Mi Corazón Es Tuyo

Parte 3

- Hola Tam!!! – dijo Nathan. Había pensado en hablar con Stana varias veces después de aquella noche, no solo para entender porque había subastado las cosas, sino para tratar de arreglar la situación. Compendio que no podía seguir así y la única manera era volver a intentarlo, aunque fuera demasiado tarde.

- Hola.

- Sabes por donde esta Stana?

- Acaba de llegar debe estar en su camerino o ya se habrá ido a maquillaje. Por?!

- Nada solo quería hablar sobre la serie. – mintió.

- Vale. Espero que solo sea una conversación.

- Por? – ahora fue el quien pregunto, aunque estaba seguro de la respuesta.

- Hace tiempo que ustedes no pueden hablar sin discutir.

- Esta vez lo haremos.

- Lo dudo, pero de todas formas acuérdate que tenemos escena a las 9.

- Vale.

Nathan fue al camerino de Stana y tocó varias veces pero nadie le respondía, pensó que a lo mejor ya se había marchado a maquillarse, pero la verdad es que la actriz había visto que era él y no quiso abrir.

Al cabo de unos segundos decidió dejarlo pasar, estaba harta de sus niñerías e inmadurez. Tenían que ser amigos por lo menos, por el bien de la serie y de sus vidas.

- HEY- dijo Nathan con un poco de alegría al ver sus ojos verdes.

- Que quieres Nathan?

- Hablar contigo, me dejas pasar?

- No, dime lo que necesitas aquí y rápido que tengo que hacer varias cosas. – aunque solo verlo hacia que aquella noche volviera a ella, aun le dolía.

- Stana es importante, por favor déjame pasar.

Después de todo ella cedió y lo dejo entrar. Se acomodaron en el mismo sofá pero a la distancia apropiada.

- Ahora dime de que quieres hablar.

Nathan no sabía cómo se lo iba a preguntar, estaba muy nervioso por cual pudiera ser la respuesta, así que tomó fuerzas y respiro.

-Porque subastas nuestros recuerdos? - Stana se quedó en shock.

-Después de todo me lo preguntas? Como puedes ser tan cínico? – el pacto que pensaba hacer, se había desaparecido de su mente.

El tono empezaba a subir.

-Tanto daño te hice que no quieres quedarte ni con los recuerdos.

-Qué? En verdad?

-No se tu pero yo no quisiera dejar mis recuerdos o mejor dicho matarlos aunque alguna vez me hubieran hecho daño, también tuvimos momentos alegres y divertidos.

-Yo? El que decidió matar con todos esos recuerdos fuiste tú cuando me engañaste con esa zorra.

-Sé que lo que hice no estuvo bien y que te he hecho mucho daño pero estoy muy arrepentido.

-Pues eso ya me lo has dicho muchos veces durante estos últimos años pero a mí no me interesa, y pues sí, sí quiero acabar con nuestros recuerdos porque me hacen mucho daño, quiero empezar una nueva vida en la que tú no formes parte.

A Nathan se le empezaron a llenar los ojos de lágrimas al oír esas palabras y entonces decidió hacer una pregunta que a lo mejor lo destrozaría más.

-Ya no me quieres?!?!