No logro entender cómo un rostro tan angelical es capaz de hacer tanto daño sin pensar en las consecuencias de sus actos. Eso confirma una vez más que las apariencias engañan. Y eso era Camila Anderson Smith, un rostro angelical al cual muy pocas ve...
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El capítulo era muy largo, así que fue dividido en dos partes💕
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De ojos lindos y delicada, pero cuando quiere, puede ser ruda y diabla.
—Visente Darivas.
CAMILA
Jayden no estaba para llevarme, pero eso no importaba porque si yo tenía que salir cualquier empleado tenía que llevarme. El tipo de seguridad condujo, había dos más que nos acompañaban y me sentía extraña pero sabía que lo mejor era cuidarme.
Enviaron a dos hombres más a buscar a Dereck cuando les di la información.
Me dejaron en el lugar indicado y me di cuenta que no era muy lejos de mi casa, de hecho era algún tipo de cafetería.
Sabía que en aquella nota decía que llegara sola pero no voy a ser tan estúpida para hacer caso.
Aunque de querer hacerme daño no me hubieran citado en un lugar público. Todo era muy confuso pero no me iba a confiar.
—Quédense aquí, vigilen la entrada y si pasa algo extraño intervengan —Me quité los lentes de sol dejándolos en el asiento—. Si estoy corriendo peligro no importa quien sea, disparen o para ser más precisa maten a todo el que se cruce en mi camino —Me encogí de hombros.
No me importa a quien saquen del camino, solo quiero mis respuestas.
Ellos asintieron, también estaban entrenados y uno de sus trabajos era no sólo la protección de mi casa si no de mi familia. Y saldrían ilesos aún si le reventaban el craneo a alguien por mi seguridad. Yo entré a la cafetería.
Observé a mi alrededor para ver si encontraba a alguien conocido o al menos sospechoso. Decidí esperar en una mesa al fondo mientras no dejaba de ver la hora en mi teléfono. Los minutos pasaban y nada, casi había pasado una media hora y nadie aparecía. Ni siquiera tenía apetito como para comer algo.
