CAPITULO 6.

5.5K 359 7
                                    

6*********************************

Estaba sentada en el sofá de la entrada mirando el amanecer. La avenida estaba tranquila, no había luz en las casas. El bosque también parecía tranquilo, solo el ruido de los pájaros y  un tazón de chocolate caliente me hacia compañía mientras pensaba… mi vida estaba  cambiando.

hare lo que tenga que hacer”…

 Me estremecí al recordar una y otra vez esas palabras que se me habían clavado a fuego en la mente...

Recuerdo que en todo el trayecto a casa no había abierto la boca, tenía muchas preguntas que hacerle pero el frio y el miedo más profundo me hizo retorcerme en el asiento tensa y en silencio. Hasta que no vi la avenida de casas blancas, paralelas e iguales entre si no estuve del todo tranquila… pero… ¿Por qué me ayudo si en realidad quería matarme? Me podía a ver dejado allí tirada en el lago, o lo que es peor: me podía a ver matado y a verse quedado con la piedra si tanto la quería... trague saliva. Todo esto era muy contradictorio, sabía que la próxima vez que lo viera no iba a ser un camino de rosas, sus palabras fueron una amenaza de lo más dulce y sangrienta... Ese tío podría ser un dios para muchas mujeres, pero era el tío más siniestro y oscuro que jamás había visto en la vida. Despertaba en mi cosas que jamás nadie me había hecho sentir, desde querer salir corriendo despavorida cuando estaba a mi lado hasta querer tirarme en sus brazos y dejarme vencer por el más oscuro y seductor infierno…  estaba aterrada y todo por esta pequeña piedra…  cogí entre mis manos el colgante.. ¿Qué significaba?... me vino una idea a la cabeza.

-¡Jude!

El experto que teníamos en el trabajo, no me habían hablado mucho de él, no sabía ni como era, ni la edad que tenia, ni donde vivía puesto que jamás lo vi aparecer por la tienda. Pero quizás el me podría decir que  era esta piedra que la hace tan valiosa…

Me recorrió un escalofrio al recordar esos ojos grises, esa sangrienta sonrisa que puso mientras cerraba la puerta del coche…esos ojos volviéndose cada vez más oscuros y tenebrosos bajo una promesa de sangre...

 Entre en casa cuando ya salió el sol. Mi cabeza estaba hecha un lio. Deje la taza junto al fregadero y  cogí el móvil para llamar a Linda.

-¡oh nena!, te iba a llamar justo ahora, parece que tenemos telepatía.-rio.

-¿Cómo estás?, ¿Dónde os metisteis ayer?

-¿Cómo que donde nos metimos?, ¿Dónde te metiste tu nena?, después de la pelea entramos a ver dónde estabas..

Me quede en silencio.

-¿y Susi?, estaba conmigo en la pista

-Susi subió a decirnos que había una pelea, pero cuando bajamos y vimos aquello preferimos esperarnos a que viniera la policía.. ¡Tu no sabes el miedo que pase! ¡Víctor no me dejaba ir a buscarte! ¿Dónde te metiste?,  Susi dijo que estábas con un chico cuando todo empezó..

Ah si Òscar.. No había pensado en el en todo el rato, ni recordaba al manos largas que empezó toda la pelea..

-ese chico fue el que me trajo a casa… -hice una pausa- .. Llegue al poco aquí, supuse que te marcharias con Víctor y Susi a casa.

-¡joder! ¡no sabes el infierno que pase ayer!, te llame mil veces al móvil y ¡no me daba señal!, quise entrar en tu casa, pero victor no me dejo..

Resoplo. Estaba alterada se le notaba en la voz. Quise cambiar de tema. Si seguíamos hablando de la fiesta me preguntaría más cosas y aun no tenía claro lo que le iba a contar.

-bueno tranquila, ya esta, estamos todos bien... y dime ¿sigue victor en tu casa?

-emm..Si, está aquí..

ABISMODonde viven las historias. Descúbrelo ahora