Hanami

5.2. Confesión

Título Alternativo: Un secreto por un secreto.

[...]

De la sorpresa Denki se giró para mirar a Noche y por un momento se olvidó de todo lo demás. Sostuvo la mirada oscura mientras su mente se sacudía los restos de la somnolencia a fin de centrar todos sus sentidos en la conversación que tenían. En lo único en lo que podía pensar era en la advertencia del Sistema.

["¿Y si fallo?, ¿me muero?"]

["La muerte del Príncipe es opcional y está sujeta a los eventos que se desarrollen en la historia. Otras opciones son la Guerra. La destrucción del Protagonista y por tanto la pérdida de Esperanza para este mundo. Y el Final de la Dinastía Taiyou"]

¿He fallado?, pensó aun sin apartarse.

—Habría esperado una reacción más dramática de tu parte, pajarito.

—Espera —respondió Denki haciendo ademán de apartarse—, dame un momento.

Noche lo soltó mientras lo observaba con curiosidad, y apenas estuvo libre Denki se cubrió el rostro con las manos.

<Sistema, ¿he fallado?>

<No exactamente>

<No tengo tiempo de sutilezas, Sistema. ¿He fallado o no?>

<La Fase Uno se completó con éxito, el exilio del Protagonista garantiza la integridad de la Trama. La Fase Dos dio inició inmediatamente después, desbloquea la subtrama del Príncipe que le proporciona un trasfondo al personaje frente al resto y elimina los cabos sueltos que hayan podido crearse. Pero el Príncipe debe recordar que puso en juego su libertad para garantizar la supervivencia de Eraser. Logró los suficientes aliados para salvar esa vida, pero no logró vencer en el Juego de la Corte y la advertencia era clara. "Falla y el zorro se quedará con el ave">

El zorro, pensó Denki y apartó las manos para mirarlo.

Recordaba la ficha del zorro y en su momento no supo entender a quién pertenecía, ahora lo veía. Y al pensar en el tablero también se acordó de lo que el Sistema había dicho entonces.

["Durante los últimos años el Enemigo del Clan ha ido acumulando aliados, piezas en este tablero que le ayudarán a cumplir su voluntad.]

[Este es Su Juego y él quiere que lo juegues]

Y de pronto, como un destello repentino.

["...ahora lo quiero todo"]

Se estremeció y notó el calor en las orejas. Tomó repentina consciencia de la situación, de Noche en su batín para dormir mirándolo con esa expresión de deleite que ponía cuando hacía algo que lo sorprendía. Tuvo el repentino deseo de esconderse bajo la cama, de saltar de ahí y caminar, pero en su condición no estaba seguro de que sus piernas lo sostuvieran si se levantaba. Se obligó a permanecer en su lugar.

—¿Has tenido una revelación? —preguntó Noche

—¿Por qué me dices esto ahora?

—Para que sepas que en el futuro no tendrás que temer a tu padre. Tal vez eso te haga salir de la cama.

—¿Y no temes que vaya a decirle a nadie lo que me has dicho?

—Si lo creyera no te lo habría dicho en primer lugar; además, he descubierto que tienes une mentecita curiosa y entrometida. Me gustaría alimentarla.

—No confío en que me dirás la verdad.

—La verdad es lo único que te he dicho desde que nos conocimos, que no la entiendas no es mi culpa. Dicho eso estoy listo para contestar las preguntas que pareces tener aunque también me gustaría recibir algo a cambio. Un intercambio justo.