-Y bueno quién será el primero en hablar –Pregunté consternada.
-Yo...-Rosa empezó a hablar pero el ruido de la puerta seguido de la voz de Castiel la interrumpió.
-Escuche el ruido de algo romperse –En menos de nada Castiel se encontraba a mi lado, pero solo me había mirado a mí.
-Castiel –Susurré esperando que siguiera mirándome pero de inmediato se percató de la presencia de Rosa y de Ethan...junto a ella.
-No lo hiciste –De haber parecido preocupado había pasado a estar rígido, su semblante se endureció y sus hermosos ojos grises que podían llegar a expresar tanto amor por mí ahora destellaban ira –No lo hiciste –Volvió a repetir, Ethan salió de cama y gracias a Dios llevaba puesto los boxer. Ethan empezó a retroceder mientras que Castiel caminaba lentamente pero con pasos firmes hacia a él, en menos de nada lo tenía acorralado.
-Espera Castiel, nosotros...-Sin dejarlo terminar, Castiel había lanzado un puñetazo contra su mejilla, no cayó sin embargo si se desestabilizo. Estaba segura de que le había roto el labio y en ese momento temí por Ethan sabía que Castiel no pensaba parar y también sabía que él nunca perdía una pelea. Antes de que atestara otro golpe contra Ethan me puse en medio protegiéndolo, cerré mis ojos y puse mis brazos como escudo.
-¡Millhi, no! –Exclamó con fuerza y angustia Rosalya, pero el golpe nunca llegó. Abrí mis ojos y vi el puño de Castiel en el aire.
Se había detenido.
-Gracias Millhi –Me susurró Ethan –Pero no vuelvas a hacerlo, pudiste lastimarte
-Estoy de acuerdo con él no vuelvas a hacer eso –Me miraba preocupado y también había un destello de miedo en sus ojos, miedo al pensar que hubiera pasado si no se hubiera detenido –Ahora apártate, no he acabado con ese idiota
Castiel tomó mi mano y en un gesto suave pero rápido me atrajo contra así y luego me ubico detrás de él, sin darme tiempo siquiera de reaccionar.
-No pasó nada –Exclamó Ethan antes de que Castiel siquiera levantara los puños.
-¿Qué quieres decir? –Preguntó Castiel confundido.
-Eso, Rosalya y yo no nos acostamos –Mire a Rosalya esperando una confirmación de ella.
-Dice la verdad, no pasó nada
-Entonces qué diablos hacíais juntos en la cama –Preguntó Castiel quien ahora estaba más calmado pero seguía un poco enojado.
-Ayer Ethan me acompaño a la habitación pero los dos estábamos muy borrachos, él se quitó la ropa y se tumbó en mi cama, se quedó dormido de inmediato. Estaba cansada así que me tumbe junto a él y también me dormí. Miren –Rosalya se quitó las sabanas de encima y se levantó, llevaba su ropa puesta, la que estaba usando la noche anterior.
-¿Y por qué no lo dijeron antes? –Pregunté enojada, tanto alboroto por nada.
-Porque ninguno de los dos nos dejó hablar –Respondió Ethan –Sé que Rosalya tiene novio, nunca me metería con ella
-Y yo amo a Leigh, sería incapaz de serle infiel –Agregó Rosa. Castiel y yo nos miramos y ambos soltamos un suspiro de alivio, no tendríamos que lidiar con ningún problema.
-Lo sentimos, creo que ambos nos desesperamos –Dije mientras me acercaba a Castiel y dejaba que me rodeara con sus brazos, realmente pensé que esto sería el inicio de algo muy malo pero al ver que no era así me sentía tranquila.
-Sí, de eso nos dimos cuenta –Rosa e Ethan se habían puesto a reír –Creo que tengo que ir a hablar con los chicos ¿Verdad?
-Están preocupados –Le respondió Castiel, e Ethan se estaba vistiendo en un dos por tres y en unos segundos ya estaba listo –Lamento lo del golpe
-Un poco de hielo lo hará desaparecer, no te preocupes –Ethan palmeo la espalda de Castiel y beso mi mejilla –Adiós pequeña Rosalya, eres una gran compañía a la hora de beber espero y podamos repetirlo –Le guiñó el ojo y salió de la habitación.
-Sería un gran partido sino fuera tan idiota –Rosa se dirigió al baño y antes de entrar se dirigió a nosotros -Vamos a ir de compras después de desayunar ¿Quieren venir?
-Tengo unas cosas que cuadrar con la banda
-¿Y tú Millhi? –Me encantaría ir de compras con las chicas, pero quería aprovechar cada segundo que tuviera con Castiel antes de irme y de pasó podrías pasar más tiempo con los chicos.
-Me quedaré con Castiel
-Millhi no es necesario que...-Lo interrumpí.
-Quiero quedarme contigo –Le mire a los ojos haciéndole entender que no me importaba no ir de compras y él no insistió más.
-Está bien, como quieran –Ella se encogió de hombros y luego nos miró con una sonrisa –Gracias por preocuparse por mí –Me abrazó y besó mi mejilla y lo mismo hizo con Castiel –Nos vemos luego
Salimos de la habitación y le envié un mensaje a Mira diciéndole que Castiel tenía unas cosas que hacer con los chicos y que yo me quedaría con él al instante respondió.
No te preocupes nena, aprovecha todo el tiempo que tengas con tu chico
Nos veremos después. Te quiero <3
Leí el mensaje con una sonrisa sabía que Mira entendería.
Gracias por entender, eres la mejor. Cómprame algo bonito
También te quiero :)
En menos de nada volvíamos a estar en la habitación-Departamento y todos los chicos se encontraban reunido en la sala principal, cuando nos vieron entrar sonrieron e hicieron señas para que nos acercáramos.
-Veo que ahora todos están de humor –Les dije mientras me sentaba en el sofá junto a Drew, y Castiel se sentaba a mi lado.
-Si bueno, ahora que este idiota se ha dignado a aparecer ya podemos estar tranquilos –Me respondió Aaron quien estaba al frente mío y a un lado tenía a Ethan y al otro a Liam.
-Ya me disculpe –Respondió él quien tenía una bolsa de hielo en su mejilla donde Castiel lo había golpeado.
-Lo siento mucho –Dije mirándolo y no sé qué vieron todos en mi cara que se apresuraron a hablar.
-No te preocupes –dijo Ethan un tanto nervioso.
-Igual fue culpa de Castiel –Dijo Liam quien también me miraba angustiado.
-Ethan es más fuerte de lo que parece –Se limitó a decir Aaron quien fingió indiferencia.
-Que idiotas –Drew se echó a reír y Castiel parecía como si no entendiera lo que estaba pasando y no lo culpaba yo estaba igual.
-¿Están bien? –Les pregunte de la forma más amable que pude y sus mejillas adoptaron un color rojo -¿Dije algo malo?
-No es tu culpa Millhi –Decía Drew quien por fin había parado de reír –Es que esos tres idiotas no saben lo que es tratar con una chica en límites de amistad. Así que debieron asustarse al ver la cara que pusiste, talvez pensaron que ibas a ponerte a llorar.
Los miraba y no creía lo que me decía Drew en especial viniendo de Liam.
-¿Nunca han tenido amigas mujeres?
-Siempre me las tiró –Dijo Ethan sin descaro.
-No me interesa –Fue todo lo que dijo Aaron otra vez usando ese tono indiferente que empezaba a molestarme.
-No soy muy bueno relacionándome con chicas, son complicadas –No creo que la excusa de Liam sea válida, además los chicos también son complicados.
-¿Y tú si has tenido amigas mujeres? –Le pregunté a Drew el cual aún tenía una sonrisa socarrona y de burla.
-No, tú eres la primera. Pero he tratado con muchas chicas, sé por lo menos cómo comportarme con ellas
-En pocas palabras soy la única chica con la cual tratan sin intención de sobrepasar los límites de amistad
-Exactamente
-Y qué hay de sus fans
-No tratamos tan de cerca con ellas y normalmente están flipando tanto por poder vernos que solo gritan y saltan de alegría
Bueno creo que esto hacía las cosas más interesantes. No pude evitar que una sonrisa se me curvara en la boca.
-¿Y ninguno tiene hermanas? – Negaron con la cabeza.
-Ustedes chicos son...interesantes
-Espero poder tomarme es como un cumplido –Dijo Ethan quien ya había dejado sobre la mesa de vidrio que teníamos al frente la bolsa de hielo.
-Con ella nunca se sabe –Le respondió Castiel y le di un golpe en el brazo juguetonamente y él contesto levantándome de mi puesto para ponerme en su regazo y empezar a dejar besos en mi cuello hasta mi lóbulo, me excitaba y me daba cosquillas así que no podía evitar reír.
Alguno de los chicos tosió haciéndonos entender que no estábamos solos en la habitación. Me solté como pude de Castiel y volví a mi asiento y me aclare la garganta intentando disimular mis mejillas sonrojadas.
Intento fallido.
En un intento por desviar la atención de mi, pregunté algo que me moría por saber.
-¿Y alguno tiene tatuajes? –A simple vista no se veía y ya que en Londres hacía un frio de muerte los chicos solo habían traído camisas manga larga lo que dificultaba el hecho de poder saber si llevaban o no.
-Yo tengo –Aaron fue el primero en responder -¿Quieres verlo?
-Claro me encantaría –Esperaba que Aaron se arremangar las mangas pero para mi sorpresa se había quitado la camisa. Eso solo me hizo confirmar lo apuesto que era. Se notaba que iba al gimnasio, tenía un abdomen para dejar babeando a cualquiera.
Observe el tatuaje de un dragón que empezaba desde su pectoral derecho hasta su brazo un poco más arriba de su codo. Era hermoso, era de color negro con rojo y daba la impresión de que en cualquier momento iba a salir volando.
-Increíble –No podía dejar de verlo -¿Qué significa?
-Cuando era pequeño mi padre me contaba muchas historias sobre dragones, el día de su muerte pensé en hacérmelo y tachan, aquí está
-Hermoso –Solté sin pensarlo y obviamente Aaron tenía algo que decir
-Sé que verme sin camisa ha de ser duro pero como amigo de Castiel recomiendo que no mires tanto no queremos que mi belleza masculina te cautive
-Es verdad, tapate, mis ojos se están quemando –Puse mi cara más seria posible lo que funciono porque los chicos me miraban preguntándose si hablaba en serio o no.
-Es buena con el sarcasmo –Fue lo que dijo Castiel para aclarar las dudas de los chicos, parece que a él no le puedo engañar.
-Quien es el siguiente –Pregunte mientras Aaron volvía a ponerse la camisa.
-Yo –Dijeron Ethan y Drew a la vez, luego se miraron, fruncieron el ceño y empezaron a quitarse la camisa como si fuera una competencia. Podría decir tantas cosas sobre esto pero decidí quedarme callada por esta vez.
Ethan y Drew también estaban buenos, decir lo contrario sería una vil mentira.
Ethan tenía en el brazo izquierdo un lobo con unos ojos azules tan impresionantes como los que él tenía y detrás de él había un montón de árboles, algo me impulso a acercarme y tocarlo, pase mis dedos por los ojos del lobo. Era increíble.
-Si me preguntas el mío es más impresionante –Empezó Aaron –Y ni siquiera lo tocaste –Negué con la cabeza, muriéndome de la risa por dentro, había sonado como un niño así que me acerque y también pase mis dedos por el tatuaje, empecé con la cabeza hasta la punta de su cola.
-¿Mejor? –Le pregunté con una sonrisa burlona.
-Mucho mejor
-Ahora sigo yo –Decía Drew con entusiasmo –Yo también quiero que ella me toque
-Alguno se da cuenta de que estoy aquí presente –Dijo Castiel intentando sonar enojado pero parecía que la situación le divertía –Se están aprovechando de mi novia
-Cállate pelirrojo, ella es la que decide –Drew se acercó a mí y se dio la vuelta, en su espalda llevaba escrito un nombre, también pase mis dedos por él, más por lo bello que era, fue por la impresión de que lo que vi.
Caymen
Estaba escrito en letras grandes y de color negro, la letra era cursiva y tenía hermosos adornos en cada una y concluía con unos hermosos espirales.
Antes de poder preguntar quién era Drew ya me estaba contando.
-Así le habían puesto a mi hermana pequeña, nació hace tres años pero era muy débil y solo sobrevivo dos semanas sin embargo nunca antes había visto algo más hermoso
Sentí un punzada de dolor en mi pecho, de dolor por Drew yo no sabía lo que era perder a alguien cercano, tenía a mi madre, viva y bien, mi tía y Mira también estaban bien y tenía a Castiel conmigo, no podía entender lo que había pasado Drew, así que decirle lo siento o te entiendo sería una estupidez así que en cambio dije...
-Tenía un gran hermano mayor, estoy segura que lo sabe –Me acerqué a él y lo abrace, Drew me correspondió el abrazo y enterró su cara en mi cuello
-Eres la primera que me lo dice –Susurró aun con su rostro en mi cuello, tenía la piel caliente y suave, en cualquier caso me hubiera puesto nerviosa de abrazar a un chico que no tenía camisa pero tratándose de Drew me sentía tranquila y cómoda –Gracias
Me aparte y vi que todos me miraban con una sonrisa, así que no pude evitar sonreír
-Faltas tú Liam
-No tengo, no me gusta tener tinta en mi piel–Se encogió de hombros quitándole importancia al asunto.
-Oh, bueno, Castiel tampoco tiene –Eso fue lo único que no pude entender de Castiel, quien era un chico malo y aun así no los llevaba, me preguntaba por qué no tenía tatuajes.
Mire a Castiel y él simplemente me sonreía, era la sonrisa que decía que ocultaba algo sin embargo no me atreví a preguntar que era.
-Ahora que lo pienso no le dijiste a Rosa qué tenías asuntos con la banda
-Sí, Jamie debe de estar por llegar –Recordé que Castiel me había hablado de él, era el manager de la banda y según Castiel era muy agradable, era incapaz de enojarse con ellos por más idiotas que fueran o eso fue lo que él dijo.
-¿Y es buena idea que yo esté aquí? –Realmente no sabía que pensaba Jamie de mí o si siquiera sabía quién era y eso me ponía muy nerviosa.
-No te preocupes por eso –Me dijo Drew y me di cuenta que ya todos se habían puesto su camisa –Le agradaras eres como un pastel de chocolate, nadie se te resiste
-A mí no me gusta el chocolate –Le dijo Aaron –Diría que es más como un rico cupcake de fresa, eso sí es delicioso
-Más bien creo que es una galleta con chispas de chocolate recién salida del honor –Ethan se unió a la conversación y mi cerebro no podía procesar toda la conversación.
-Yo creo que es más como un helado de vainilla con brownie caliente –Liam dijo eso con tanta emoción que pareciese que quisiese uno en ese momento.
-Bueno ya –Dijo Castiel se levantó y se acercó a mí –Agradecería que dejaran de tratar a Millhi como si fuera un delicioso postre
-Gracias –Dije con un poco de diversión, no entendía porque me estaban comparando con postres. No me equivocaba estos chicos son muy interesantes.
-Pero...-Oh, no- Yo que si la he probado diría que sabe cómo duraznos y huele como tal –Los chicos se partieron de la risa mientras toda la sangre de mi cuerpo subía a mis mejillas, creo que mi cabeza iba a explotar.
-Eres un idiota –Chille y todos aún seguían riendo incluyendo Castiel y yo solo tenía ganas de golpearlos a todos.
-Veo que se divierten chicos –Una voz se agregó a la conversación.
Mis ojos se encontraron con el que asumía era Jamie y la sonrisa que traía se borró de su rostro, parece que no va a darme una feliz bienvenida.
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Hola mis queridas lectoras, primero que todo quiero disculparme por haber tenido tanto tiempo abandonada la novela y por lo tanto a ustedes, pero mi computador se dañó y no tenía donde escribir. Pero como ven ahora si, por lo tanto para recompensarlas por el tiempo voy a subir dos capítulos seguidos, por lo tanto en menos de nada subiré el siguiente así que estén atentas. Ahora si vamos con las preguntas
¿Cuántas creyeron que Rosa no le había sido infiel a Leigh?
¿Les gusto el momento que pasó Millhi con la banda?
¿Extrañaron la novela?
Muchas gracias por leer
Las odio con cariño
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