fearless || jj maybank

By flickerofhxran

364K 14.9K 14.1K

Donde Ashley Routledge se ve envuelta, junto a su hermano y a sus amigos, los Pogues, en aquello por lo que p... More

cast + playlist
gallery art
000
001
003
004
005
006
007
008
009
010
011
012
013
014
015
016
017
018
019
020
021
022
023
024
025
026
027
028
dear reader
temporada 2
one shots

002

14.2K 688 382
By flickerofhxran

CAPÍTULO 2
beach party

                LA SUAVE BRISA MOVÍA LAS MELENAS DE LAS DOS AMIGAS, que caminaban un par de pasos por delante de sus tres amigos. JJ y John B llevaban el barril mientras que Pope cargaba con vasos.

El olor mar hizo que las comisuras de la pecosa se curvaran hacia arriba mientras giraba la cabeza para mirar a su mejor amiga.

Como si hubiera podido leer la mente de Lee, la de pelo rizado asintió rápidamente, desabrochándose el botón de sus pantalones. Ambas se deshicieron de su ropa, dejándola caer junto a JJ, Pope y John B, que se miraron entre ellos.

—¡Tonto el último! —exclamó Lee, haciendo reír a Kie. Esta cogió la mano de la pecosa y corrieron hasta el agua.

Cuando el agua llegaba a la altura de sus cinturas, dejaron de andar para girarse y mirar a sus amigos, que corrían ahora hacia ellas. Lee no pudo evitar sonreír ante la imagen de los tres chicos discutiendo, para variar, sobre cualquiera de sus tonterías.

Lee apartó la mirada de ellos para girarse sobre sí misma y observar el inmenso océano frente a sus ojos, disfrutando del sonido de las suaves olas y las risas de sus amigos de fondo. Cerró los ojos y, por un segundo, disfrutó la paz del momento.
Sin embargo, dicha paz fue interrumpida por unas manos en su espalda, que la empujaron suavemente hacia delante.

Tardó a penas un segundo en salir a la superficie, bajo las divertidas miradas de los demás. Pasó sus manos por su pelo, echándolo hacia atras y centró su mirada en JJ.

—Idiota.

Él iba a contestar, pero John B pasó su brazo por los hombros del rubio y con su otra mano, señaló a Lee.

—Gracias, no sabía como decirle que ya era hora de que se duchase.

—Dios, sois insufribles.

—Me sorprende que sepas lo que es una ducha —dijo Kie, mirando directamente a John B. Él alzó las cejas, sorprendido ante el ataque.

Él se limitó a empezar una guerra de agua, que aunque al principio era entre ellos, pronto acabó derivando en un Kie y Lee contra Pope, JJ y John B.

—Tres contra dos —murmuró Lee cuando salió a la superficie a coger aire, intentando zafarse del agarre de su hermano —. Estáis hechos unos kooks.

—Eso es caer bajo. —Pope, que tenía a Kie en la espalda, movió la mano con el fin de salpicar agua a la pecosa.

—Ni te atrevas, Heyward —dijo Kie. Aprovechando su posición, puso sus manos sobre los hombros de Pope, hundiendolo en el agua.

—Esa es mi chica. Húndelo.

John B había soltado a su hermana para poder ir a ayudar a Pope, de modo que la pelinegra aprovechó para pasarse las manos por los ojos y quitar un poco el exceso de agua que había en ellos, porque estaban empezando a escocer. Adoraba esa sensación, aunque fuera un poco desagradable.

De nuevo, rompiendo su momento de paz, las manos de JJ se posaron en sus hombros, pillándola tan por sorpresa que se le escapó un grito que hizo reír al rubio. Ella se limitó a girar la cabeza ligeramente para mirarlo con los ojos entrecerrados, ante lo que él optó por rodear sus hombros con sus brazos y acercarla a él, de modo que la espalda de Lee chocó contra su pecho.

—Míralos —susurró JJ, señalando a su hermano y a Kie. Aunque los tres seguían sumidos en el juego, Lee entendió lo que quería decir el rubio.
Ella giró la cabeza suavemente para acercarse al oído de JJ.

—¿Crees que tienen algo?

Él negó con la cabeza y miró a Lee, que frunció el ceño. Él sonrió de lado ante su mueca de confusión.

Nada de líos entre Pogues —dijo JJ, citando las palabras de John B. Lee suspiró y asintió, lentamente.
Él estrechó un poco más el abrazo, haciendo sonreír a Lee, que echó la cabeza para atrás, todavía mirando a su hermano y a su mejor amiga.

Kie sonreía mirando a John B, mientras él hacía cualquiera de sus estupideces. Pope y él estaban ahora viendo a ver quién era capaz de aguantar más olas sin caerse.

Tras soltar una carcajada al ver a su hermano caerse de espaldas, Lee se percató de que la gente había empezado a acercarse a la playa ante la noticia de que había una fiesta.

—Vamos —dijo, prácticamente tirando de la mano de JJ. Él asintió y, aunque ninguno se molestó en decir nada a los demás, tampoco se sorprendieron.

No es que fuera raro que JJ y Lee acabaran separándose de los demás; tal vez durante 10 minutos o tal vez ya no volvían en toda la noche.
Tampoco era raro que los otros tres se burlasen de ellos y la broma de que sentían cosas al uno por el otro, era una broma muy recurrente dentro del grupo de amigos.
De hecho, mientras se alejaban en dirección a la arena, John B gritó un «por vuestra vida, no quiero ser tío todavía». Lee y JJ se limitaron a sacarles el dedo, pero ninguno de los dos se molestó en aguantarse la risa.

Cuando llegaron hasta donde habían dejado las cosas, Lee se agachó y de la mochila de JJ sacó la toalla que había cogido antes de salir del Château.
Se enrolló en ella, protegiendo su cuerpo de la brisa que, aunque estando totalmente seca era agradable, ahora la estaba helando.

—¿Llevas toalla? —preguntó la pelinegra, posando su mirada en JJ. Él negó con la cabeza, ante lo que ella abrió los brazos y él ladeó la cabeza.

—Bueno, si lo ofreces así, tendré que hacer el esfuerzo. —JJ le guiñó un ojo y ella negó con la cabeza, divertida.
Él obedeció y se acercó a ella, que no dudó en rodear la cintura de su mejor amigo con sus brazos.

Dada la diferencia de altura, la situación era, aunque bastante agradable para ambos, poco práctica, cosa que hizo que una suave carcajada se escapase de los labios de JJ. Lee levantó la mirada y frunció el ceño, esperando una explicación.
Él se limitó a coger la toalla de las manos de Lee y rodearse en ella para después, abrazarla de nuevo, estando ahora ambos totalmente cubiertos por la toalla.

—Así sí —susurró, disfrutando del calor que la toalla y Lee le estaban transmitiendo. Ella sonrió y se apoyó en su pecho, dejando que él le acariciara la espalda.

JJ y Lee estaban mirando a sus amigos a medida que se acercaban a ellos, sumidos en una conversación sobre la obsesión de Pope con los muertos, cosa que hizo que Lee soltara una carcajada.

—Lee, pensaba que estabas de mi parte.

—Lo siento, Pope. Es gracioso.

El moreno se limitó a sacarles el dedo a todos, mientras que con la otra mano buscaba su toalla.

—Tío, eres raro. —JJ giró la cabeza para mirar a Pope, que lo miró de mala gana.

—¿Queréis cerveza? —preguntó John B, señalando el barril.

—La duda ofende, JB.

—A ti no te voy a dar. —John B miró a su hermana, alzando una ceja. Ella rodó los ojos.

°°°

Los cinco amigos estaban, ahora, rodeados de gente. Algunos conocidos, otros no. Lee no pudo evitar hacer una mueca al ver a John B intentando ligar con una chica.
Aprovechando que su hermano y JJ estaban todavía junto al barril y que ella se había acabado el primer vaso, se acercó a John B.

Estaba sentado, así que lo abrazó por los hombros, pillándolo un poco por sorpresa. Él la miró sonriendo, pero con el ceño fruncido.

—¿Me pones otro? —preguntó con su mejor voz de niña inocente.

—Estoy un poco ocupado, Lee. —John B miró de reojo a la turista que tenía al lado y Ashley hizo una mueca. Antes de que ella pudiera responder, John B añadió —: ¿Por qué no te pones tú?

—Porque mi deber como hermana pequeña es molestarte —dijo con obviedad.

—Entonces, mi deber como hermano mayor es pasar de ti —respondió él, dándole unas palmaditas en el brazo y Lee hizo un puchero —. Eso solo funciona con... —empezó.

Ella rodó los ojos antes de que John B terminar la frase. Él rio suavemente y le revolvió el pelo a su hermana, que le dio un manotazo para después, alejarse un par de pasos hasta el barril.


Llenó su vaso de cerveza y, cuando se disponía a girarse y caminar hacia el grupo de personas con el que estaba con Kie, sintió unos dedos rodear su muñeca y tirar de ella en dirección contraria. En seguida reconoció que era Pope el que estaba tirando de ella, pero no estaba segura de dónde iban y a qué.

Sus dudas se respondieron en menos de diez segundos, cuando el moreno dejó de andar y Lee se percató de que estaban rodeados de gente, que animaban a JJ y a una chica con la que estaba a beber más rápido.
Por supuesto, una de las estúpidas competiciones de JJ para ligar.

—Observa —pidió Pope, señalando detrás de JJ.

Lee entrecerró los ojos, tomando un sorbo. En cuanto reconoció al grupo de Kooks acercándose, giró la cabeza para mirar a Pope.

—¿De verdad?

—Estás roja, tú me dirás.

Con la mirada fija todavía en Pope, bebio otro largo trago. Él sonrió burlón ante su reacción, cosa que hizo que Lee se pusiera un poco más roja.

—Agradecería que no te rías de mi, la verdad —murmuró ella, rodando los ojos. Pope soltó una carcajada suave.

—No me río, simplemente te he avisado de que cierta persona está llegando.

Lee lo fulminó con la mirada, aunque no pudo evitar suavizar su mueca al ver la sonrisa de su amigo. Era el único que no le había soltado una charla cuando se enteraron de que se había liado con un kook, ni tampoco había hecho demasiadas bromas con el tema.

Era, sin duda alguna, el más adorable de los cinco. Ninguno podía estar enfadado con él más de cinco minutos, daba igual la situación, siempre era Pope el que conseguía aliviar la tensión. Era la energía que transmitía.

La atención de los dos pelinegros se posó en JJ, al escuchar su grito de victoria. Llevaba tres rondas seguidas ganando, dejando a las turistas totalmente anonadadas. Pope y Lee se miraron entre ellos y, como si lo tuvieran ensayado, los dos rodaron los ojos a la vez.

—¿Alguien más? —preguntó el rubio, mirando a su alrededor. Sus ojos se pararon en Lee, que sacudió con la cabeza ligeramente, cosa que lo hizo sonreír.

Ella echó la cabeza para atrás, pero accedió. Dio un par de pasos hacia el frente, quedando a escasos centímetros de JJ. Entrelazaron sus brazos y, en cuanto John B gritó un «ya», ambos dejaron que la cerveza bajase por sus gargantas tan rápido como les era posible.

Para su sorpresa, (y de JJ, John B y Pope), la pecosa terminó primero, ganándose un coro de vítores, que la hicieron sonreír mirando fijamente a JJ.

Él tenía las cejas alzadas y una sonrisa ladeada, cosa que hizo que Lee sonriera un poco más.

—No te confíes mucho, J. —Le dio una palmadita en el pecho y se alejó hasta su sitio, junto a Pope y John B, que se había unido a su amigo mientras ella bebía.

—Acabas de pisotear el ego de JJ, confirmo que eres mi persona favorita. —Lee rio ante las palabras de Pope y la mueca de su hermano.

Sin añadir nada más, la pelinegra se alejó con el fin de encontrar a Kie entre la multitud. No tardó mucho en verla, sentada en un tronco junto a Liv y, aunque dudó en si acercarse o no, las dos parecían estar muy bien, así que optó por girarse sobre sí misma, dispuesta a volver con los demás.

A mitad de camino, Lee iba totalmente absorta en sus pensamientos y sin prestar mucha atención a lo que pasaba a su alrededor, por lo que chocó con una figura alta.

—Lo siento —dijo ella. Levantó la mirada y se relajó al reconocer la cara de Nate, que le sonrió, negando suavemente con la cabeza.

Lee miró a su alrededor, buscando con la mirada a sus amigos y a los de Nate. Él se percató y le dio un toquecito en el brazo, llamando su atención.

—Tranquila, están ocupados —dijo, señalando a sus amigos. Estaban bastante alejados, hablando con otros kooks.

—Bien —dijo, soltando todo el aire que estaba reteniendo en sus pulmones.

—No sabía que venías.

—¿No sabías que iba a venir a una fiesta organizada por JJ y Kie? —Lee alzó una ceja, divertida, devolviendo la atención al castaño. Ante su cara, Lee soltó una carcajada.

—En mi defensa diré que no sabía ese último detalle. —Nate se rascó la nunca y sonrió de lado. Lee se dio cuenta de que Nate no tenía ningún vaso, por lo que le acercó el suyo. Sabía que bebía porque solían liarse yendo los dos borrachos.

—¿Quieres? —preguntó. Él miró el vaso y se encogió de hombros.

—Mis amigos... —Nate empezó y Lee rodó los ojos ante la mención de sus amigos.

—Ven, anda.

Lee comenzó a caminar hasta su barril, seguida por el chico. No se molestó en comprobar si su hermano, Pope o JJ estaban por allí, porque a diferencia de casi todos los demás Kooks, Nate les caía bien.

Más que nada, porque realmente, no era Kook del todo. Sí, era rico y tenía todo lo que quería y más, pero ni siquiera era de Outer Banks. De hecho, había llegado de Inglaterra a penas hacía cinco meses, por lo que el término Kook no se ajustaba precisamente a él.

Cuando estuvieron junto al barril, Lee se agachó para coger un vaso y llenarlo de cerveza. Nate la observó en silencio.

—¿Segura? —preguntó cuando ella le tendió el vaso. Ella asintió rápidamente.

El castaño asintió y cogió el vaso, para después darle un trago. Cuando separó el vaso de sus labios, sonrió mirando a Lee.

—¿Necesitamos ir borrachos para que pase? —preguntó él, alzando una ceja.
La pregunta tomó a Lee un poco desprevenida, la verdad. Ella miró los ojos azules de Nate, planteándose su respuesta.

¿Necesitaba ir borracha?

Había perdido la cuenta de las veces que había acabado con Nate después de una fiesta, pero realmente no esperaba tener que calificar lo que fuera que tenían, si es que tenían algo. Kie llevaba uno o dos meses insitiendo en que Nate estaba pillado por Lee, pero ella simplemente lo negaba.

Nate era un chico innegablemente guapo, además de una persona con la que parecía fácil estar. No es que pudiera estar demasiado segura de esto, porque solo había estado con él en fiestas, normalmente borrachos, e intentando evitar peleas entre sus amigos.

La mirada de Lee se apartó de Nate al ver a JJ no muy lejos hablando muy cerca con una de las chicas que estaban en la competición. Una sensación poco agradable se instaló en su estómago, haciéndola tragar saliva y volver a mirar al castaño, que acababa de carraspear un poco.

¿Necesitaba ir borracha?

Rápidamente, negó con la cabeza, sorprendiendo a Nate. Él entrecerró los ojos ante la respuesta de Lee, que dio un paso hacia él.

—No, no necesitamos ir borrachos.

No sabía si había dicho eso en voz alta como repuesta a su pregunta o para convencerse a sí misma, pero no importó porque en seguida sintió los labios de Nate sobre los suyos.

Ella tardó a penas un segundo en reaccionar, cerrando los ojos y dejándose llevar.

Cuando sus pulmones pedían aire a gritos, se apartó ligeramente de Nate y le regaló una sonrisa, entre tímida y tierna.

—Vamos —dijo Nate, cogiendo la mano de Lee.

Ella caminó siguiendo los pasos del castaño, que se dirigía a la parte más apartada de la playa. Lugar donde sólo había parejas y gente que necesitaba alejarse del barullo de la fiesta.

Cuando estuvieron apartados, Nate no dudó ni un segundo en dejarse caer en la arena de cara al mar. Lee imitó al castaño y suspiró, clavando su mirada en la oscuridad del agua.

—No hay nada más bonito que el mar —dijo casi para sí misma. Nate asintió, dándole la razón.

Tras un largo rato en silencio, Nate se giró y puso su mano en la mejilla de Lee, haciéndola girar la cara para poder juntar sus labios, de nuevo.

—Me gusta esto —susurró, sin separarse.

Lee arrugó la nariz, juntando sus cejas ligeramente. Él sonrió y se alejó un poco, observándola detalladamente.

—No ir borrachos.

—Nate —susurró ella, pero él negó con la cabeza.

—No tienes que decir nada, tranquila.

Ella simplemente asintió y, aunque abrió la boca para responder, escuchó un carraspeo a su espalda. No le hizo falta girarse para saber que era Kie, así que directamente se levantó y miró a su mejor amiga.

Sabía que no habría ido hasta allí a interrumpir su momento con Nate así porque sí. Kie no solía hacer eso. Además, tenía la respiración agitada y la mirada preocupada.

—JJ...

No hizo falta ni una palabra más para que Lee cogiera la mano de Kie y ambas empezaran a correr de vuelta a la fiesta. Nate las imitó, por lo que los tres llegaron al mismo tiempo.

Lee bufó al ver a su hermano coger a JJ por los hombros, intentando tranquilizarlo. Era totalmente pésimo. Empujó a varias personas para que la dejaran pasar y poder acercarse a su hermano y a JJ, que la miraron en cuanto se percataron de su presencia.

—¿Me voy media hora y te metes en una pelea? —Lee alzó una ceja, colocándose entre John B y JJ. Él rodó los ojos.

—De incógnito, os lo recuerdo —murmuró Pope, que estaba también a su lado. Lee asintió, mirando a JJ directamente a los ojos.

—J, respira —susurró. Puso sus manos en la cara de JJ, asegurándose de que mantenía la mirada fija en ella.
Poco a poco, él suavizó su expresión y cerró los ojos.

John B y Lee suspiraron aliviados al ver cómo los hombros de JJ se relajaron cuando Lee movió sus manos desde sus mejillas hasta ellos.

El pecoso se giró para buscar a Kie con la mirada, ya que era la que más lejos estaba. Ella entendió lo que John B quería y se acercó a sus amigos hasta que estuvo al lado de Pope.

—Malditos Pogues —masculló Topper.

Lee apretó el agarre en los hombros de JJ y giró la cabeza para mirar a su hermano con la intención de pedirle que lo dejara estar. En lugar de con su hermano, Lee cruzó miradas con Pope y Kie, que no dudaron ni un segundo en coger a John B del brazo.

Lee volvió a mirar a JJ y él sonrió de lado, cosa que la hizo rodar los ojos molesta.

Odiaba que se metieran en peleas porque solían ser JJ y John B los que acababan hechos polvo. Y había pocas cosas en el mundo que Lee llevase peor que verlos así.

—Tenéis que parar de hacer esto —murmuró, girándose sobre sí misma.

Al ver a su hermano peleándose con el rubio, Lee bufó y cerró los ojos, tratando de tranquilizarse. No podía lidiar con esto si dejaba que los nervios se apoderasen de ella.

—No querrás que te ahogue igual que se ahogó tu padre, ¿verdad?

Las palabras de Topper cayeron sobre Lee como un cubo de agua helada, haciéndola abrir los ojos de golpe. Él le estaba dando la espalda, así que no se dio cuenta de que Lee se había acercado a ellos hasta que ella se puso delante de él y, con toda la rabia del mundo, plantó la palma de su mano en la mejilla del rubio.

—Ni te atrevas a nombrarlo, capullo.

John B tragó saliva y miró a su hermana. Al verla ahí de pie, sin intención de apartarse y con la respiración agitada, JJ y John B se miraron el uno al otro y en seguida, el ojiazul se acercó a ella.

—Lee, estate quieta —susurró JJ, parándose detrás de la pelinegra. Puso su mano sobre el brazo de Lee y le dio un par de caricias.

Ella simplemente se quedó quieta, observando la escena. Por mucho que quisiera intervenir, sabía que a) las posibilidades de que ella acabase mal, eran bastante altas y b) JJ no iba a dejarla separarse de él.

En un movimiento rápido, Topper metió la cabeza de John B en el agua y lo agarró del cuello, impidiéndole salir a respirar.

—JJ —murmuró ella. Cuando él la miró, ella tragó saliva —, suéltame. Lo va a ahogar.

Algo aturdido y abrumado por la situación, JJ asintió y aflojó el agarre, permitiendo que la pelinegra se alejase de él. Topper la miró, medio divertido.

—Topper, para.

—¿Por qué? —preguntó.

—¡Lo vas a ahogar! —gritó, señalando a su hermano. Topper soltó una carcajada, cosa que hizo que Lee sintiera su sangre arder. Se abalanzó sobre él, consiguiendo que perdiera el equilibrio y que su hermano pudiese, por lo menos, coger algo de aire, antes de que la mano de Topper volviese a hacer fuerza hacia abajo. 
Con la otra mano, empujó a Lee con fuerza, haciéndola caer al agua y dándose un golpe fuerte en la frente.

Cuando consiguió levantar la cabeza, Lee tuvo que parpadear varias veces para poder percatarse de lo que estaba pasando. Finalmente, dejó de ver borroso y tragó saliva al ver a
JJ sosteniendo la pistola apuntando la cabeza de Topper, mientras Kie, Pope y Sarah gritaban.

Ella tragó saliva y sacudió su cabeza, ignorándolos por completo, para centrarse en su hermano. Se puso de rodillas y puso la cabeza de su hermano, boca arriba, sobre ellas.

—John —dijo, dándole varias palmaditas en la mejilla. Él se limitó a hacer un ruido, cosa que alivió a Lee. Por lo menos estaba consciente.

Los cinco Pogues estaban, ahora, solos en la playa y lo único que se oían, eran los gritos de Kie, Pope y JJ. Lee echó la cabeza hacia atrás y, harta de escucharlos, los miró.

—Callaos —murmuró, demasiado flojo. Cogió aire —. ¡Callaos! —repitió. Sus tres amigos la miraron y se callaron, de inmediato.

°°°

Tras haber acostado a su hermano, Lee salió de la habitación de su hermano, seguida por JJ. Kie y Pope se habían ido un poco antes porque ya era muy tarde y, era probable que sus padres los estuvieran esperando y ninguno de los dos quería tener problemas.

La pelinegra bufó, mirándose en el espejo del baño. JJ se acercó a ella y miró el corte que tenía en la frente.

—Deja que te cure eso —susurró JJ y ella lo miró de reojo. Estaba enfadada con él. Él tragó saliva —. Vale que estés enfadada conmigo, pero eso hay que curarlo.

Ella suspiró y asintió, juntando los labios en una línea recta. Sin mirar al rubio, salió al salón, dejándolo solo en el baño mientras cogía algo de algodón y agua oxigenada.

—Esto te va a escocer —advirtió JJ. Ambos se habían sentado en el sofá, para estar más cómodos. Él acercó con cuidado el algodón empapado en agua oxigenada a la herida de su mejor amiga y la rozó con delicadeza. Ella hizo una mueca y cerró los ojos con fuerza, ante lo que él tragó saliva —. Avísame si quieres que pare, ¿vale?

—Cuánto antes terminemos, mejor —murmuró ella, repitiendo las palabras que siempre decía él, cuando era ella la que lo tenía que curar a él. JJ sonrió.

—En algún momento tenía que ser al revés —susurró él, haciéndola medio sonreír.

Terminó de curarla en silencio, de modo que lo único que se escuchaba eran los quejidos de la pelinegra y alguna que otra risilla burlona del rubio y muchos «si quieres que pare, paro.»

—Ya está —anunció él. Ella echó la cabeza para atrás y cerró los ojos. Él la miró, fijamente —. Lee —susurró. Ella abrió los ojos y lo miró de reojo —, lo siento.

—Lo sé —respondió ella, sonriendo de lado. Se incorporó ligeramente y miró a JJ a los ojos —. Sé que ha sido lo primero que se te ha pasado por la cabeza, porque te daba miedo y estabas enfadado. Lo sé, J. Es solo que... —Lee hizo una pausa para tragar saliva. Él asintió —No lo vuelvas a hacer, por favor.

Antes de que él respondiera, ella apoyó su cabeza en el hombro del rubio, que suspiró. Puso su mano en la cabeza de la pelinegra y acarició su pelo suavemente.

—¿Vas a dormir aquí?

—Tengo que ir a mi casa —respondió él. Ella se incorporó de nuevo y negó con la cabeza.

—JJ, no. Es muy tarde.

—Por eso mismo, Lee. Estará durmiendo. Si mañana se despierta y no estoy allí, va a ser peor. —JJ puso su mano en la mejilla de Lee y habló suavemente, intentando tranquilizarla. Aunque él estaba más nervioso que ella.

—J —protestó ella y él le sonrió de lado.

—Tienes que acostumbrarte a que no puedes estar siempre conmigo, Lee. Es duro, pero me tienes que compartir —bromeó él, tratando de quitarle hierro a la situación.

—Gilipollas —Lee murmuró, rodando los ojos. Le dio un empujón y se levantó del sofá, haciendo reír a JJ.

Acompañó al rubio a la puerta, donde ambos se pararon para mirarse el uno al otro. Lee hizo una mueca y abrió la boca, pero JJ negó con la cabeza.

—Estaré bien.

—Más te vale —susurró ella, mirándolo a los ojos. Se acercó a él y le dio un abrazo, rodeando la cintura del rubio con fuerza. Él no dudó en rodearla a ella, apoyando su barbilla sobre la cabeza de Lee. Cuando se separaron, ella sonrió —. Mañana estaré toda la mañana en la tienda, por si te apetece pasearte —dijo. Él asintió con una sonrisa ladeada.

—Hasta mañana, Lee —se despidió él.

—Hasta mañana, payaso.

_______________________________________

Sé que en la serie la fiesta no es tan importante, pero quería introducir a Nate y más o menos mostrar las relaciones de Lee con sus amigos. La relación de Kie y Lee la veréis más a fondo en los próximos capítulos, lo prometo.

Lo dicho, sentíos libres de comentar todo lo que queráis.

Espero que os guste y perdón por las posibles faltas.

🥰✨

Continue Reading

You'll Also Like

115K 12.4K 40
HEATHER ➷🖇🍓♡‧₊✧༄ ❝ you gave her your sweater.it's just polyester but you like her better wish I were Heather ❞ EN DONDE kenzie est...
310K 16.8K 31
❛ No estoy aquí para sanarte, no planeo cuidar de tú corazón roto ❜ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀OUTER BANKS // JJ MAYBANK ⠀⠀⠀⠀⠀⠀COMPLETADA (SIN EDITAR) ⠀⠀⠀⠀⠀⠀COVER BY : L...
408K 15.2K 32
Aprendemos a amar no cuando encontramos a la persona perfecta, sino, cuando llegamos a ver la manera perfecta a una persona imperfecta. LOGROS: JJ...
31.4K 1.6K 17
(Segunda temporada de FEELINGS) Han pasado días en los que Leah lucha por ser fuerte tras la supuesta muerte de su hermano. Muchos baches se pondrán...