisa-¿has esperado mucho?-pregunte haciendo una mueca.


-Hola May- saludo y se acercó para darme un rápido beso en los labios- para nada, la espera valió la pena- dijo mirándome tiernamente a los ojos.


Me sonroje al instante, jamás había conocido un chico tan tierno como él, siempre encontraba la manera de hacerme sentir especial con unas pocas palabras, y su voz transmitía la mayor sinceridad.


De un momento a otro, sentí un escalofrió recorrerme de pies a cabeza, mire a mi alrededor para


ver si se trataba de alguna quimera u otra clase de mensajero, pero para mi sorpresa, no encontré a ninguna criatura asechándome. Por el contrario, me encontré con que Kelian estaba recostado contra la barandilla de la rampa para sillas de ruedas, fumando un cigarrillo de marca Nevada, pues


eran los que el fumaba, y mirándome fijamente, con el ceño profundamente fruncido y cara de pocos

amigos. Vi como trasladaba su mirada a Benjamín, con más rechazo de la que él chico podría generar nunca, y trague saliva.


-Ben, vayámonos de aquí- dije tomándolo de la mano y apresurándolo a caminar.


-¿Qué pasa?-pregunto confundido -¿porque tanta prisa?.


-Yo-dude- yo solo quiero irme ya de la facultada, nada del otro mundo-dije y reímos, pues él era de

otro mundo.


Caminamos hacia 18 de julio, pues habíamos planeado ir al cine y luego a cenar en algún bar pequeño. Hicimos un par de cuadras hasta llegar al cine, y estando allí, Ben fue a la boletería a por


las entradas, y cuando regreso se encontraba algo pensativo.


-Sabes, cuando estaba fuera de tu facultad, sentía una presencia oscura muy fuerte, de una magnitud impresionante, creo que empiezo a estar paranoico- comento como si nada.


-Ah, emm- me mordí el carillo de una mejilla- bueno, pues- dude- tal vez ese fuera el motivo por el cual semi hui de la facultad hace un instante- vacile al decirlo.


-¿Qué?, ¿Vos también sentiste la presencia?-pregunto sorprendido.


-No, yo no la sentí, yo la vi, era el chico que estaba en el barandal de la rampa-explique.
-¿El que iba vestido completamente de negro?-asentí- vaya, como no me he dado cuenta- afirmo sorprendido.

Tres Mundos:El fin de los tiempos. [En Corrección]Where stories live. Discover now