A escondidas || FW | +18 ||

Planes de futuro

Los tres días siguientes fueron más o menos normales, dentro de lo que cabe. La pareja casi no se vio, prácticamente se vieron una sola vez, cuando Fred fue para ayudar a Tonks a montar un mueble que compró en el mundo muggle para la sala, y ella ni siquiera salió de la habitación para verlo.

Fred mandaba a su gemelo a que viese como estaba Ylenia, cosa que a George no le molestó ya que se llevaba demasiado bien con la Lupin. El pelirrojo mayor no se atrevía a ir a hablar con ella, sabía que lo mandaría a la mierda. Así que, lo único que Fred hizo en esos tres días fue trabajar, ir a la Madriguera y volver al piso para dormir. Estaba muerto, los últimos tres días se los pasó trabajando demasiado para no tener que que pensar tanto en Ylenia.

—Creo que deberías ir al piso y hablar con él— decía George, que, una tarde más, estaba en la casa de su cuñada, hablando en el sofá.

—Yo no fui la que lo celó por una bobería— se defendió —, y se que te manda él a que vengas para verme, así que no lo hagas más, Georgie— suspiró —... no tienes que venir más si no quieres.

—Nah— el pelirrojo sonrió —, me lo paso bien contigo— le guiñó un ojo —... eres una friqui.

—¿Gracias?

—Sí— soltó una pequeña risa —, denada, enana.

—Y... ¿cómo está él?— preguntó, algo tímida.

George tosió —No ha parado de trabajar— puso sus brazo tras el sofá, flexionándolos —, de hecho no ha hecho otra cosa que no sea eso, trabajar.

—En verdad, tengo muchas ganas de verlo...

—Y él a ti más— suspiró —, créeme, cuñada.

—No sé que hacer, Georgie— resopló, poniendo ambas manos en su rostro —... no iré a disculparme porque no tengo nada de que disculparme... Merlín, no es mi culpa que sea un puto celópata.

—No son celos— dijo el mayor —, es inseguridad.

—No hagas que me enoje contigo también...— bromeó haciéndolo reír.

—Enserio— dijo intentando mantener un tono de seriedad —... creo que deberías hablar, Yle– ella se encogió de hombros, no sabía si sería buena idea —¿Por qué no vienes conmigo al piso?, y ya si lo ves seguramente él te diga de hablar.

—No sé...

—Venga— le dio un empujoncito —, ve a vestirte que yo te espero aquí.

—Vale— se levantó—... gracias, Georgie— la chica se fue, dejando solo al Weasley sentado en el sofá

—Desde luego lo que tengo que hacer yo por estos dos no lo hace nadie...— murmuró.

Después de llegar al piso, Ylenia y George hicieron pancakes, luego, ambos estuvieron bebiendo algo de chocolate caliente con un chorro de licor.