Entro en el piso escuchando el sonido de la ducha de fondo. Es extraño que Byakuya tome una ducha a media tarde, pero ¿quién soy yo para recriminárselo? Dejo mis cosas en la habitación y me acerco a la puerta del baño con la duda de si entrar para compartir un relajante baño o esperar a que termine para entrar yo.
-Mejor me espero.- Me digo a mi mismo yendo a la cocina para ver si hay algo de picar.
Con tanto agetreo en el hospital, hoy no he podido almorzar y no creo que aguante sin comer nada hasta que vayamos a ver a Renji al restaurante.
Solo de pensar en mi amigo siento mi cuerpo calentarse suavemente. Ese beso que nos dimos antes de marcharse me dejó caliente y totalmente desesperado por haber tenido algo más.
Desde hace tiempo, nuestro sexo es básicamente con Byakuya, ya sea de forma individual o en trio, pero lo que es entre nosotros, no ha sido tanto como me habría gustado. Sé que Renji esta comenzando a ver lo nuestro como algo más natural. Ya no me evita, me busca para besarme o incluso para meternos mano, pero desde esa primera vez que lo cogí a traición durante el celo de Byakuya, no he podido tirármelo de nuevo. Lo deseo. Tengo ganas de poder follarmelo de nuevo como ese día, pero desde entonces, las veces que hemos tenido sexo entre nosotros ha sido él quien me folla a mi. No es algo que me guste demasiado, al menos, ni lo veía posible antes de probarlo con él, pero poco a poco estoy comprendiendo porque a los omegas o a los pasivos les gusta el sexo anal.
-Vaya, ¿Renji ha pedido Katsudon al restaurante?- Digo al oler el contenido de un taper de la nevera.
Miro de nuevo la puerta del baño y suspiro tomando solo una manzana, mientras siento mi polla, apretarse dentro de mi pantalón.
***Byakuya***
Dejo resbalar el agua de la ducha por mi cuerpo sintiendo que me relajo. El dia de hoy ha sido un día de subidas y bajadas, aunque la mejor parte ha sido el medio día. Cocinar con Renji ha sido un poco estresante, pero tan intimo y sensual que podría aficionarme a aprender con él si siempre terminaramos igual.
Por suerte, cuando se ha marchado a trabajar, he tenido tiempo de recoger todo lo que habíamos manchado. Nunca había tenido sexo en una cocina, pero no me importaría hacerlo con Renji en cualquier lado de la casa. La imagen de Mugetsu acude a mi y sé que si fuera con él, tampoco me importaría recorrer la casa entera desnudos y follando por todos los muebles.
-Debe ser el embarazo.- Susurro mientras cierro el agua y miro mi creciente erección asomando tras la curva de mi vientre.
Esto no es normal. Sé que desde que estoy marcado, he tenido mas sexo con mis alfas de lo que había tenido en casi toda mi vida. Eso puede estar haciéndome adicto al placer o, tal vez, sean ellos. Su influencia puede pegarme su calentura de alfas.
No. Lo más seguro es que sea el embarazo. No creía que la fase caliente llegara tan pronto, pero supongo que en este embarazo nada será normal. Aunque también hay que tener en cuenta las variaciones propias de cada individuo y embarazo en concreto.
-Demasiadas variables.- Digo arrugando el entrecejo con cierta frustración.- Para tener datos viables necesitaría estudiar varios embarazos similares a la vez.
Cuando me seco y pongo un yukata intento ignorar el hecho de que no he cogido ropa interior y que aun no se me ha bajado del todo.
Dioses, ¿con las veces que me corrí con Renji al medio día, como puede aun ponérseme tan dura?
En cuanto abro la puerta el aroma a hoguera me llega sutilmente. Mugetsu ha llegado y no tardo en verlo salir de la cocina, aun vestido con la ropa de deporte de esta mañana mientras muerde una manzana.
Ninguno dice nada, pero puedo sentir su mirada recorriéndome antes de que mi cuerpo reaccione y me deje tomar aire profundamente. Esa mirada rojiza oscurecida, mientras se relame de la manzana que está comiendo, solo ha empeorado mi estado.
-No te he escuchado entrar.- Digo intentando tirar de la fina tela del yukata para disimular mi estado, aunque en cuanto se mueve de la puerta de la cocina, me percato del bulto prominente que se le nota bajo el pantalón de deporte.
Al alzar la mirada, puedo verlo sonreir de forma torcida a la vez que muerde de nuevo la manzana. Tomo aire caminando hacia la mesa y tomando uno de mis blocks de notas para disimular como si leyera algunos apuntes.
-Yo si te he escuchado en la ducha. La verdad es que yo necesito una y estaba tentado a entrar y compartirla contigo, pero no sabía si eso te sentaría bien o mal.
Yo lo miro interrogante, aunque por su forma de mirarme sé que me desea como estoy comenzando a desearlo yo. Mierda. ¿Con todo el sexo que he tenido con Renji hoy como puedo seguir caliente?
-Parece que Renji no te dejó satisfecho antes de irse al trabajo.- Dice descaradamente mientras su mirada se clava en el bulto que se dibuja bajo mi yukata.
-Me dejó realmente satisfecho...- Digo viendo su sorpresa.- Esto es solo por el embarazo... estoy un poco...
-Si estas muy caliente, sabes que podría ayudarte con eso.
-¿No será más bien que quieres que yo te ayude con eso?- Digo señalando con el mentón su entrepierna, que ha aumentado considerablemente desde que hemos comenzado nuestra conversación.
-¿Con qué?- Dice haciéndose el desentendido.- ¿Con esto?
Cuando dice eso, se engancha los pulgares en la cinturilla del pantalón y la baja haciéndome pensar por un momento en que va a quitárselos, pero para mi sorpresa, se lo baja hasta llegar a la base de su polla, dejándola dentro de la tela pero apuntándome directamente y dejándome ver el vello oscuro que tiene en el nacimiento. Para colmo, con la otra mano se ha alzado la dudadera que llevaba y dejado expuestos sus increíbles abdominales.
Oh, Dioses. Trago grueso mientras intento despegar la mirada de su cuerpo, pero en contra de lo que haría yo, en mis circunstancias anteriores, tiro del cinto que mantiene mi yukata alrededor de mi cintura dejando que este se abra y me muestre tal como estoy bajo la fina tela mientras me muerdo le labio inferior.
***Mugetsu***
En cuanto veo como Byakuya se desanuda el yukata y me mira con esa lascivia, siento un deja vu de cuando vivía con Haruka. Dioses, era tan ardiente como inestable.
Sin pensármelo dos veces me acerco a él tomándolo de la nuca y besándolo de forma posesiva, lo que lo hace gemir en mis labios. Acaricio sus brazos mientras tiro del yukata para dejarlo caer al suelto y que quede completamente desnudo, y bajo mis manos por su espalda hasta tomar sus nalgas con cada una de ellas.
-Ah...- Gime cuando lo alzo dejándolo entre la pared y yo, sintiendo como rodea mis caderas con sus piernas.
-Realmente necestiaría un baño antes de hacer esto...- Le susurro sobre los labios viendo como él se muerde de nuevo el labio.
-Entonces, solucionemos eso ahora mismo.
Unos segundos más tarde, baja sus piernas lentamente y se aparta de mi tomando mi mano y llevándonos al baño. La bañera aun está llena y humeante.
-¿Es que piensas lavarme?- Le digo sonriente viendo que él no sonríe, tan solo se recoge el pelo para no mojarselo con unos movimientos tan sexys que me hace tragar nervioso.
Es cierto que Byakuya y yo hemos tenido nuestros momentos a solas. Hemos follado varias veces sin Renji, pero creo que es la primera vez que veo a mi sensei tan lascivo y deseoso. Cuando se gira con la esponga en la mano, no puedo pasar por alto su palida piel y su vientre contorneado. Siempre pensé que el cuerpo de un omega embarazado no podría resultar atractivo, lo mirase como lo mirase, pero viendo ahora mismo a nuestro omega, siento que no podría estar mas hermoso que ahora, llevando esos pequeños que ni siquiera sé si son mios.
***Byakuya***
Mojo lentamente el cuerpo de Mugetsu mientras observo como se deja hacer. Lo tengo de pie, frente a mi, totalmente expuesto y siendo enjabonado por mi. Es realmente excitante sentir sus fuertes musculos bajo mis manos llenas de jabon, aunque lo mejor es cuando llego a su entrepierna y entremezclo mis dedos con su vello púbico y los bajo hasta enjabonar sus testículos. Luego echa la cabeza hacia atrás, abriendo la boca para gemir cuando subo por su polla y vuelvo a bajar, en una cadencia repetitiva y lenta, lavándolo, masturbándolo. Viendo como su pecho sube y baja conforme la respiración aumenta. Viendo como su nuez de Adán sube y baja conforme traga entre gemido y gemido. Viendo como baja su mirada hasta la mia y busca mi boca con la suya, para besarme mientras sus caderas se mueven facilitándome la "limpieza".
En el instante en que siento como una de sus manos toma mi polla, totalmente endurecida, y la une a la suya, uniendo también su mano a la mia, mis caderas también se unen a su vaivén, follandonos las manos, sintiendo la polla del otro resbalar y apretarse contra la nuestra propia, recibir sus gemidos y aliento contra mis propios labios, a la vez que saco la lengua en busca de la suya, para unirlas en un beso externo, tan lascivo como tan poco propio de mi.
En el instante en que nos corremos, apoya su frente en la mia y sonríe sin abrir los ojos, haciendo que mi pecho de un pequeño salto interior.
-Nunca dejas de sorprenderme, sensei.
-Aun te queda mucho por aprender, Mugetsu kun.
En cuanto le contesto siguiéndole el juego, veo como me mira sorprendido, pero a la vez, encantado.
***Mugetsu***
Ver a Byakuya cabalgarme dentro de la pequeña bañera que tenemos es un autentico deleite. Sus ojos me miran llenos de lujuria y casi poseído por la lascivia más autentica que le había visto desde su gran celo. Es como si nada más que el placer le importara, y eso para mi es un autentico regalo, pues así me recuerda más a mi omega del pasado. Sé que es irrespetuoso pensar en Haruka en estos momentos, pero mi lado masoquista no me permite olvidarlo por completo, y mucho menos cuando Byakuya me mira o se comporta como él lo hacía.
-Ah... ah...- Sus gemidos van en aumento mientras su cuerpo se estremece al subir y bajar para empalarse.
Puedo notar como su vientre abultado se tensa y por un segundo me preocupo por eso, pero él tira de mis cabellos para que me alce un poco y lo bese de forma demandante. Su lengua es puro fuego y sentir como me aprieta la polla, me hace gruñir de placer.
-Me que... da poco... ah... me voy... a ir... ah... ah... Mu... ah...
-Correte precioso... mmmm...- Le digo apretando los dientes y sus caderas para profundizar más mis ultimas embestidas antes de sentir como me deshago en su interior, anclándome y corriéndome gritando su nombre.
En cuanto termina de correrse, siento como se deja caer sobre mi pecho y lo abrazo, manteniéndolo sujeto a mi mientras el nudo se deshace y pueda sacarlo del agua. Despues de lo que hemos hecho y lo que seguro habrá hecho con Renji antes, debe estar exahusto.
-Mu...- dice de forma medio adormilada en mi cuello cuando siento mi polla bajarse lo suficiente como para salir de su cuerpo. Su aliento me hace cosquillas, pero es cuando se incorpora un poco para mirarme en la corta distancia, cuando siento como se me eriza la piel.- Otra vez...
***Starrk***
Varios golpes en la puerta me hacen elevar los ojos de los documentos que acabo de recibir por mail mientras hablo por teléfono.
-Está bien. Sí. Comunicaselo por favor.
Cuelgo y miro directamente a Grimmjow, el cual no parece molesto en absoluto por lo que he hecho con Soujun hace un par de horas. Es más, creo que parece bastante "complacido".
-Son casi las ocho.- Dice haciendo que mire el reloj. Mierda.
-¿Soujun sigue aquí?
-Sí. En su despacho. No ha querido marcharse hasta que lo hiciéramos nosotros.
-Mierda. No me he dado cuenta de la hora.- Digo levantándome y tomando mi chaqueta- Llamalo y dile que nos vamos.
-Perfecto.
-¡Ah! Grimmjow.- Le digo haciendo que se vuelva.
En cuanto lo hace, lo tomo suavemente de la nuca y lo beso. Joder, llevaba toda la tarde desando hacerlo y la verdad es que no podía resistirme más. Al principio noto su sorpresa y resistencia, pero en cuanto acaricio su nuca, enterrando mis dedos en sus suaves cabello, siento como se relaja permitiendo que muerda levemente su labio inferior. No dejo de mirarlo y cuando me separo un poco, puedo ver como el turquesa de sus ojos se ha intensificado.
-Esta noche, duerme conmigo.- Le digo antes de besarlo de nuevo durante varios segundos.
-¿Dormir?¿Toda la noche?
-¿Por qué no? Aun no lo hemos hecho.- Veo como se aparta un poco con el ceño fruncido.
-Aunque haya terminado los exámenes tengo que seguir yendo a clases hasta final de semana. Si estoy contigo toda la noche no seré capaz de andar y...
-Solo dormir.- Cuando le digo eso, veo su sorpresa y puedo identificar algo de precaución.
-Tu no "solo duermes" Starrk. Esto...- dice cogiendo mi entrepierna con su mano y masajeándola levemente mientras tuerce una ligera sonrisa por mi profunda aspiración- me dice que no solo tienes ganas de dormir.
-Está bien. Te prometo que esta noche "solo" dormiremos, después de haberlo hecho un par de veces.- Ahora soy yo el que sonríe pasando por su lado a la vez que él me mira algo sorprendido por mi vuelta de tuerca.
-Pues mas te vale o no volveré a aceptar algo parecido.
En cuanto pasa por mi lado, sonrío complacido. Esto parece que sigue avanzado. Lentemante, pero sin pausa.
***Soujun***
Miro los últimos correos en el móvil mientras espero a Grimmjow y a Starrk en el vestíbulo de la empresa. En cuanto veo un mail de uno de los abogados de la empresa como copia oculta a uno que le ha mandado a la empresa Waccabrada lo abro sorprendiéndome de lo que dice el comunicado.
-¿Listo?- La voz de Grimmjow me hace alzar la vista y miro directamente a Starrk.
-Starrk, ¿has rechazado a Waccabrada?
-Sí. Su negociador dejó claro que si no cambiábamos de idea en cuanto a nuestra ultima oferta no lo aceptarían. Pues bien,- dice pasando por mi lado y mirándome serio- he cambiado de opinión tajantemente. Ahora soy yo el que no quiere aceptar ninguna nueva oferta de su empresa.
-Pero ¿no nos perjudicará?
-No mucho más que a ellos. He visto una empresa algo más pequeña que podría servirnos para lo que necesitábamos a Waccadabra, así que vamos a comenzar una negociación con ellos.- Cuando me abre la puerta de la salida para que pase yo primero me sorprende la tranquilidad que exhala, pese a estar frente a una posible perdida millonaria.- Un pequeño castigo por intentar negociar a mis espaldas y chantajear a mi omega.- Me susurra justo al sobrepasarlo. Cuando dice eso, siento un pequeño boom en el pecho.
-Buena jugada.- Dice Grimmjow pasando a mi lado sonriente. Cuando llega a mi altura se acerca sin pausa y me besa tomándome por el rostro. Al separarse lo noto realmente complacido.- Así aprenderán a respetarte.
-Iba en serio lo que dije de que ellos nos necesitan más a nosotros que nosotros a ellos, nos convenía tener bajo nuestro control una empresa como la suya, pero no estoy dispuesto a dejar a ese viejo gordo, que nos falte al respeto. Además,- dice sonriéndome de una forma arrebatadora- estoy seguro de que volverán con el rabo entre las piernas suplicando una nueva oportunidad, y será entonces cuando tomemos ventaja de su gran error.
-Y tu eres especialista en aprovechar esas ventajas ¿verdad?- Dice Grimmjow entre dientes, lo que hace que Starrk pierda momentáneamente la sonrisa hasta que parece pensar en algo y sonríe torcido.
-Y no sabes como me gusta hacerlo.
Ver como ambos se miran como si se retaran es demasiada tensión para mi. Es como si se atrajeran y como si estuvieran a punto de lanzarse a matar, a la vez.
-Yo os espero en el apartamento.- Dice Grimmjow caminando hacia la moto y tomando el casco para ponérselo. Cuando se monta en ella, me mira y habla antes de bajarse la visera.- Te iré preparando el baño. Así podrás relajarte en cuanto llegues al apartamento.
-Ya que estás...
-El tuyo te lo preparas tu. Soujun esta embarazado y agotado, y necesita relajarse.- Dice de forma cortante antes de arrancar la moto y acelerar rápidamente.
-¿Tenías que decírselo?- Le pregunto viendo como sonríe con cierta tristeza cuando entramos en su coche.
-La esperanza es lo ultimo que se pierde.- Dice mirándome antes de acariciar la mano que tengo en el regazo.- Te vendrá bien ese baño. Hoy ha sido un dia duro y creo que has tenido más actividad de la recomendada.
-Gracias, Starrk.- Le digo sintiéndome realmente cuidado.
Sé que al principio todo lo que venía de él sonaba o se sentía como un ataque directo, pero ahora, realmente siento que importo. Siento que les importo a los dos tanto como estan llegando a importarme ellos.
***Renji***
Salgo del restaurante algo preocupado. Cuando he visto que Mugetsu y Byakuya no venían para la hora de la cena, fui a mi taquilla para mirar el móvil. Mugetsu me había escrito avisándome que Byakuya se había quedado dormido y no vendrían a cenar.
-Hoy habéis cerrado un poco más tarde.- La voz de Mu me hace alzar la vista del móvil.
-Sí, hemos tenido una cena familiar que se ha alargado un poco. ¿Qué tal Byakuya?
-Sigue durmiendo. Supongo que el embarazo lo agota mucho más que antes, además, ha tenido un día bastante movidito.- Cuando dice eso lo miro serio sin saber por donde tomármelo.- No puedo ni imaginar lo que lo habrá agotado todo el tema del despido y luego... nuestras sesiones de sexo.- Sonríe torcido.
-Tal vez deberíamos ponernos unos horarios o turnos para no dejarlo demasiado tocado.
-No creo que eso le agradara mucho. Ya sabes lo controlador que es. Además, intenta decirle que no cuando se te acerca con esa mirada oscurecida por el deseo y se restriega contra tu cuerpo como si estuviera de nuevo en celo.
-Cierto.- Digo con frustración aunque en seguida sonrío.- Ah, me encanta cuando hace eso.
-Y a mi.- Ambos nos miramos y reimos.
-Nos tiene totalmente dominados.
-Puede.- Dice caminando mientras mira el suelo.- ¿Estas muy cansado?
-Un poco. Ha sido un día largo.
-Por cierto, el Katsudon estaba muy bueno.- Me dice sin mirarme pero sonriendo torcido.
-Como se te ocurra decirle algo...- Veo como comienza a reírse evitando que le alcance con mi fingido enfado.
-Tranquilo. Sé que lo hiciste por él. Estaba realmente contento y orgulloso de haber conseguido cocinar.- Dice acercándose hasta rozar su hombro con el mio.- Eres demasiado dulce, Ren.
Cuando vuelve a mirarme, siento que necesito besarlo. Nunca antes había tenido este tipo de sentimientos o deseos por mi amigo, pero ahora, es como si fuera algo totalmente natural, pero a la vez, diferente a lo que siento por Byakuya.
-Si sigues mirándome así, te meteré en un callejón oscuro y te violaré.- Cuando dice eso siento ese pequeño dolor en el pecho, aunque pasa en cuanto sonríe.- Tranquilo, prometo no atacarte hasta llegar a casa.
***Mugetsu***
Bromear con Renji siempre es divertido, aunque últimamente, mis provocaciones no se quedan en simples bromas, ya que Renji está mucho más receptivo a ellas.
Cuando casi estamos llegando al piso, suspiro por lo silencioso que se ha quedado tras mi broma. Tal vez aun le molesta que sea tan directo.
Al mirar a mi lado no veo a Renji. Me vuelvo y lo veo parado con las manos en los bolisllos y la mirada en el suelo.
-¿Ren?- Digo acercándome con cautela.- ¿Ocurre algo?
Alzo una mano para tocarlo suavemente, pero antes de hacer contacto con su cuerpo, me la sostiene y tira de mi metiéndonos en el callejó que hay justo antes de llegar al piso. Mi espalda choca contra la pared y cuando lo miro para intentar averiguar que está pasando, siento como acorta la distancia entre nosotros y me besa.
Ni me lo pienso antes de alzar las manos y rodear su espalda empuñando su camiseta. Abro los labios permitiéndole invadirme y dominarme en un beso hambriento y desesperado que me enciende al instante. Su cuerpo se pega al mio, dejándome sentirlo completamente duro. Bajo mis manos hasta sus nalgas y las aprieto recibiendo su jadeo en mis labios. Inmediatamente él vuelve al ataque besándome y afianzando su agarre en mi nuca y espalda.
-Si quieres besarme...- gruñe separándose repentinamente y mirándome con tanto fuego que siento que me ahogo- solo hazlo.
Es entonces cuando tiro de su nuca y lo beso intercambiando los papeles y poniéndolo a él contra la pared. Su cuerpo responde al mio tan rápido como yo. Joder, besarlo es más que increíble y sé que solo besarlo no me es suficiente, pero soy consciente de donde estamos. Tambien sé que, al igual que yo, ya ha tenido sexo suficiente con Byakuya y mañana le toca levantarse a las cinco para comenzar su turno en el hospital.
Mierda.
Poco a poco, la intensidad del beso va disminuyendo para pasar a ser un beso más lento, húmedo, caliente y sentimental. Sí. Por fin puedo saborear los sentimientos de mi amigo. Sus ojos me miran mientras nos devoramos lentamente, mientras su lengua sale de su boca para lamer mis labios y la mia sale a su encuentro en un erotico beso externo que termina con el dentro de mi boca de nuevo.
-Eres demasiado adictivo.- Dice apoyando la frente en mi hombro, cosa que me hace sonreir mientras lo abrazo acariciando su cuello suavemente. Bajo sobre esa suave piel y muerdo sin apretar demasiado.
-No, Ren. Tu eres el adictivo.- Cuando vuelve la cara hacia mi, sin separar la frente de mi hombro, su sonrisa mezcla de inocencia y maldad me hace bajar buscando de nuevo sus labios. "Te quiero, Ren". Las palabras se quedan en mi mente, pero creo que algo de la intención le llega.- Deberíamos subir o realmente te violaré aquí mismo.
Su risa es fresca mientras se aparta colocándose la entrepierna, cosa que imito sonriendo también.
-Eres peligroso, Mu. Mucho.
El piso está silencioso cuando llegamos, señal de que Byakuya sigue durmiendo. Renji se asoma para verlo y lo acompaño observando a nuestro omega dormir de perfil, con una pierna totalmente desnuda, fuera de su yukata, lo que deja una de sus nalgas casi al aire. Joder, es verlo y me caliento al segundo.
-Ni se te ocurra.- Me susurra leyéndome la mente.
-Di que tu no pensabas en lo mismo.- Le digo alzando una ceja a la vez que salimos del cuarto.
-Si que lo pensaba, pero si está dormido es porque lo necesita. Su cuerpo está viviendo un estrés mayor que el de cualquier omega embarazado.
-Pero eso no evita que quiera lo desee. Y tu no te salvas.- Digo mientras veo como él se cruza de brazos.
-Yo solo le doy lo que necesita.
-Y yo.- Le digo pasando por su lado para tomar algo de agua.- Será mejor que te duches y te acuestes. Mañana entras temprano ¿no?
-Sí.- Dice yendo hacia el baño, aunque se detiene antes de entrar y me mira sin decir nada. Mierda, sé lo que esa mirada significa y mi polla también, pero por una vez, debería pensar con la cabeza y no solo en mi.
Me acerco besándolo suavemente antes de alejarme de nuevo. Dormir. Eso es lo que todos necesitamos.
-Te esperamos en la cama. No tardes.- Le digo viendo como asiente y entra.
Cuando me meto en la cama junto a Byakuya, él se mueve instintivamente y se pega a mi para aspirar mi aroma. Yo lo rodeo acariciando su cabello y depositando un suave beso en su cabeza.
-Has cambiado mi vida. Gracias por todo, sensei.
***Soujun***
Cuando Starrk y yo llegamos al piso, puedo escuchar música desde la zona de la cocina. Al momento, Grimmjow se asoma, vestido como estaba, pero con un delantal encima que me hace sonreir.
-El baño está listo. Cuando salgas también lo estará la cena.
-Gracias.- Le digo acercándome y besándolo despacio, cosa que me permite poder saborearlo un poco.- Huele de maravilla.
Tal como imaginaba, el baño está listo con la bañera llena hasta el borde de agua humeante.
-¿Necesitas ayuda?- La voz de Starrk me hace volverme y sonrío negando.
-Estaré bien. Mejor ve a ayudar a Grimmjow o a ducharte tu también. Supongo que estaras cansado de estar todo el día en tu despacho.
Sus ojos azules me miran tan fijamente que por un instante no sé que está pasando por su mente hasta que se acerca a mi rozando su nariz con mi mentón.
-Sabes que si me necesitas, solo tienes que decírmelo.- Dice mirándome en la corta distancia.
-Estoy bien. De verdad. Solo cansado.
-De acuerdo.
Cuando se marcha suspiro aspirando el aroma mentolado que ha dejado mezclado con el vapor del agua y no tardo nada en estar desnudo y dentro de la bañera. Sí. Realmente estoy agotado.
***Starrk***
Observo a Grimmjow cocinar mientras canta una canción de las que le gustan a él y no puedo evitar recorrerlo por completo. Ni siquiera sé como es que estoy tan caliente después de lo que hicimos Soujun y yo en el despacho, pero la verdad es que es mirarlo y sentir que deseo tenerlo bajo mi cuerpo, gimiendo y mirándome como si realmente no fuera solo sexo.
-Si tanto te gusta la cocina, ¿por qué no haces algo útil y lavas esa verdura?
Yo no digo nada ante su tono de enfado, tan solo me acerco y hago lo que me ha dicho viendo como me mira de reojo de vez en cuando.
-Esto se te da bien.- Le digo viendo como se desenvuelve bien en la cocina. Ya lo había notado anteriormente, pero nunca se lo había mencionado.
-Tuve que aprender desde muy joven. Mi padre era un vago maltratador y borracho, y mi madre tenía que trabajar para mantenernos, así que desde pequeño aprendí ha defenderme lo suficiente en la cocina como para hacerme los desayunos y almuerzos, y preparar alguna que otra cena para que tuviera algo listo al llegar a casa.
Pensar en Grimmjow con la edad de ocho años, teniendo esa vida me duele. Puedo imaginármelo indefenso ante un padre abusivo, solo horas y horas teniéndose que ocupar de su propia madre, cuando lo que le tocaba era ser un niño.
***Grimmjow***
Cuando tapo la olla con las verduras, siento como Starrk me abraza por detrás hundiendo su rostro en mi cuello. Cierro los ojos y no me muevo ni digo nada. Ultimamente lo hace mucho. Se acerca sin previo aviso, me abraza o me besa y siempre lo hace en silencio. Es como una necesidad de mi o de algo que aun no logro identificar.
-¿Dormiras conmigo?- Me susurra junto al oído antes de morderme el lóbulo haciéndome estremecer.
-¿Tengo opción?
-Sí.- Dice sorprendiéndome.- Puedes decirme que no, pero no lo hagas.
Cuando lo miro veo la intensidad en sus ojos azules antes de tomarme el rostro y besarme. Joder, odio sentirme así cuando lo hace. Antes podía odiarlo, sentir asco o simplemente indiferencia, pero ahora, cuando me besa o me mira así, mi cuerpo no reacciona como debería y simplemente me dejo hacer sintiendo que me gusta. Me gusta demasiado.
Al separarse veo como se relame los labios sin dejar de mirar los mios.
-Está bien.- Digo mirando a otro lado mientras siento la cara arder un poco.- Dormiré contigo, pero recuerda lo que te dije.
Al mirarlo de nuevo veo como sonríe de una forma tan atractiva que comienzo a comprender porque tantos hombres han caído en sus redes. El cabrón es realmente sexy cuando quiere.
Tras la cena Soujun se levanta bostezando y lo imito para besarlo ligeramente.
-¿Vendrás hoy a mi cuarto?- Dice haciendo que mire instintivamente a Starrk, cosa que no le pasa desapercibida.- Es igual. Realmente estoy agotado y me vendrá bien dormir solo.
-Te quiero.- Le susurro viéndolo sonreir.
-Y yo.
Cuando se aparta de mi, se acerca a Starrk y este le toma la mano para besársela mientras lo mira casi con devoción. ¿Cuándo cambio su actitud hacia Soujun? Antes lo miraba como una posesión, algo que le pertenecía y usaba a su antojo, pero que a veces le molestaba. Sin embargo ahora lo hace como si fuera algo preciado y delicado. Lo mira como a veces lo veo mirarme a mi y eso me inquieta demasiado.
***NOTA AUTORA: Bueno pues seguimos avanzando con parejas dentro de los trios. Espero que os este gustando la evolucion que van mostrando las diversas parejas, ya que es lo complicado dentro de los tiros cuando no se basa todo en los tres a la vez.
En el siguiente capi iremos con Starrk y Grimmjow y veremos mas de Zan y Tensa ^^
Como siempre agradecer a todos los que me seguis, leeis y votais. Y sobre todo a los que me comentais.
Nos leemos!!!