Cayendo en tu red (Castiel CD...

By Laura-Stormblessed

849K 45.4K 21.1K

No sabía que las cosas podían cambiar en un instante. Que mis pensamientos fueran tan maleables según crecía... More

Cayendo en tu red (Castiel CDM)
Capítulo 1 Nueva vida
Capitulo 2 Un Acercamiento
Capítulo 3 Dos boletas
Capítulo 4 Una Cita
Capítulo 5 Grandes Sorpresas
Capítulo 6 ¿Bailamos?
Capítulo 7 Problemas
Capítulo 8 Amor y Chocolates
Capítulo 9 Trampa
Capítulo 10 Todo o Nada
Capítulo 11 Siempre a tu lado
Capítulo 12 Un Viaje a la playa
Capítulo 13 Señorita Verano
Capítulo 14 Fin de las Vacaciones
Capítulo 15 Dos chicos, una chica enojada y una apuesta
Capítulo 16 Una Carrera, un ganador y muchos problemas
Capítulo 17 Cita de Domingo
Capítulo 18 Las Pruebas del Equipo
Capítulo 19 El día del partido
Capítulo 20 Revelaciones
Capítulo 21 Chica Nueva
Capítulo 22 La Presentación
Capítulo 23 La Noche del Baile
Capítulo 24 La primera vez
Capítulo 25 Imán de problemas
Capítulo 26 Una decisión
Aviso
Capítulo 27 Discusión
One-Shot Especial de Navidad
Capítulo 28 Curando Corazones
Capítulo 29 Bromas y un celoso pero lindo pelirrojo
Capítulo 30 Una semana
Capítulo 31 All Of Me
Capítulo 32 "¿Qué diablos te pasa?"
Capítulo 33 Te sacare una sonrisa
Capítulo 34 Ámber la perra de la tercera guerra mundial
Capítulo 35 "Ella ya no es tuya"
Capítulo 36 Demasiado tarde
Capítulo 37 Revelaciones
Capítulo 38 Cumpliendo mi promesa (Parte 1)
Capítulo 38 Cumpliendo mi promesa (Parte 2) Maratón 1/3
Capítulo 39 "Eso es jugar sucio" Maratón 2/3
Capítulo 40 Por fin en Los Ángeles (Parte 1) Maratón 3/3
Capítulo 40 Por fin en Los Ángeles (Parte 2)
Capítulo 41 ¡Feliz no tan Feliz Cumpleaños!
Capítulo 42 Confía
Capítulo 43 Juntos
Capítulo 44 ¿Por qué no hacerlo oficial?
Capítulo 45 Ha vuelto
Capítulo 46 "¿Cómo ama alguien como tú?"
Capítulo 47 Recuerdos
Capítulo 48 Futuros planes y conversaciones nada agradables
Capítulo 49 "Ha sido un gran año"
Capítulo 50 "Debes ver esto como una oportunidad"
Capítulo 51 "Te quiero Castiel"
Capítulo 52 Sophie
Capítulo 53 Nuestro Primer Beso
Capítulo 54 Perra fría sin corazón
Capítulo 55 "Sera un año sin ti"
Capítulo 56 Party Hard
Capítulo 57 ¿Dónde está Ethan?
Capítulo 58 Tatuajes
Capítulo 59 "Quédate conmigo por favor"
Capítulo 60 "Eres un tonto"
Capítulo 61 Siempre estarán las amigas
Capítulo 62 "Hola Chica Ardiente"
Capítulo 63 Deseo que Castiel esté aquí conmigo
Capítulo 64 "Déjame hacer esto por ti Millhi"
Capítulo 65 "Somos un Equipo"
Capítulo 66 Mes Uno
Capítulo 67 Mes Dos
Capítulo 68 Mes tres
Capítulo 69 "Bienvenido a Casa"
Capítulo 70 Anna
Capítulo 71 "El plan ya estaba en marcha"
Capítulo 72 Maid
Capítulo 73 Los Marginados
Capítulo 74 La verdad
Capítulo 75 Aaron y Kate (Parte 1)
Capítulo 75 Aaron Y Kate (Parte 2)
Capítulo 76 Jessica Brown
Capítulo 77 Una Noche larga
Capítulo 78 Un fin de semana familiar
Capítulo 79 "Pide un deseo"
Capítulo 80 Cenas, enseñanzas y preocupaciones
Capítulo 81 Araña
Capítulo 82 La apuesta
Capítulo 83 Tiempo
Capítulo 84 Ira
Capítulo 85 Distancia
Capítulo 86 "Es culpa del vapor"
Capítulo 87 Mensaje no deseado
Capítulo 88 Operación Tate
Capítulo 89 "¿Te gustaría un masaje?"
Capítulo 90 "Sexo Vainilla"
Capítulo 91 Añoranza
Capítulo 92 "Yo nunca"
Capítulo 93 "Todo es mejor cuando tú estás"
Capítulo 94 "Voy a besarte"
Capítulo 95 Paz
Capítulo 96 "Eres terrible Millhi"
Capítulo 97 "No te hagas ilusiones"
Capítulo 98 "Tú y yo somos más que perfectos juntos"
Capítulo 99 "¿Dónde está?"
Capítulo 100 Danielle
Capítulo 101 Final Cayendo en tu red
ANUNCIO
IMPORTANTE
Escena Extra #1

Epilogo

3.3K 256 234
By Laura-Stormblessed


Millhi POV

-Te va a encantar el lugar, la otra vez Mira, Kate y yo vinimos y su comida es estupenda –Castiel y yo íbamos en el coche de este en camino a un restaurante elegante para celebrar nuestros ocho años de casados, sin embargo Castiel no se encontraba de ánimo esta noche, en realidad estaba bastante amargado desde hace semanas y he dedicado todo mis esfuerzos para que por lo menos sonría, pero eso ha sido misión imposible.

-Bien –Dijo con tono cortante. En otras circunstancias lo hubiese mandado a la mierda y hubiese hecho que diese la vuelta para que me lleve a casa, pero sabía que lo tenía de esa manera y no podía enojarme por ello, sin embargo esperaba que la sorpresa que tenía para él esta noche me devolviera a mi Castiel pícaro y divertido.

Llegamos al restaurante y en la entrada estaba la recepcionista quien recibía a los clientes. El restaurante era bastante popular por lo tanto había que hacer una reserva unas semanas antes para poder entrar.

-El nombre de la reserva, por favor –Dijo la señorita mientras nos miraba con una gran sonrisa, si ha estado toda la noche así no me imagino lo mucho que deben de doler sus mejillas.

-Millhi Withmore –Le dije, ella miro en un libro buscando mi nombre, tengo que admitir que eso le daba un toque más sofisticado al lugar.

-Aquí esta. Acompáñenme por aquí Sr. y Sra. Withmore –Seguimos a la mujer hasta una mesa para dos, estaba adornada con un mantel de color beis, unas hermosas orquídeas como centro de mesa y unas servilletas en forma de cisne en ambos platos. Estaba bastante encantada con eso, casi me pongo a saltar como una niña.

-Ven –Castiel corrió la silla para mí y antes de sentarme pude ver que una de las comisuras de sus labios se había alzado, fue algo mínimo y cortó, sin embargo era lo más cercano que había visto de una sonrisa en su rostro en semanas. Castiel se sentó en su lado y me miró fijamente a los ojos –Estas preciosa esta noche

-¿Y cuando no lo estoy? –Ahí estaba otra vez, él se estaba esforzando por contener una sonrisa. Imaginó que el hecho de que sea nuestro octavo aniversario ablando un poco su amargura.

-Siempre estas preciosa –Castiel estaba siendo bastante cortes y sabía que se estaba conteniendo, esperaba que me lanzara algún comentario picante, pero bueno, es mejor esto que nada.

-Y tú también estas bastante guapo –Y era verdad, pese a que seguía habiendo algo del chico malo que conocí hace once años, la edad solo le había dado un clase diferente de belleza, sus facciones eran ahora más afiladas y se había vuelto todo un hombre, en todo el sentido de la regla.

-Gracias –La noche transcurrió tranquila, demasiado para mi gusto. Pese a que Castiel estaba menos amargado que antes aún seguía con esa estúpida cortesía y tranquilidad que me estaba volviendo loca. Lo único que me mantenía en calma era saber que mi sorpresa iba a tráele de vuelta.

-Estuvo deliciosa la cena –Dije intentando reabrir una conversación con él, en vez de contestarme con algo relacionado me sorprendió bastante diciendo otra cosa.

-Tengo un regalo para ti –La sorpresa era tan clara en mi rostro que Castiel tuvo que aclararse –Sé que he sido un completo idiota en estas últimas semanas e incluso hoy, pero no sabes lo feliz que estoy por cumplir ocho años juntos, como esposos. Esto es para ti

Castiel me entrega una caja de tamaño mediano de terciopelo negro, sabía por el estilo de la caja que adentro había una joya, sin embargo no sabía si era un collar o una pulsera. En todo el tiempo que llevamos juntos no es la primera vez que Castiel me da joyas, en realidad cada cosa que me ha dado Castiel solo puede ser llamada impresionante. Aun no olvido la vez que por mi cumpleaños número veinticinco me regalo un viaje para ambos a Corea del sur o el auto deportivo que me dio cuando me gradué de la universidad, pero, ahora ya no me siento tan culpable por sus ostentosos regalos ya que he sido capaz de retribuirle de la misma manera y gracias a mi trabajo en la bolsa de valores de Londres gano bastante dinero para darle a Castiel todo lo que se merece.

-Vamos, ábrela –Abrí la caja y dentro había una hermosa pulsera de plata con ocho dijes colgando de ella, Castiel vio la pregunta en mis ojos, así que se aventuró a contestar –Uno por cada año que llevamos de casados, cada año te regalaré otro más para añadirlo a la pulsera

-Muchas gracias mi amor –Lo atraje hacia mí para poder besarle –Es bellísima ¿Me ayudas a ponérmela? –Castiel tomo la pulsera entre sus manos y la abrocho sobre mi muñeca, la mire con mucho cariño.

-Me alegra ver que te gustó mi regalo –Asentí con una sonrisa permanente en mi rostro. Era mi turno de darle mi sorpresa.

-Hablando de regalos. También tengo algo para ti –Castiel arqueó la cejas en curiosidad. Saqué la bolsa de regalo de mi bolso y se la entregué –Espero que te guste

Castiel sacó un gorro de lana blanco de la bolsa y lo miro bastante confundido ya que él no usa gorros de lana incluso aunque sea invierno nunca coloca nada en su cabeza.

-No es que no me guste, pero en serio no esperaba esto –Miro el gorro de lana más detenidamente –Y creo que se equivocaron en el tamaño, esto es demasiado pequeño para mí –Me reí sin poder evitarlo ante la clara confusión de Castiel.

-Hay más en la bolsa –Castiel metió su mano nuevamente en la bolsa y saco un papel doblado, si antes estaba confundido, ahora se veía totalmente perdido.

-¿Qué es esto?

-Léelo y lo averiguaras –Castiel abrió el papel doblado y comenzó a leer en voz alta.

-Clínica Central de Londres...Millhi Withmore...P-prueba de embarazo positiva –Castiel me miró totalmente aturdido y por un momento pensé que se iba a desmayar ahí mismo -¿Estas embarazada?

-Sí, un mes para ser exactos

-Tendremos un hijo –Parecía que él decía esas palabras más para sí mismo que para mí, después de verlo en shock por un minuto, Castiel se levantó de la silla, me tomó en sus brazos y me dio vueltas. No pude evitar reírme contra su cuello -¡Vamos a tener un hijo!

Castiel me dejo sobre mis pies con cuidado y luego se arrodillo quedando frente a mi vientre

-Mi pequeño bebe –Vi que los ojos de Castiel comenzaban a cristalizarse y eso solo hizo que empezará a derramar lágrimas por mi rostro –Soy yo, tu papá. Solo quería decirte que te amo muchísimo y que intentes no darle tantos malestares a tu madre. Ambos estamos ansiosos por tu llegada –Ahora no podía controlar las lágrimas al ver como Castiel le hablaba a nuestro hijo y dejaba escapar una que otra lágrima.

La razón de la amargura de Castiel es porque llevábamos un año entero intentando quedar embarazados pero no había pasado. Fuimos a diferentes doctores y recibimos varios tratamientos de fertilidad pero ninguno había funcionado. En una de esas consultas el doctor dijo que lo más probable es que durante el aborto involuntario que había tenido en mi adolescencia algo debió de haberse dañado en mi aparato reproductor y que por lo tanto eran pocas las posibilidades de que pudiera quedar embarazada, al recibir esa noticia me deprimí y me amargue mucho y Castiel hacia todo lo posible por animarme, pero me sentía enojada y dolida y no recibí con agrado ninguno de sus intentos, en todo eso no me había dado cuenta que Castiel estaba reprimiendo sus sentimientos de impotencia no solo por verme sufrir y no poder hacer nada, sino que a él también le dolía le hecho de no poder tener un hijo, cuando me di cuenta de lo que le estaba haciendo a Castiel, ya era demasiado tarde y había dejado que se consumiera en su amargura y quería hacer de todo para corregirlo, por eso cuando empecé a sentir mareos y me di cuenta de que tenía retraso, decidí hacerme la prueba sin decirle nada a Castiel para no darle ilusiones, pero por suerte y para alegría de ambos la prueba había dado positivo.

-Gracias Millhi, gracias por este maravilloso regalo –Castiel tomó mi rostro entre sus manos y me beso con muchas pasión y cariño. Me hacía feliz ver que volvía a ser el mismo de siempre y lo emocionado que estaba con la noticia. Definitivamente no pude haber pedido un mejor esposo.

***

-¿Estás lista mamá? –Asentí emocionada ante la pregunta de la doctora de maternidad, por fin hoy podríamos saber el sexo del bebé. Castiel sostenía mi mano con cariño y al verle vi una gran sonrisa en su rostro, él estaba tan emocionado con esto tanto como yo.

-¿Qué tal ha sido el embarazo? –La doctora comenzó a hablar mientras frotaba esa crema fría sobre mi estomagó el cual ya estaba bastante grande y eso que solo tenía cinco meses, no me imaginaba como estaría en el último mes de embarazo.

-Aparte de que se come todo lo que hay en la cocina, parece estar bien –Le responde mi esposo con una sonrisilla burlona, le golpee el brazo como si estuviera molesta y el me beso en la mejilla para disculparse, lo cual hizo que la doctora sonriera ampliamente.

-Pues aparte de lo que ya menciono mi esposo, he tenido algunas nauseas, pero nada muy molesto...Oh y ya hemos podido sentir las pataditas del bebé

-¿Hace cuánto las siente? –Me pregunta la doctora mientras pasa la máquina del ultrasonido por mi estómago y sigue concentrada en la pantalla.

-Hace como un mes más o menos

-¿Un mes? –Castiel responde que sí y la doctora nos mira a ambos con semblante serio.

-Eso solo confirma mis sospechas, aunque me sorprende bastante no haberlo visto en la primera ecografía

-¿A qué se refiere? –Preguntó algo nerviosa aprieto la mano de Castiel en busca de consuelo, él se da cuenta de ello y pasa su mano por mi cabeza y empieza acariciarla con ternura para relajarme.

-Felicidades mamá, papá. Van a tener gemelos, ambos varones

-¿Gemelos? –Exclamamos Castiel y yo al unísono. Realmente nunca me plantee la posibilidad de que fueran dos niños y mucho menos después de que en el primer ultrasonido nos hayan dicho que solo era un bebé. Miro a Castiel y veo que él esta tan sorprendido como yo.

-¿Esta segura? –Pregunta Castiel como si aún no pudiera creerlo.

-Totalmente segura, pueden verlo por ustedes mismos –La doctora nos deja ver la pantalla donde lo único que soy capaz de ver son manchas grises y negras lo mismo que la primera vez, aunque si me esfuerzo un poco, esta vez soy capaz de distinguir dos formas en la pantalla, asumo que son mis hijos.

-Son hermosos –Por otra parte parece que Castiel si es capaz de verlo con total claridad, igual que la primera vez parece emocionado y la sorpresa de que son gemelos quedó relegada a segundo plano, porque Castiel ya asimiló que son suyos, sus hijos, ambos y eso lo tiene en el borde de la felicidad.

Castiel POV

-No quiero dejarte sola –Le digo a Millhi firmemente decidido, ella por su parte rueda los ojos por enésima vez.

-Estaré bien, tienes que ir –Ella me mira desde su lugar en la cama con sus brazos alrededor de su barriga. Para mi Millhi es la mujer más hermosa que existe, pero verla así embarazada de nuestros hijos, hace que la vea más hermosa que cualquier estrella en el cielo.

-¿Y si te pasa algo? ¿O necesitas ayuda para algo?

-Por enésima vez te tengo que recordar que estoy embarazada, no invalida amor, y amo el hecho de que por estos ocho meses hayas estado pendiente de mí y de cualquier necesidad o antojo que tuviese, pero solo será una noche, además los niños no nacen hasta dentro de dos semanas, así que no tienes que preocuparte por eso –Sabía que ella tenía razón, además de que Millhi había tenido unos antojos bastante raros y difíciles de conseguir. Un día estábamos pasando los canales buscando algo que ver, hasta que pasamos por uno de comida y ella escucho que mencionaban un helado de tocino y de inmediato quiso uno, tarde dos horas en dar con una tienda que lo vendieran, pero al final lo había conseguido.

-Pero...

-Pero nada, hoy es la despedida de soltero de Drew y tienes que estar ahí para él –Ella se ríe al recordar eso –Aunque sabía que tarde o temprano esto pasaría, no puedo creer que por fin deje la putería –Me reí sin poder evitarlo, es verdad que eso sorprende bastante.

-Está bien, iré, pero prométeme que si te sientes mal por más mínimo que sea me llamarás

-Lo prometo –Me acerqué para besarla –Mándale mis saludos a los chicos y muchas felicidades a Drew

-Lo haré –Me agache para estar frente a su ya enorme barriga para poder hablarle a mis hijos –Papá se ira por un rato, pero promete regresar. Cuiden de su madre mientras no estoy. Los amo un montón.

-Amo cada vez que haces eso –Yo por mi parte amaba ver a Millhi embarazada de mis hijos y amaba también hablarles, quería que supieran que a su llegada iban a ser bien recibidos y amados.

-Te amo –Millhi susurró un te amo en respuesta antes de besarme nuevamente. No podía pedir una mejor esposa.

***

-Sí Castiel pudo dejar embrazada a Millhi de gemelos, yo lograre que Lenah quede embarazada de trillizos –Dice Drew con total seriedad, yo niego con la cabeza divertido, mientras los demás se parten de risa.

-Ni siquiera te has casado con ella y ya planeas dejarla embarazada –Le dice Aaron divertido mientras se sirve otro trago de whiskey –Por lo menos deberías esperar un tiempo –Drew se encogió de hombros mientras tomaba un sorbo de su cerveza.

-Hablando de embarazos ¿tú y Kate piensan tener hijos? – Le pregunta Drew desviando la atención hacia Aaron.

-Sí, pero ella quiere terminar la temporada de Voleibol antes de hacerlo, será dentro de un año más o menos –La esposa de Aaron, Kate es voleibolista profesional y bastante famosa, la había visto jugar en varias ocasiones y tenía que admitir que era condenadamente buena jugando.

-Que bien por ustedes –le responde Drew alzando el vaso hacia Aaron, este alza el vaso hacia él también en respuesta.

-Ahora que lo pienso Mirajane y Millhi deben de estar bastante emocionadas –Dice Liam uniéndose a la conversación. Últimamente se le ve más feliz y eso solo se debe a la chica con la que está saliendo. Liam ha tenido varias novias en lo últimos años, pero nuca se ha interesado realmente en una como lo está ahora de Diana, la he visto un par de veces y parece una chica bastante agradable y se nota a leguas que está muy enamorada de Liam. A lo mejor sienta cabeza con ella.

-Emocionadas es quedarse corto –Contesta Lysandro y yo me rio para mostrar que estoy totalmente de acuerdo con él –Después de todo Will y los gemelos solo se llevarán un mes así que lo más probable es que se lleven bastante bien

-O que sean inseparables como quieren las chicas –Hace un mes había llegado el primer bebé a esta peculiar familia. William o como todo los llamábamos Will es el hijo de Lys y Mira había nacido hace un mes y era un bebé precioso, todos nos peleábamos por cargarlo cada vez que no reuníamos, el niño tenía los ojos de Lys lo cual era increíble y el cabello color chocolate de Mira, era un niño muy lindo y estaba seguro de que cuando sea grande será bastante solicitado, por su bien esperemos que Mira no sea mamá águila –Además que ellas creen que sería adorable ver como nuestros hijos se vuelven mejores amigos. Igual que nosotros

-Quiero ver que digan eso cuando sean adolescentes y sean la tapadera para el otro –Dice Ethan divertido –Y quien sabe con qué locuras saldrán –Ethan abre los ojos como si se hubiera dado cuenta de algo - Yo seré el tío genial, seguirán cada uno de mis consejos

-Eso si me preocupa bastante –Dije conteniendo una sonrisa a lo que Ethan me fulmino con la mirada y los demás rieron por eso –No quiero que mis hijos sean mujeriegos

-Si son mujeriegos no sería culpa de Ethan sino tuya ¿Se te olvida como eras antes de Millhi? –Dice Drew a lo que es mi turno de fulminarlo con la mirada –Además de que esos niños me van a amar más a mí, ya poco a poco he coaccionado a Will para que me prefiera más a mí, no habrá problema con los gemelos

-Eso solo se debe a que has estado comprando a mi hijo con regalos –Dice Lys después de darle un sorbo a su cerveza. Tengo que decir que me alegra que Millhi me haya hecho venir, ya que esto está saliendo mucho más divertido de lo que esperaba.

-Yo lo miro más como un incentivo –Le responde Drew con total sinceridad y nuevamente estábamos riéndonos antes su comentario.

-Pasando a un tema más interesante –Dice Aaron y todos ponemos la atención en él – ¿Es verdad que el embarazo las pone todas hormonales?

Tanto Lys y yo nos echamos a reír, lo cierto es que si, era verdad lo que había preguntado Aaron y si Mirajane se había comportado por lo menos la mitad de lo que lo había hecho Millhi entonces Lys se había divertido tanto como yo.

El embarazo hizo que Millhi me saltará encima cada dos por tres y obviamente no me quejaba por ello, por el contrario amaba hacer el amor con mi chica y era bastante divertido ver como Millhi se ponía cuando no podía cumplir con sus deseos en el momento en que ella quería y también la excitación en sus ojos por tenerme durante horas complaciéndola en la habitación, tengo que admitir que esa etapa la disfrute bastante, aunque en realidad para mí todo el embarazo de Millhi ha sido como un sueño, sé que lo he repetido varias veces ya pero amaba verla embarazada, se veía espectacularmente hermosa.

-Eso tendrás que averiguarlo tú solo –Le dije a lo que Aaron frunció el ceño pero dejo el tema pasar, la noche fue divertida y la pasamos muy bien, me alegraba ver lo feliz y emocionado que estaba Drew por su boda con Lenah que sería dentro de una semana, sé que normalmente la despedida de soltero se hace un día antes, pero la siguiente semana estaremos muy ocupados con las grabaciones del nuevo álbum, así que decidimos adelantarlo.

Mientras el camarero traía otra botella de whiskey saque mi celular para enviarle un mensaje a Millhi y preguntarle si todo estaba bien, sin embargo la preocupación llegó en el instante en que vi que no tenía señal en el celular ¿Y si Millhi me había llamado?

-¿Alguno tiene señal? –Pregunté y todos miraron sus celulares para después negar con la cabeza. Mierda, tenía un muy mal presentimiento. Sabía que aún faltaba dos semanas para el parto y puede que estuviese siendo algo paranoico, pero necesitaba saber que Millhi estaba bien.

Les dije a los chicos que iba a irme porque estaba preocupado por Millhi, los chicos decidieron que era mejor terminar la fiesta, todo salimos y llamamos dos taxis, por lo menos afuera ya había algo de señal, pero la dicha de eso se fue en el momento en que vi todas las llamadas perdidas que tenía, no solo de Millhi sino también de Mirajane y Kate y eran muchas llamadas, al ver la expresión en los chicos, vi que ellos también tenían varias llamadas perdidas, mi mal presentimiento solo aumento y cuando estaba dispuesto a llamar a Millhi, mi celular comienza a sonar. Es Mirajane.

-Hola Mira ¿Dime por favor que está todo bien?

-Maldición Castiel, Kate y yo hemos hecho hasta lo imposible por dar con alguno de ustedes, pero ninguno se digna a contestar el teléfono

-Lo siento Mira, no teníamos señal y hasta ahora nos dimos cuenta de ello ¿Esta Millhi bien?

-Los bebés se adelantaron y ella está en trabajo de parto. Te necesita. AHORA

Solté una sarta de maldiciones mientras les decía a los chicos que los bebés iban a nacer. Por suerte los taxis llegaron pronto y nos dirigimos al hospital Central de Londres. Me sentía bastante nervioso, no solo por el hecho de que temía no llegar a tiempo, sino que además no había asimilado el hecho de que en menos de nada, mis hijos nacerían, estaba asustado por no ser capaz de ser un buen padre para ellos.

-Todo estará bien Castiel –Me dice Lys para darme ánimos, asiento porque me veo incapaz de hablar lo único que quiero es llegar junto a mi esposa y mis bebés.

Llegamos al hospital y por suerte la recepcionista fue lo suficientemente amable para decirnos el número de habitación donde se encontraba Millhi sin la necesidad de hacernos esperar, aunque eso se debió a que Drew le prometió un álbum firmado, y visto que era nuestra fan pues aceptó de inmediato. Llegamos al pasillo donde se encontraba la habitación de Millhi, Kate estaba afuera esperándonos.

-Sera mejor que entres, Millhi se está volviendo loca ahí adentro y lo único que necesita en este momento es a ti

-Gracias Kate –Entre y vi a Mira intentado calmar a una Millhi que se encontraba en una bata de hospital y parecía que le dolía todo –Millhi, aquí estoy –Ella giro su rostro hacia mí y vi el alivio reflejarse en sus ojos

-Ahora siento que puedo hacer esto, o tal vez no. Castiel, estoy asustada

-Lo sé preciosa, sé que lo estas –Me acerqué ella y ocupe el lugar de Mirajane, Millhi apretó mi mano con demasiada fuerza –Pero estoy aquí contigo, somos un equipo y lograremos que esto funcione –Susurre mientras besaba su frente sudada. Le dije que respirara e intente calmarla como nos enseñaron en las clases de paternidad.

-Me alegra ver que el padre ya se encuentra aquí –Entro una doctora con unos papeles en la mano –Lamentablemente tengo malas noticias –Me tensé al instante ante las palabras de la doctora, pero tenía que mantener la calma por Millhi- Uno de los bebé se encuentra al revés y tiene el cordón umbilical enrollado en su cuello, es necesario hacer una cesaría

-¿Puedo estar con ella?

-Lo siento, pero no, tendrá que quedarse fuera –Asentí con un miedo aún más creciente en mi interior, comencé a susurra palabras bonitas a Millhi para que se tranquilizara ya que sabía que estaba tan asustada como yo. Deje que se la llevaran a la sala de cirugía mientras esperaba con todo los demás afuera. Después de una media hora salió la doctora de partos y me comunico las peores noticias que había recibido alguna vez en mi vida.

-Hay más complicaciones de lo que pensábamos, hay un problema con los bebés y tengo que informarle que nos encontramos ante un embarazo de alto riesgo. Hay dos posibilidades y tendrá que tomar una decisión Sr. Withmore

-¿Cuáles son las dos posibilidades? –Todos se reunieron a nuestro alrededor y sentí de inmediato la tensión que había en el aire.

-Podemos hacer todo lo posible para salvar a su esposa pero hay una gran posibilidad de que ninguno de los bebés sobreviva

-¿Y la otra opción? –La primera me rompía el corazón esperaba que la segunda fuera mejor que esa.

-Podemos intentar salvarlos a los tres, pero la posibilidad de perderlos es mucho más grande, estaríamos hablando de un 30 contra un 70 por ciento de posibilidad.

-O pierdo a mis bebés o puede que pierda a toda mi familia ¿Eso es lo que me está diciendo? –La doctora asintió con pesar.

-Le daré un minuto para que tome la decisión, necesitamos proceder pronto

Apenas la doctora se fue sentí como mis amigos se acercaban más a mí para darme su apoyo, lo único que pude hacer fue cubrir mi boca con una mano para contener el sollozo que estaba a punto de salir. Maldición, como se supone que se tome una decisión así. No concibo la idea de perder a mis bebés, mis hijos, pero tampoco quiero perder a Millhi, mi esposa, el amor de mi vida. Si escogía a Millhi, no sabría si podía vivir con la perdida de mis hijos y tampoco sabía cómo estaría Millhi después de ello, y con la segunda opción estaba la posibilidad de salvar a mi familia, pero era mayor la posibilidad de perder a las tres personas que más amo en este mundo.

-¿Ya tomo una decisión Sr. Withmore? –Asentí y con el corazón en el puño di mi respuesta.

-Haga todo lo posible por salvarlos a los tres

La doctora se alejó y volvió a la sala de cirugía. Mi corazón estaba rompiéndose por dentro al temor de perder a mi familia. Ni siquiera había visto a mis bebés y el hecho de que puede que cuando lo haga estén muertos me aterra demasiado, y mi Millhi, Dios, no sabría qué hacer sin ella a mi lado. El hombre que soy ahora se debe en gran parte a Millhi y lo que su amor incondicional ha hecho en mí. Sabía que si las cosas terminaban mal no iba a ser capaz de recuperarme de eso, ni siquiera creo ser capaz de concebirlo.

-Todo estará bien Castiel –Mirajane me rodea con sus brazos con cariño, sabía que la idea de perder a su prima que además es su mejor amiga, la aterraba un montón, pero ella era buena y sabía que yo lo estaba pasando mucho peor, por eso intentaba verse fuerte para mi –Millhi es fuerte, ella luchara por su vida y por la de sus hijos, no solo por ellos sino también por ti, ella te ama como nadie en este mundo. Luchara por tener a su familia completa –Me limite a asentir y dejar que me abrazara.

Durante las tres horas que duró la cirugía le pedí a Dios que mantuviera a mi familia a salvo, que pudiera reunirme con mis hijos y mi esposa sanos y salvos. La doctora salió con semblante serio y nada en su expresión me decía como habían ido las cosas.

-Felicidades Sr. Withmore, tiene dos hijos fuertes y sanos –Solté un suspiro y deje que las lágrimas de alivio se deslizaran por mis mejillas, no me importaba que hubiera más gente viendo, lo único que me importaba era saber que mis hijos estaban bien.

-¿Y mi esposa?

-Ella...

Millhi POV

Me desperté con un dolor en el estómago, mi mente empezó a aclararse mientras recordaba donde me encontraba. Necesitaba ver a mis bebés, quería saber si estaban bien.

-Castiel...-Susurré mientras intentaba levantarme, alguien llegó a mi lado para ayudarme y mi corazón se tranquilizó al darme cuenta que era mi esposo –Nuestros hijos ¿Dime qué están bien?

-Lo están preciosa, nacieron sanos y fuertes pese a que se adelantaron dos semanas

-¿Dónde están? ¿Quiero verlos?

-Y lo harás pero antes tengo que contarte algunas cosas –Castiel empezó a narrarme los sucesos después de que entrara a la sala de cirugía, me dijo que había tenido un embarazo de alto riesgo y que él se vio en la obligación de tomar una decisión, poner mi vida como prioridad pero con una gran posibilidad de perder a nuestros hijos o intentar salvarnos a los tres, pero era mayor la posibilidad de perdernos. Al final tomó la segunda decisión, y él no sabe lo orgullosa que estoy de él por haberla tomado.

-Siento que hayas tenido que pasar por algo así, mi amor. No puedo imaginar el miedo que sentiste al saber que podías perdernos a los tres, lo siento mucho, aun así estoy orgullosa de ti y me alegra que hayas tomado esa decisión, te amo muchísimo.

-Y yo te amo a ti. Ahora deja que te presente a nuestros hijos –Castiel salió de la habitación y volvió junto con Mirajane cada uno cargando a uno de mis niños –Mira, mi bebé, esta es tu mami –Tomé al niño que Castiel estaba cargando y de inmediato la lagrimas saltaron de mis ojos, acababa de sentir el amor más bello que existe en el planeta, el de una madre por su hijo.

-Elliot...-Susurré mientras acariciaba la mejilla de mi hijo, Castiel me miro sorprendido y se agacho para estar a la altura de ambos -¿Te gusta ese nombre?

-Es imposible que no lo haga. Gracias mi amor –Elliot era el nombre del padre biológico de Castiel, y por él quería que uno de mis hijos se llamara así.

-Dame a mi otro bebé –Le dije a Mira mientras que Castiel tomaba a Elliot de mis brazos. Mirajane me entrego a mi otro hijo y sentí ese mismo amor que cuando sostuve a Elliot, Dios, amaba a mis hijos como nada en este mundo.

-¿Cómo quieres llamarlo? –Le pregunté a Castiel quien se encontraba arrullando a Elliot

-No sé tú, pero tiene cara de Julian –Me reí y mi bebé tomo mi pulgar entre su pequeñas manos, Dios, era simplemente maravilloso.

-Julian será –Le dije al bebé y sentí que apretaba con más fuerza mi dedo, creo que le gusta su nombre.

-Tengo que admitir que ustedes si saben cómo hacer bebés hermosos –Drew entró a la habitación seguido de los demás chicos y Kate –Imagino que debe de estar en los genes de las Tate, porque Will es igual de precioso que estos dos hermosos niños –Reí ante el comentario de Drew y supe que era momento de presentar a mis bebés a su nueva familia.

-Chicos, les presentó a Elliot y Julian Withmore

***

-Mami, mami –Mis dos hijos entraron gritando y corriendo por la habitación en mi búsqueda. Elliot y Julian eran ahora unos hermosos niños de tres años que además eran bastante hiperactivos.

-Hola mis amores –Dije mientras alzaba a mis hijos y los colocaba en cada una de mis piernas. Julian y Elliot eran totalmente iguales además de que eran la viva imagen de Castiel, la primera vez que abrieron sus ojitos, estuve realmente feliz por ver que eran grises como los de mi esposo, pero además su cabello era totalmente negro igual que el de Castiel antes de teñírselo. Drew dijo que no había duda de que Castiel fuera el padre de esos niños, lo golpee por ese comentario mientras todos reían -¿Qué tal estuvo el parque?

-Papi nos enseno a jugar futbol –Dice Elliot emocionado mientras me explica lo que Castiel le enseño.

-¿Y tú Julian, no te gustó jugar futbol con tu papá? –Julian negó con la cabeza mientras fruncía el ceño – ¿Entonces no te divertiste mi amor? –Los ojos de Julian se iluminaron ante el recuerdo de algo

-El tío Ly y Mill vinieron al palque con nosotos y papi y tío tocalon una canción para nosotos –Le sonreí feliz por eso, pese a que físicamente mis hijos eran iguales, empezaba a notar que tenían gustos y personalidades bastante diferentes, mientras Elliot era más extrovertido y amaba embarrarse de cualquier forma, mi Julian era más tranquilo y algo tímido, por su parte el prefería estar en casa construyendo cosas con sus legos.

-Hola mi amor –Castiel entró en la habitación y se acercó para darme un beso rápido en la boca y luego beso la cabeza de nuestros hijos pese a que acababa de llegar con ellos. Castiel amaba a esos niños más que cualquier cosa –Recuerden que les dije que hay que tener cuidado con mami, no olviden que dentro de ella está su nueva hermanita

-No quelo una helmana –Dijo Elliot y Julian se puso de su lado, no era la primera vez que decían eso pero ambos esperábamos que cuando la niña naciera la quisieran.

-Ya tenemos a Mill –Julian y Elliot eran inseparables, pero no eran un dúo sino un trio, mis hijos y el hijo de Mira y Lys, Will eran como uña carne iban de arriba para abajo juntos y tenía que decir que me encantaba eso.

-Cambiaran de opinión cuando la vean –Me dijo Castiel y yo me resigne esperando que fuera así.

Castiel POV

-No me parece buena idea que vayas –Le dije a mi hija mientras ella se ponía en posición de defensa, sabía que iba a reñirme por eso.

-Ya tengo 17 años papá, además mis hermanos y mi primo van a estar ahí

-Pero ellos ya tienen 20, tú sigues siendo menor de edad

-Pero Izzy también va a ir y ella tiene mi misma edad –Esta pelea no iba a ser fácil, Laia no pensaba rendirse con eso y mi hija había sacado el carácter de su madre así que esto solo se iba a poner más complicado.

-Aun no creo que Aaron le haya dado permiso a Isabelle para ir a esa fiesta, imagino que eso debe de ser obra de Kate –Izzy es hija única y nació en el mismo año que Laia y eso hizo que fácilmente se llevarán y ahora son prácticamente mejores amigas.

-Por favor, papá, sabes que he sido buena hija y he tenido buenas notas –Laia se acercó para abrazarme, ella sabía que era la niña de mis ojos y me era difícil negarle algo a ella, lo mismo que me pasaba y me sigue pasando con Millhi. A diferencia que con los gemelos, el nacimiento de Laia fue por parto natural y sin complicación alguna, mi niña era tan parecida a Millhi que quede encantado con ella, lo único diferente eran sus ojos que eran iguales a los míos y los de sus hermanos. Amaba a todos mis hijos por igual, pero Laia era la niña de mis ojos, la cuidaba más que a Elliot y a Julian.

-¿Va a ir ese chico? –Pregunté y supe que ella iba a mentirme cuando se demoró en responder, pero alguien ya lo había hecho por ella.

-Sí –Por eso amaba a mis hijos, Julian y Elliot entraron en la sala de estar y respondieron a la pregunta que le había hecho a Laia –No nos gusta ese chico –Dice Julian y obviamente Elliot lo apoya.

-Si a tus hermanos no les gusta a mí tampoco

-Adam no es mal chico, además es amigo de Alison y a ella le cae bien –Alison es la novia de mi hijo Julian quien también resulta ser la hija de Drew y Lenah. Al año de estar casados Lenah quedó embarazada. Alison fue la primera niña de la familia y todos estábamos encantados con ella, luego llego mi Laia y para suerte de Alison ya no íbamos a alejar a los hombres solo de ella.

Sin embargo ninguno esperó que Julian y Alison terminarían enamorándose visto que habían crecido como si fueran familia, Drew no se lo tomo bien la primera vez, pero mi hijo es un buen chico, un artista de corazón, lo supe en el primer momento en que tomo una guitarra entre sus manos y lo volví a saber cuándo le oí cantar y sabía que amaba a Alison de la misma manera que ame a Millhi en mi adolescencia y la sigue amando aún, todos nos dimos cuenta de que ese amor era mutuo y para siempre, no tenía sentido interponerse, además de que Drew quiere a mis chicos, después de todo los crio como si fueran su sobrinos.

-Adam es tres años mayor que tú y tiene tatuajes por todo su cuerpo, eso además sin contar todo lo que se dice en la universidad sobre él –Le dice Elliot, mis hijos son demasiado sobreprotectores con su hermana y pese a que Millhi cree que exageran yo estoy bastante contento por ello.

-No puedes juzgar a alguien de esa forma

-Eso es verdad –Otra voz se agrega a la conversación y sabía que podía dar esta batalla por perdida –Ya le habíamos dado permiso a Laia para que fuera a la fiesta además de que estarán su hermanos y Will, no va a pasarle nada –Millhi me mira con mirada severa, esperaba poder persuadir a mi hija antes de que ella llegara.

-Gracias mamá, eres la mejor –Laia sale a abrazar a su madre y ella le devuelve el gesto con ternura. Los chicos aceptan eso refunfuñando y los tres salen de la casa, sin que antes Millhi les dé un beso a cada uno y les pide que no lleguen tan tarde y que tengan cuidado.

-No me gusta ese chico para mi hija –Digo una vez que estamos a solas. Ya había tenido la posibilidad de conocer a Adam ya que al igual que Elliot él también está en el equipo de futbol americano de la universidad en la que él asiste. Un día vino a recoger algo que le había prestado a Elliot y esa fue la primera vez que hizo contacto con mi hija, por la forma en que ambos se miraban supe que esto no iba a ser bueno, y como resulta ser compañero de Alison y Laia se la pasa bastante ahí junto con Izzy, tuvo bastante tiempo para relacionarse con ese chico y mi hija es preciosa, obviamente Adam no quedó indiferente ante ella y para mi desagrado ahora son novios –Le va a romper el corazón

-¿Por qué? –Pregunta Millhi algo enojada, y en realidad no estaba preguntando simplemente así le daba más énfasis a lo que iba a decir a continuación – ¿Por qué se nota a leguas que es un chico malo?

-Sí, es un chico malo y simplemente va hacerla sufrir. Mi hija se merece algo mejor

-Estas siendo muy duro con ese muchacho Castiel. Además tengo que recordarte que tú eras bastante parecido a él cuando tenías su edad y mucho antes que eso

-Por eso mismo lo digo, se cómo son los chicos como él. No vale la pena

-Si yo hubiera pensado lo mismo de ti cuando te conocí, en este momento no estaríamos juntos y no tendríamos la maravillosa familia que tenemos ahora –Maldición tenía que admitir que en eso tenía razón.

-Es mi niña Millhi, no quiero que sufra –Y sabía que lo iba hacer y Millhi también, su mirada se ablando y se acercó a mí para colocar su mano en mi mejilla con ternura.

-Sé que va a sufrir Castiel y entiendo que no quieras que eso pase, pero vi como ese chico miraba a nuestra hija. No sabes lo mucho que me recordó a como me mirabas cuando éramos jóvenes, como me sigues mirando aún. Ese chico ama como loco a nuestra hija, va a sufrir pero el amor y los momentos felices van a ser mayores que el sufrimiento, recuerda que no puedes tener el uno sin el otro

-¿Desde cuando eres tan sabía?

-Siempre lo he sido mi amor, solo que ha aumentado conforme la edad –Millhi pasó sus brazos alrededor de mi cuello, me halo más cerca de ella –Ahora porque no mejor aprovechamos que estamos solos para recordar que pese a que vamos veintiocho años de casados la pasión sigue intacta

-Oh te aseguró que eso es así –Apreté a Millhi contra mí y ella de inmediato se levantó y me rodeo con sus piernas mientras cubría mi boca con la suya en un beso que nos estaba consumiendo a ambos.

Lleve a Millhi hacia nuestra habitación ubicada en el segundo piso de nuestra casa y la coloque sobre la cama y nos deshicimos de la ropa en un abrir y cerrar de ojos, puede que Millhi ya sea una mujer sobre los cuarenta, pero yo seguía viendo a la misma chica de la que me enamore hace treinta y un años y seguía amándola y deseándola de la misma manera y por la mirada de Millhi supe que ella pensaba lo mismo.

Pasamos toda la noche amándonos de la mejor forma que sabíamos, éramos uno solo cada vez que entraba y salía de ella. Mi nombre en sus labios mientras le hacia el amor seguía siendo música para mis oídos.

-No sabes Millhi lo que tu llegada significo a mi vida. No solo me permitiste experimentar el amor más pasional y hermoso que puede sentir una persona por otra en su forma romántica, sino que además me diste los hijos más maravillosos de este mundo, gracias porque le diste sentido a mi vida. Te amo mucho preciosa

-Tu sí que sabes cómo hacer sentir a una mujer especial –Me dice ella con los ojos cristalizados –Gracias Castiel por estar siempre a mi lado, por hacerme tan feliz y darme esta gran familia. Mis hijos tienen al mejor padre del mundo y yo tengo al mejor esposo que alguna mujer pueda pedir. Te amo mi pelirrojo

Y esa es mi historia de amor junto a la mujer más increíble que existe, ella fue mi luz y mi oscuridad, ella fue el inicio de toda la alegría que estoy sintiendo ahora y solo esperaba que mis hijos tuvieran la oportunidad de vivir algo así.

FIN

Hola mis lindas lectoras, este es definitivamente el final de esta historia y espero que les haya gustado porque yo ame escribirlo. Esta historia me trajo muchas alegrías y me encontré a mí misma a través de ella. No puedo terminar de dar las gracias por todo el apoyo que me han brindado y que espero con ansia que me sigan bridando para mi próximo proyecto.

Ya está la sinopsis del nuevo proyecto y la portada, pasen a mi perfil para poder verlo aun así voy a subir en esta historia un anuncio mostrando la sinopsis de esa nueva historia. En serio cuento mucho con su apoyo.

Muchas gracias a todas y por última vez escribiré para ustedes...

Besos sabor Castiel.     

Continue Reading

You'll Also Like

2K 187 59
Imaginé una vida entera a tu lado pero se tornó oscuridad, caímos al abismo y despertamos.
35.5K 1.6K 42
Una historia donde goenji y haruna son los protagonistas de esta historia, claro que a los dos les gusta una persona diferente, pero algo cambio y go...
1.7M 61.4K 83
Margo está rota, siente un vacío enorme en su interior. Thomas es un chef de élite, ¿podrán sus coqueteos y platillos estremecer el frío corazón de M...
12.6K 657 20
En un pequeño pueblito había una chica pelirroja, nunca antes visto ese color de cabello. Ella era pobre y gracias a ello vivía en la calle. Un día...