Capítulo 33

27 7 0
                                    

No, no es necesario que me mandes todo el informe, sólo el detalle de los últimos lugares que han visitado... sí... estaremos en contacto.

Tay colgó. 

Todo el mes había sido una carrera alocada contra el tiempo, luchando por encontrar a las víctimas potenciales del misterioso asesino. 

Tras descubrir el patrón de la familia Peraya, había sido cuestión de dos días para armar los otros.

En total, cuatro familias habían sido completamente exterminadas y tres más aun tenían miembros vivos. 

Tay sentía que se acercaban, podía olerlo. Estaba seguro que en el siguiente asesinato, el autor dejaría otra pista. 

Pero él debía evitar a toda costa que sucediera otra muerte y por eso, aquel mes había sido el más estresante de su vida. 

Había logrado encontrar a cuatro personas que podrían ser los siguientes objetivos del asesino. Y para cuidar cada paso que daban, la vigilancia había sido activada al máximo con tal de encontrar a algún sospechoso. 

No te vas a escapar.

— La vigilancia ha sido puesta en la casa de Suppasit — dijo consultando su reloj — Ahora sólo falta que confirme el grupo que vigila a Kanawut.

New asintió, bostezando. 

Ya se acercaba la hora de salida, y apenas había dormido la noche anterior porque Tay se había empeñado en hacerlo trabajar hasta bien entrada la noche. 

En especial, las últimas dos semanas habían sido agotadoras.

En cuanto a su relación, apenas había avanzado. 

Después de descubrir el significado de "Completo" con la información de Mile, Tay se había obsesionado tanto que después de su conversación en la cafetería, casi parecía haberlo olvidado. 

Y New se estaba cansando de eso.

— Estoy seguro de que esta vez lo atraparemos — contestó.

— Claro que sí — asintió el moreno — Nadie escapa de mí, pásame esos expedientes... ah! Y llama a Chinnarat, me dijo que tenía algunos datos sobre la otra víctima potencial.

New se levantó con pereza y posó los papeles sobre el escritorio de Tay, mirándolo acusadoramente. 

El joven llevaba queriendo pasar un buen rato con él toda la semana, y Tay sólo le había dado largas. Lo peor era que no parecía acordarse de ello para nada.

— ¿Qué pasa? — pregunto Tay viendo la cara larga de New.

— Dijiste que hoy saldrías temprano de aquí.

— Ah... sí, lo sé, lo siento — dijo bajando la mirada — Hoy también hay mucho trabajo y...

— Y nuevamente no vendrás, como has hecho todos estos días, sí, ya me la sé — completó New dándole la espalda y regresando a su escritorio.

Tay no pudo evitar sentirse culpable. 

Todo ese tiempo había puesto a New en segundo plano, cuando también debería darle atención. 

Tomó el teléfono y marcó rápidamente un número.

Chinnarat... mándame mañana esa información, esta noche no tendré tiempo.

Colgó y caminó hasta New, sentándose en el borde del escritorio.

— Perdóname, he sido un adicto al trabajo, ¿Qué dices si nos escapamos esta noche?

Siniestro [OFFGUN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora