Alianza de Sangre

20.Castigo

El primer día había sido simplemente,horrible.Además de que me empujaron en el comedor,llegue tarde a otra clase y esta vez no tuvieron piedad de mí,me castigaron,aunque rogué para que no lo hiciera,era culpable por llegar casi veinte minutos tarde y la profesora era demasiado rigurosa y no soportaba las tardanzas,pese a que era mi primer día a ella no le importo y ahora tengo que quedarme una hora más en el instituto para cumplir el castigo.Tengo que admitir que jamás había sido castigada,y no pensé que la primera vez que me pasara fuera de la forma más tonta;aparte de eso mi día se había basado en miradas con desdén,ceños fruncidos y codazos "accidentales".

Deje caer la cabeza en mis antebrazos,el aula en la que estaba solo había dos castigados más,con facha de chicos malos,al principio pensé que tendría problemas con ellos,pero parecían más concentrados en hablar entre ellos o mirar el techo.Los celulares no están permitidos y te los piden en cuanto entras al aula,el profesor encargado en vigilarnos no me creyó cuando le dije que no tenía celular y estuvo apunto de rebuscar en mis bolsillos ,solo para asegurarse si no le mentía,por suerte no lo hizo.

Se supone que alguien vendrá por mi en exactamente una hora,o más bien,en veinte minutos más,estaba ansiosa porque pasara esos minutos.Mire por la ventana,estaba oscureciendo,y ¿si nadie venía por mi?,tendría que caminar hasta la mansión,aunque no tengo bien en claro cuál es el camino.Espero que vengan a buscarme,sé que aquí no hay secuestros y esas cosas pero no es como si tuviera muchos amigos allí afuera,todo lo contrario.

La puerta se abrió y escuché como el maestro les pedía el celular a los recién llegados,al rato oí como alguien se sentaba a mi lado,inmediatamente me giré a mirar quién era.Me tope con unos ojos zafiros que me observaban con algo de diverción,era el chico que me ayudo a encontrar el salón.

--Hola--dijo con una pequeña sonrisa,al instante me puse derecha.

--Hola--¿se me notará lo nerviosa que estoy?,espero que no.

--¿Qué pasó? el primer día y ya te castigan.

--Sí,llegue tarde a una clase--él asintió.Había otro chico que al parecer había llegada con él,estaba en el otro lado del aula pero lo miraba muy fijo,parecía enojado.

--Así que el profesor de historia te castigo--regrese mi vista a él y de nuevo mis ojos conectaron con los suyos.

--No,él no fue,llegue tarde a la clase de química,no me tuvo piedad--hice un puchero,eso me sorprendió hasta a mi,no era de las que hacía esas cosas,pero me sentía bien estando con él.

--Oh,la señora Benet,es famosa por no tenerle piedad a nadie--su sonrisa creció,me sentía hipnotizada por su presencia--no te sientas mal,es así con todos.

Moví mi cabeza en entendimiento y como quería seguir hablando con él le pregunte.

--¿Y tú porqué estás aquí?--se puso serio--vamos,yo te lo dije.--suspiro y su sonrisa volvio.

--Me metí en una pelea y bueno...--hizo un gesto.

--En una pelea el primer día--él frunció los labios,eso provoco que los mire,desvie la vista rápido antes de que se de cuenta--por eso te llevaron a dirección.

Me arrepentí de nombrar eso en cuanto lo dije.

--Sí,ahora que recuerdo tú estabas ahí--era justo lo que quería evitar.No respondí--Junto con las niñas del alpha.

--¿Las niñas del alpha?

--Son las únicas chicas que viven en la mansión del alpha,las cuida bastante--en ese momento recordé como los alumnos evitan amontonarse a su alrededor,al principio no le dí mucha importancia,pero ahora que él lo decía tenía sentido,no las aplastan como hacen entre ellos y siempre que alguien se acercaba a alguna de ellas mantenían sierta distancia.

--¿Y ustedes les temen?

--No es miedo,solo que,quién quiere tener problemas con el alpha por haberse metido con alguna de sus chicas--funci el ceño--además yo no les tengo miedo,es más nunca he hablado con alguna de ellas.

--Entonces ¿cómo sabes que eran las "niñas del alpha"?--hice comillas.

--Porque todos aquí lo saben--dijo obvio,no me gustaba eso de que Inara y Ayame sean conocias de esa forma,¿qué había pasado para que las llamaran así?,no me atreví a preguntar.En eso el profesor me llamo,levante la cabeza.

--Ya puedes retirarte--se había cumplido la hora,agarre mi mochila y me puse de pie,estaba por irme cuando sentí una mano en mi muñeca.Era él.

--Por cierto soy Ean--me puse muy nerviosa al sentir su toque y solo pude asentir torpemente,él me soltó y salí lo más rápido que pude del salón.Genial,de seguro ahora cree que soy rara,¿quién se va de esa manera?,podría haber dicho algo,sacudí la mano.Por suerte Inara me dió instrucciones para salir del instituto,sino de seguro me pierdo de nuevo,y el salón no está muy lejos de la salida.Pase por las ventanas y apenas podía distinguir los árboles, camine más rápido,no me gustaba estar sola en los pasillos y menos ahora.

Salí del instituto acomodando la mochila en mi hombro y me detuve a ver si alguien vino por mi.Estaba oscuro pero pude distinguir un par de autos,uno debía de ser del profesor,seguí buscando,una bocina sonó del otro lado del estacionamiento,ese tenía las luces prendidas,supuse que era el que venía a buscarme,camine hacia el coche.Sentí un cosquilleo en el vientre,cuando llegue al lado del auto la puerta del acompañante se abrió,dude un segundo,pero entre.

--Al fín sales--pegue un salto al escuchar su voz,me lo quede mirando con el ceño fruncido--¿qué?

--¿Qué haces tú aquí?--estaba preparada para bajar del auto,aún no había serrado la puerta.

--¿Tú qué crees que vine a hacer?--dijo con un tono obvio.

--No me respondas con otra pregunta.

--Ah,cierto,olvide que odias que te hagan eso--dijo con una pequeña sonrisa--estaba pensando en entrar a buscarte,ya tardabas mucho,¿qué te retraso tanto?.--como dije controlador.

--Nada que te interese--a veces me irrita tanto que no puedo controlarme y termino diciendo cosas que sé que le van a molestar.Él gruño

--Todo lo que tenga que ver contigo me interesa.--moví mi cabeza mirando al frente,"no debería de interesarte".

--Quiero que alguien más venga a buscarme.--abrí la puerta y estaba por salir pero él me agarró de la muñeca,tiró un poco de ella.

--No bajes--quise soltarme pero me agarró con más fuerza--nadie más vendrá por ti,ya es tarde,¿quieres quedarte aquí sola?--me detuve,es cierto,hasta que alguien más venga por mi pasara un buen rato y no quiero quedarme sola,además a cada minuto hace más frío,suspire y vi como una sonrisa se plantaba en su rostro,me acomode en el asiento y esta vez serré la puerta.No lo mire y después de unos segundos me soltó,arranco el auto y salimos del estacionamiento.Los primeros segundos fueron en silencio,hasta que Alaric hablo.

--Y¿cómo te fue en tu primer día?--mire por la ventanilla,no había mucho para mirar todo era negro.

--Bien--dije solamente,siempre intentaba mantener cierta distancia entre nosotros,no quiero que haya errores.

--¿Bien?--sentí su mirada sobre mi,pero no me giré a mirarlo.Asentí--Claro y por eso te castigaron.

--No,me castigaron porque llegue tarde a una clase.

--Eso está mejor--esta vez sí lo mire--Siena,sé que no lo aceptas aún pero lo mejor para los dos sería que comiences a hacerlo,no sirve de nada negarte a lo inevitable--no era inevitable,yo tenía elección,no creo que este todo planificado para que terminemos juntos,yo decidiré si me enamoro de él o no,y mi elección es que no,no voy a perder mi tiempo aceptando cosas como estas porque no hay nada para aceptar,ellos pueden creer en lo que quieran,él puede creer que yo soy su mate pero eso no cambiara nada.

--Alaric no quiero hablar de eso--él asintió mientras me miraba de reojo.

--Esta bien,pero un día tendremos que hablar de eso.Ahora dime cómo te fue el primer día--no habría un día para eso.Decidí hablarle de mi jornada en el colegio para mantenerlo entretenido.