Cap. 25º: "Mi dilema."

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—¿Cómo volverás a casa? —me preguntó Ethan una vez que se encontró delante de mí.

Instintivamente mis ojos se desviaron hacia la estructura de ladrillo rojizo, en donde en lo alto una ventana se encontraba con las luces encendidas. Suponía que se trataba del cuarto de ensayos de los chicos, donde seguramente Alexander seguía encerrado.

—Pues supongo que me llevaré uno de los autos de Alexander —dije mordiendo el interior de mi mejilla pensativamente.

—¿Tienes las llaves?

Instantáneamente mi cabeza me llevó al recuerdo de hacía unas horas en el que le entregaba de mala gana sus preciadas llaves. Maldije para mis adentros.

—No, él las tiene —suspiré.

Ethan sonrió de lado.

—No me queda más que desearte toda la suerte del mundo.

—Vaya, con eso me dan aún más ganas de subir por ellas —dije con pesar.

—O...

—¿O...? —imité su tono de voz esperando a que completara lo que planeaba decir.

—Podrías acompañarme a un lugar —dijo con voz pausada haciendo que la sugerencia quedara plasmada en el aire.

Sinceramente no esperaba esto, por lo que no pude evitar ponerme colorada y desviar disimuladamente la mirada ¿Yo con Ethan... En algún lugar...?

—O puedes quedarte esperando a Alexander —dijo al ver que no salía palabra alguna de mi boca.

Mis ojos se encontraron con la cálida mirada de Ethan, quien en estos momentos seguramente se burlaba internamente de mi bobo dilema.

Rápidamente saqué mi celular de la bolsa trasera de mis vaqueros y desbloqueé la pantalla para mirar la hora. 10 en punto. Bueno... no era tan tarde... ¿O sí?

—No lo tomes a mal, Ethan —comencé a decir— pero no sé si me dejen ir.

—¿Alexander? —dijo alzando una ceja a modo de interrogación.

—¡No! —dije un poco más alto de lo que pretendía. Una oleada de calor volvió a colorear mi rostro— No necesito su permiso. Es solo que... Mi madrastra...

Los ojos de Ethan se abrieron un poco en señal de comprensión.

—Oh, Regina —dijo lentamente— Es una persona... —dejó las palabras al aire.

—¿Horrible? —dije en voz baja pero lo suficientemente alto como para que me escuchase.

—¿Y si te rapto? —una sonrisa más se escapó por la comisura de sus labios— Entonces ya no tendrías la culpa de llegar después del toque de queda ¿O sí?

Sin poder evitarlo una sonrisa estúpida se dibujó en mi rostro y momentos después quería que me tragara la tierra ¿Por qué tu cara tiene que ser tan jodidamente obvia, Katherine?

—No lo sé, apenas llevo dos días aquí —comencé a decir— y creo que de todas formas Regina ya me odia... No quiero comprarme más problemas con ella, ¿Sabes?

Ethan soltó un suspiro y me miró como si hubiese perdido una batalla.

—Bueno, creí que te hubiera gustado ir a una tocada con poesía —sonrió levemente— pero será para la próxima.

Y sin esperar a que dijera nada, Ethan se despidió con un gesto de la mano y dio media vuelta haciendo que sus zapatos al girar crujieran contra la grava.

Inmediatamente cerré los ojos con fuerza y apreté los puños ¿Por qué? ¿Por qué la vida era tan injusta?

—¡Ethan! Espera —dije sin moverme de mi sitio.

Ethan se detuvo a unos pasos de distancia de su auto y me echó un vistazo por encima del hombro.

—¿Dijiste tocada con poesía? —dije sin poder ocultar la excitación en mi voz.

¿De qué otra forma esperaría que reaccionara una chica que adoraba leer y escribir? Amaba la poesía y la música, y el poder combinar ambas cosas era como un respiro de aire fresco para mi alma ¿Lo sabría este chico?

—Así es —dijo Ethan tratando de reprimir una sonrisa— Supongo que ya has asistido a muchas ¿No?

—Eh... En realidad no... —dije desviando la mirada hacia mis zapatos.

—Tú decides —dijo finalmente, comenzando a avanzar mientras giraba las llaves de su auto alrededor de su dedo índice.

Y sin esperar respuesta alguna abrió la puerta de su auto y se subió en él.

Mi mirada se dirigió una vez más a aquella ventana por la cual aún salía una luz pálida y amarillenta ¿Qué pensaría de mí si me iba repentinamente y sin avisar?

—Carajo, entiende —dijo posando abruptamente sus manos en mis hombros— Si tu padre se hubiera enterado me mata, me corta los huevos, yo...

Las palabras que había pronunciado Alexander tan solo unas horas atrás volvieron a aparecer en mi mente, y no pude evitar morder mi labio inferior con preocupación.

—Me gusta venir aquí arriba ¿Sabes? —dijo con voz ronca— Es en el único lugar en el que encuentro paz.

Me giré a verlo con una pequeña sonrisa en los labios y me sorprendió un poco verlo con los ojos cerrados.

—Gracias. —susurré

—¿Por qué? —dijo girándose a verme al tiempo que sus ojos esmeralda me miraban confundidos.

—Por compartir esto conmigo —dije desviando la mirada al cielo.

Los recuerdos de horas pasadas que parecían en realidad años me atacaban sin piedad y por alguna extraña razón me hacían sentir... Mal.

Mis ojos se separaron de aquella ventana y se volvieron hacia Ethan quien seguía observándome pacientemente desde su auto.

No pasaba nada ¿Verdad? Después de todo Alexander estaba ocupado con su música ¿No? No podía molestarse conmigo por ir un rato con Ethan a ver una tocada.... ¿O sí?

Y así, tratando de acallar a las voces internas en mi cabeza que me hacían dudar a cada instante. Comencé a avanzar con paso decidido hacia el auto de Ethan, hasta llegar a la ventanilla del conductor donde se encontraba sentado.

—07615890214

—¿Me estás dictando tu número? —preguntó Ethan un tanto perplejo.

—Sí —dije al tiempo que asentía con la cabeza— cuando estés ahí mándame tu ubicación —sonreí al tiempo que retrocedía y me alejaba de su puerta.

—¿Qué vas a hacer? —me preguntó aún confundido por mis extrañas reacciones.

—Tengo que arreglar unas cosas —dije— Pero no te preocupes, ahí estaré.

Y sin esperar una respuesta más, me giré y comencé a correr hacia las escalerillas de incendios, sintiendo como el frío viento agitaba mi largo cabello contra mi rostro.

—Alexander —dije sin aliento al tiempo que abría la puerta de par en par.

***

Hola bellas personitas,
Aquí les dejo capítulo nuevo, espero que les haya gustado, y antes que nada me gustaría que comenten qué chico es su favorito 😉 #TeamNathaniel, #TeamAaron, #TeamEthan, #TeamCam, #TeamAlexander
Espero sus comentarios.
Besos.

Andrea. 💕

Good Girls love Bad BoysWhere stories live. Discover now