¿Estamos soñando? /Vikingos/

Capítulo 17

Iris' PoV

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Mis amigas se empiezan a despertar mientras yo ultimo mis preparativos para el viaje, y empiezan a quejarse por lo temprano que es.

—No tenéis que levantaros, yo soy la que se va con Ragnar, no vosotras, vosotras os quedáis con Bjorn...

—Nos quedamos con la opción de vivir.

Miró a Lelean a los ojos, y aunque se que tiene razón y no debería estar enfadada con ella en lo que podría ser nuestra última vez juntas, no soy capaz de dejar pasar el tono con el que me habla, con ese tono de superioridad que la hace creer tener la razón, y con el que parece querer convencer siempre a todo el mundo.

Me doy la vuelta y paso por última vez la piedra por el filo de mi hacha para dejarla completamente afilada, y me la guardo en el cinturón.

Cuando me doy la vuelta, veo a mis dos amigas de pie, delante mío, y Arlett esta con cara de preocupación.

—No te preocupes amiga, nos veremos en el Valhalla...

—No digas sandeces, Iris —me corta Arlett y la veo claramente molesta—, el Valala ese o como se llame no existe, y cuando mueras no nos volveremos a ver, te habremos perdido y no habremos podido hacer nada para detenerlo porque eres una tozuda.

—Iris, por favor —ahora es el turno de Lelean—. Te suplicaria que no vayas, no quiero perderte, ¿te enteras? —una lagrima cae por su mejilla y a mi se me cae el alma a los pies—, si no te mata la tormenta te matará Ragnar o Ivar, y yo no estoy lista para no volverte a ver.

Una lagrima también cae en mi mejilla y me olvido de nuestros puntos de vista diferentes para acercarme y darla un abrazo.

—Nos volveremos a ver, no te preocupes.

Salgo de la cabaña sin dar muchas más explicaciones y sin despedirme.

No soy de despedidas.

Salgo y voy directa al puerto, donde los pocos hombres que acompañarán a Ragnar se encuentran cargando los último materiales.

Veo a Ragnar en el puerto, mirando hacia el mar, y me acerco a él.

—Esto es hermoso, ¿no? —me pregunta cuando me nota a su lado.

—Así es, señor, lo echaré de menos...

—No tienes por qué —me mira por el rabillo del ojo—, lo volverás a ver, eres joven para unirte a Odin... O ¿piensas como tu amiga?

Mientras me hace la pregunta se gira para mirar hacia el pueblo, y cuando yo hago el mismo movimiento, me encuentro a Lelean y a Arlett frente a nosotros.

Hablando de la reina de Roma, por la puerta asoma.

—No sé si te lo dije ayer, chica, pero me caes bien.

Lelean le dedica una leve sonrisa y vuelve a su expresión seria.

—¿En ese caso no le molestara tener unas palabras conmigo?

Ragnar me mira, mira al barco, y por último a Lelean:

—En absoluto —da un paso hacia mi amiga y se gira hacia mí—. En cuanto vuelva nos vamos.

Arlett se queda a mi lado mientras que esos dos se van alejando por la playa para hablar tranquilamente.

—¿Debería tener miedo? —pregunto refiriéndome a las palabras que Lelean va a compartir con Ragnar.