Hasta siempre

te quiero

Capítulo 22: te quiero

Como imitando al corazón de Lia, el de Allen también se paró, solo que siguió latiendo poco después. No podía estar pasando esto. Ella era la que había demostrado que quería vivir y él el que había tirado la toalla. “¿Por qué no se me para el corazón a mí?”, pensaba mientras contemplaba a Lia tendida en el suelo.

Sophia salió de un pasillo con un aparato en las manos, algunas enfermeras ya estaban tratando de despejar la zona. Allen trataba de ver qué hacían con Lia.

Estaban tratando de reanimarla por electrochoques.

Alguien cogió a Allen del brazo para sacarlo de allí ya que él no se quería mover. El chico ofreció resistencia. Tenía que asegurarse de que Lia estaba bien. De que despertaba. De que no se rendía.

-          Allen, tienes que irte a tu habitación- le dijo la voz de Anne-. Aquí no puedes hacer nada.

-          Allí tampoco- contestó él zafándose del agarre.

Se acercó más a Lia y pudo ver como su vista se enfocaba de repente. Se dejó llevar por Anne. “Lia sigue viva”, pensó aliviado. Pero enseguida otro pensamiento se adueñó de él. “Sigue viva pero no gracias a mí”.

Se encerró en su habitación con el sentimiento de culpa haciéndole un nudo en la garganta que le impedía respirar. Anne entró pocos segundos después para comprobar cómo estaba y se lo encontró sentado en el suelo con un ataque de ansiedad. Le subió a la cama y le puso una mascarilla que pusieron en esa habitación para los ataques que sufría el chico. Allen intentó quitársela. No creía merecer ningún tipo de ayuda. Pero el gas que respiraba no tardó en hacer efecto y se durmió en pocos segundos.

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Lia abrió los ojos y trató de enfocar la vista. Veía todo borroso y le dolía el pecho. Sentía que le faltaba aquello que hacía que su corazón siguiera latiendo. Parpadeó varias veces intentando ver dónde estaba.

-          Quédate tumbada- le dijo una voz familiar-. Te llevaremos a tu habitación.

“¿Sophia?”, pensó. Su hermana no dejaba de indicar a los enfermeros qué tenían que hacer. Lia notó que la levantaban del suelo y la ponían en otra superficie más blanda. Cerró los ojos controlando como podía el dolor de cabeza.

Cuando volvió a abrir los ojos estaba en su habitación. Su hermana estaba sentada en la silla de al lado. Tenía arrugas en la frente y la mirada perdida.

-          ¿Qué ha pasado?- preguntó Lia.

-          Te ha dado un ataque cardíaco- respondió Sophia mirándola-. He conseguido que te adelanten las pruebas a mañana por la tarde. Esto se hace insostenible. Esta vez casi es la definitiva. No quiero que salgas de tu habitación para nada en el tiempo que queda hasta que tengamos los resultados, ¿me has oído? Bajo ningún pretexto a no ser que yo te lo diga.

Lia asintió con tristeza. “Ya no tengo nada que hacer fuera de esta habitación”, pensó al recordar la discusión que había tenido con Allen.

-          Tendrás a una enfermera siempre cerca de tu puerta. Si tienes algún problema, llámala o pulsa el botón rojo- le recordó antes de levantarse e la silla-. Por cierto Lia, te hemos hecho más análisis y parece ser que la anemia no ha mejorado mucho. Tienes que tomarte todo lo que te dan de desayuno, comida y cena, ¿entendido? Si no será imposible sacarte sana del hospital.

Lia volvió a asentir. Apenas podía prestar atención a lo que le decía Sophia. Su cabeza estaba con otra persona a pesar de que intentaba olvidarse de ella. No podía quitarse esos ojos marrones de la mente. Y echaba de menos su corazón.

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Esa noche, Allen salió de su habitación a hurtadillas. Sophia había ido a verle y le había dicho que no podía volver a ver a Lia, pero con eso solo había conseguido aumentar la necesidad de Allen de estar con ella.

No es que quisiera desobedecer a Sophia. Ella era la que se había ocupado de él ese año. Pero solo en esa tarde le habían dado cinco ataques de ansiedad y estaba empezando a deprimirse más de  lo que nunca se había deprimido.

Allen sabía que si veía a Lia dejaría de estar tan ansioso. Desde la primera vez que la vio supo que la necesitaría para seguir viviendo. Por una vez, deseaba con toda su alma ser egoísta y estar con ella a pesar de que luego el que sobreviviera tendría que vivir con ello. Pero en ese momento, Allen solo podía pensar en todos los momentos en los que había estado con ella.

Entró en a habitación de la joven sin hacer ruido y la cerró tras él. Lia estaba acostada en su cama. Estaba conectada al suero y había una máquina que registraba todos los cambios en su corazón. Verla dormida, tan frágil e indefensa, le dio miedo.

Llevó una mano a sus labios y trazó la forma con un dedo. Luego pasó a acariciar la mejilla. ¿Por qué sentía que podría vivir toda una vida estando con ella? ¿Qué tenía esa chica que hacía que nada pareciera imposible? Allen había llegado a pensar incluso en cómo sería una vida a su lado.

Había pensado en un futuro para ambos a pesar de que Sophia le había dejado claro que no podría sobrevivir al lupus. ¿Por qué Lia hacía que no perdiera las esperanzas?

Harto de resistirse a su cercanía, Allen se acercó más a ella y rozó los labios de la chica con los suyos. Lia abrió los ojos de golpe. El monitor que marcaba los latidos de su corazón se aceleraró de pronto para volver a su ritmo normal cuando ella reconoció a Allen.

-          Hola- dijo Lia.

Allen no respondió. Tenía la mente en blanco. Solo podía pensar en dos palabras.

-          Te quiero- le dijo él.

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:D me encanta la última parte. Me salió del alma mientras escribía XD ahora la historia está más emocionante ;) pero no penséis ni de lejos que nos estamos acercando al final… todavía quedan bastantes capítulos :)

Este capítulo es algo más largo para compensar por el anterior :)) y además he podido encontrar un huequito para escribirlo y subirlo así que espero que os haya gustado :P

Por lo demás agradeceros a todos los que leen y sobre todo a las que comentan ;) sois las mejores y solo me queda animar a los demás que leen a decirme LO QUE QUERÁIS por comentarios o por mensajes que yo estoy encantada de ver que la gente se involucra en mi historia :))

y si cualquiera de mis fans quiere preguntarme algo por chat suelo pasarme bastante tiempo conectada, así que no dudéis en hablar conmigo ;)

Amm!! También quería decir que este capítulo se lo dedico a mary16_missyou por hacerse mi fan y por todo su apoyo que de verdad es lo más importante para mí :P MUCHÍSIMAS GRACIAS ;)

Un beso para todos y gracias por todooo!!!! :D :D :D