Born to Die (Terminada)

By ScarlettGrant

237K 19.6K 3.3K

El anillo único había sido destruido, el heredero perdido de Gondor, Aragorn hijo de Arathror, había vuelto... More

Holaaa!
Así comienza todo...
CAPITULO 2
CAPITULO 3
CAPITULO 4
CAPITULO 5
CAPITULO 6
CAPITULO 8
CAPITULO 9
CAPITULO 10
CAPITULO 11
Una disculpa :S
Capitulo 12
CAPITULO 13
CAPITULO 14
CAPITULO 15
CAPITULO 16
CAPITULO 17
CAPITULO 18
CAPITULO 19
CAPITULO 20
CAPITULO 21
CAPITULO 22
CAPITULO 23
CAPITULO 24
CAPITULO 25
CAPITULO 26
CAPITULO 27
CAPITULO 28
CAPITULO 29
CAPITULO 30
CAPITULO 31
CAPITULO 32
CAPITULO 33
CAPITULO 34
CAPITULO 35
CAPITULO 36
CAPITULO 37
CAPITULO 38
CAPITULO 39
CAPITULO 40
CAPITULO 41
CAPITULO 42
CAPITULO 43
CAPITULO 44
CAPITULO 45
CAPITULO 46
CAPITULO 47
CAPITULO 48
CAPITULO 49
CAPITULO 50
CAPITULO 51
CAPITULO 52
CAPITULO 53
CAPITULO 54
CAPITULO 55
CAPITULO 56
CAPITULO 57
CAPITULO 58
CAPITULO 59
CAPITULO 60
CAPITULO 61
CAPITULO 62
CAPITULO 63
CAPITULO 64
CAPITULO 65
CAPITULO 66
CAPITULO 67
CAPITULO 68
CAPITULO 69
CAPITULO 70
CAPITULO 71
CAPITULO 72
CAPITULO 73
CAPITULO 74
CAPITULO 75
CAPITULO 76
CAPITULO 77
CAPITULO 78
EL PRINCIPIO DEL FIN
CAPITULO 79: Blood in your lies
CAPITULO 80: How long? How low?
CAPITULO 81: Youngblood
... Di mi nombre
CAPITULO 82: Home is behind
CAPITULO 83: Infinity
CAPITULO 84: Life is still so beautiful
CAPITULO 85: Happier
CAPITULO 86: Black Beauty
CAPITULO 87: Poisoned Youth
CAPITULO 88: Elastic Heart
CAPITULO 89: So let the light guide your way
CAPITULO 90: We all knew
CAPITULO 91: Where it all began
CAPITULO 92: Maldición
CAPITULO 93: Nothing nothing gon' save us now
CAPITULO 94: Somewhere... Somehow
CAPITULO 95: I'm on the run
CAPITULO 96: Forever and aver and ever, the end
GRACIAS

CAPITULO 7

4.6K 359 128
By ScarlettGrant


Holaaa! aqui les traigo un nuevo capitulo, por favor, por favor comenten y voten :)

*Narra Miriel*

El día de hoy estaba haciendo todos los meritos para convertirse en el peor de mis días hasta ahora, para empezar las lecciones del día de hoy fueron especialmente para mi, bueno según la casamentera debía mejorar mi apariencia y oh oh! Me obligaron a usar un maldito vestido que no me dejaba moverme o sentarme o agacharme o respirar! Además de eso me obligaron a recogerme el cabello y bueno prácticamente me convirtieron en otra persona!

De esa manera el día solo empeoro cuando la casamentera nos dijo que tomaríamos el té en el jardín. La seguimos hasta el lugar y entonces nos dimos cuenta de que compartíamos el jardín con la guardia, que practicaban. Toda actividad en el jardín se detuvo apenas pusimos un pie ahí, el resto de las chicas soltaron unas risitas bastante tontas. Me di cuenta de que Legolas también se encontraba ahí, trate de reprimir mi emoción pero fue inútil tratar de no sonreír así que solo baje la mirada y seguí caminando de largo.

Luego de unos instantes presenciamos un intento de pelea entre Beren y Legolas, lo llamo intento de pelea porque, por favor! Beren no duro ni cinco segundos frente a Legolas. Bueno ya era hora de que alguien le diera una lección a ese engreído príncipe.

En cuanto la lección del día de hoy termino Salí lo más rápido que pude del kiosco, bueno lo más rápido que este maldito vestido me lo permitió. Estaba cruzando el jardín en busca de Legolas hasta que finalmente lo vi, nuestras miradas se cruzaron y nos sonreímos mutuamente. Comencé a caminar hasta él pero Beren se cruzo en mi camino sin previo aviso...

-buenas tardes Miriel, te ves hermosa el día de hoy

-oh, ¿Qué tal Beren?- le conteste desinteresada

-te observaba mientras entrenaba y tu belleza a me ha impedido centrarme- fantástico! Ahora sus malos movimientos son mi culpa ¿no?- así que no puedo guardármelo más, y con todos los presentes me gustaría hacerte una pregunta- oh oh, esto no se escucha nada bien, será mejor que lo detenga

-Beren en realidad me dirigía a otro lado- si, con Legolas!- ¿Qué te parece si me lo dices más tarde?

-Miriel mi princesa, me preguntaba si...- dijo mientras tomaba una mano y se arrodillaba frente a mí

-Beren ¿Qué haces?... por favor no hagas esto... no- puse los ojos en blanco y trate de impedir que se arrodillara pero fue inútil

-Yo me preguntaba si, ¿te gustaría ser mi novia?- entre en pánico apenas escuche esas horribles palabras salir de sus labios, mire a mis alrededores en busca de una salida. Me encontré con Arphen que miraba la escena con los ojos muy abiertos, luego estaba Haleth que estaba tan aterrado como yo, y finalmente Legolas que miraba a Beren con los ojos entre cerrados...

-Beren, yo... yo no podría- Beren dio un respingo y lentamente se puso de pie visiblemente sorprendido- acaso jajaja ¿es una broma?- pregunto con una risita

-no, me temo que no- conteste apenada

-pero ¿Por qué no?

-ammm yo... a mí me gusta alguien más- dije bajito para que solo él pudiera escucharlo y su humillación fuera un poco menos

-¡¿QUÉ TE GUSTA ALGUIEN MAS?!-bueno ahí va toda la discreción en el asunto, suspire mientras rodaba los ojos

-así es, lo siento- no, en realidad no- ahora si no hay nada más en lo que te pueda ayudar, tengo que irme- Beren se quedo mudo frente a mí, le pase por un lado y mire a Legolas que me observaba atentamente y también lucia sorprendido. Llegue hasta donde se encontraba Legolas y con un gesto le pedí que me siguiera, comencé a caminar junto con Legolas a toda velocidad hasta salir del jardín.

-para vergüenzas no gano contigo, siento mucho que hayas tenido que presenciar eso- el me sonrió mientras seguíamos caminando por el castillo

-te preocupas demasiado...-

-lo siento

-tienes que dejar de disculparte por todo- me dijo él divertido y me hizo reír- bien, si te parece ¿podemos ir a dar ese paseo?

-estaría encantada, solo ammm ¿crees que podríamos pasar a mi habitación primero? Me gustaría cambiarme

-desde luego- caminamos a paso veloz hasta llegar a mi habitación, abrí la puerta, luego él la miro como si fuera la puerta al infierno y se detuvo

-amm esperare aquí- dijo Legolas nervioso, estaba por decirle que si pero luego recordé las palabras de mi padre la noche anterior, diciéndome que me alejara de los invitados y pues creo que sería mil veces más seguro que Legolas entrara a mi habitación a que se quedara en el pasillo donde mi padre camina todo el tiempo

-en serio, pasa, yo me cambiare en el baño- lo pensó por un momento y luego dijo

-creo que será mejor si me quedo aquí, no quiero causarte problemas

-en realidad es más probable que alguien te vea aquí, así que...

-de acuerdo- dijo Legolas para finalmente entrara a la habitación, cerré la puerta detrás de él y se quedo viendo su alrededor...

-volveré en un momento- dije tomando un vestido del armario para luego entrar al baño. Me quede mirándome frente al espejo y comencé con la difícil tarea de deshacer lo que la malvada casamentera había hecho conmigo, para empezar el corsé... intentaba alcanzar las malditas correar que mantenían el corsé cerrado (y que no permitían respirar), pero las estúpidas mangas acampanadas del vestido me lo hacían muy difícil... forcejee por algunos minutos sin tener éxito, cuando me di por vencida di un bufido y comencé a considerar mis opciones. Diablos! No puedo creer que vaya a hacer esto...

Abrí la puerta del baño lentamente y asome la cabeza, Legolas se encontraba de pie observando los mapas que colgaban de mi pared, luego se dio la vuelta y me miro sorprendido...

-Miriel... ¿se encuentra todo bien?

-sí ammm ¿crees que podrías hacer algo por mi?- pregunte avergonzada

-por supuesto, ¿de qué se trata- camino hasta estar frente a mi

-esto es tan embarazoso...- dije y Legolas rió

-solo dilo- él tenía una perfecta sonrisa en su rostro y yo solo suspire mientras decía

-¿podrías ayudarme con los cordones?- señale mi espalda y me sonroje

-desde luego- me dijo con voz grave y suave. Estremecí y lentamente me di la vuelta para darle la espalda. Luego sentí sus manos desatando los cordones y mi respiración acelerarse. Unos instantes después sentía como los cordones se aflojaban y una suave brisa me hizo darme cuenta de que mi espalda estaba al descubierto. De repente sentí los dedos de Legolas rozar mi piel, haciéndome vibrar de pies a cabeza

-lo siento- Legolas se disculpo mientras daba un paso atrás, y yo me giraba de frente a él

-no fue nada... gracias- le conteste y me apresure a meterme devuelta al baño.

Ahora si me quite el horrendo vestido, y me puse un bonito vestido de un tono lila, luego solté mi cabello castaño y trate de acomodarlo un poco. Salí del baño y Legolas seguía observando lo que colgaba de las paredes

-Lista- dije llamando su atención

-linda habitación

-gracias- dije sonriendo por el cumplido

-¿te gustan los mapas, no es así?

-en realidad, esos mapas me recuerdan lo que quiero...

-¿y qué es lo que quieres?

-¿te parece si en lugar de decírtelo, te lo muestro?- dije sonriéndole

-muéstrame- me dijo y una enorme felicidad me invadió. Antes de que pudiera decir algo más tome su mano y lo guié casi corriendo por los pasillos hasta que llegamos a una ventana al final de un pasillo en la parte trasera del castillo

-¿Dónde estamos?- me pregunto Legolas notablemente divertido por mi actitud

-aquí es en donde vengo cuando quiero estar sola-

-¿a una ventana?- yo reí por su pregunta

-no es la ventana, es lo que está afuera...

- ¿es una broma Miriel? Estamos en un décimo piso!

-Tranquilo, nadie saltara de la ventana- pase una pierna por el marco de la ventana y con cuidado puse los pies sobre el tejado- ¿vienes?

-nunca dejas de sorprenderme - me miro a los ojos y yo sonroje, luego me hice a un lado para dejarlo pasar, hasta que ambos estuvimos sobre el tejado

-sabes para tener un padre así de estricto, sabes cómo meterte en problemas- su comentario me hizo reír junto con él

-ven, es por aquí...- comencé a caminar con Legolas detrás de mi hasta que llegamos al borde del tejado, el viento revolvía mi cabello y los últimos rayos del sol nos daban de lleno en la cara. Di un salto para quedar de pie en la muralla que rodeaba el castillo, una gran muralla de roca solida y unos 10 metros de alto...

-esto es lo que quería mostrarte...

-es una vista impresionante- me dijo. Generalmente cuando vengo aquí no puedo separar la vista del paisaje que se extendía frente a mí, pero ahora no podía apartar los ojos de Legolas, se veía tan bien de estando de pie con los rayos del sol dándole en la cara ,su caballo moviéndose por el viento, y las facciones en su rostro relajadas

-me alegra que te guste, eres la primera persona que traigo aquí- le confesé

-vaya! Eso es muy lindo... pero dime, ¿esto que tiene que ver con los mapas en tu habitación?

-oh! Casi lo olvidaba... estamos mirando hacia el sur... en esta dirección se encuentran los reinos más próximos a este... las chicas en este lugar solo esperan el momento en que se casaran, pero yo no, lo que yo quiero es salir de aquí, sé que hay un mundo increíble ahí afuera... si tan solo pudiera salir a conocerlo- suspire con pesadez

-¿si tanto deseas irte, porque no lo haces?- me pregunto

-no puedo hacerlo, mi padre me lo advirtió si me voy, no podre volver jamás... cada día que pasa las ganas de irme de aquí crecen, pero aun no sé si estoy dispuesta a correr ese riesgo...

-bueno, si alguna vez decides irte, puedes contar conmigo- mi corazón se sacudió ante sus palabras y él me sonrió ampliamente

-gracias... ¿quieres sentarte?- Legolas asintió y ambos nos sentamos en la barda con los pies colgando

-¿bueno y que lugares te gustaría visitar?- pregunto Legolas

-Bueno me encantaría visitar Erebor, además de que es el reino más cercano a este lugar, jamás he visto un enano y a lo que he leído... parece divertido- Legolas soltó una carcajada y entonces recordé las historias que me contaba Dorben donde me decía que los Elfos y lo enanos se odiaban...

-en eso tienes razón, son muy divertidos- su comentario me sorprendió

-un segundo ¿acaso no odias a los enanos?- Legolas volvió a sonreírme

-no, de hecho uno de mis mejores amigos es un enano- me dijo y puse los ojos en blanco

-¡no te creo!- dije con una carcajada

-quizá algún día tenga el placer de conocerte- me sonroje por su comentario

-¿puedo preguntarte algo?

-eres libre de hacerlo

-¿de dónde eres? Sé que vives en Gondor, pero ¿de dónde eres originalmente?- Legolas se tenso por un momento y luego se giro para mirarme

-no suelo hablar de esto, pero...

-si no te sientes cómodo contándome lo entiendo...

-no, está bien. Te lo contare porque me agradas, pero por favor no se lo cuentes jamás a nadie

-lo prometo-le dije y él suspiro

-vengo de Mirkwood, uno de los tres reinos de los elfos... pero ya hace muchos años que me fui, y no tengo idea de que fue de aquel reino- los ojos de Legolas relampaguearon y note como su rostro se tornaba nostálgico, entonces puse una mano sobre su hombro y trate de de consolarlo

-hey! Está bien, te agradezco que me cuentes, pero si te es tan malo hablar del tema, mejor hablemos de otra cosa, no quiero incomodarte, y por favor si estoy hablando demasiado eres libre de callarme en cualquier momento- le dije

-no te preocupes Miriel, jamás me incomodarías- el me miro y yo baje la mirada avergonzada

De un momento a otro el cielo se oscureció, pero no por la llegada de la noche, si no por algunas nubes de lluvia que habían cubierto el cielo, acompañado por una brisa helada que nos envolvió. Me frote los brazos tratando de calentarme, pero no ayudo mucho.

-será mejor que regresemos, comenzó a hacer frió- dijo mientras frotaba sus manos sobre mis brazos y a su tacto sentí un poco mas de calor. Legolas se puso de pie y luego me ayudo a mí a hacerlo también. Saltamos de vuelta al tejado, luego hasta la ventana y entremos al castillo justo cuando iniciaba una ligera llovizna. Caminamos de vuelta a mi habitación y nos detuvimos en la puerta...

-bueno, gracias por pasar tu tiempo conmigo- le dije a Legolas

-fue un placer, sé que no te veré en la cena, así que dime ¿Cuándo podre verte de nuevo?

-hasta mañana supongo...-me sonroje

-es una pena

-¿Por qué?

-porque podría pasar la noche entera contigo- me sonroje y luego puse los ojos en blanco, luego Legolas se apresuro a decir

-me refiero a que... me encantaría pasar más tiempo contigo, solo eso- solté una carcajada

-está bien Legolas- al parecer eso lo calmo y me sonrío de vuelta

-bien, entonces ¿te veré mañana?

-eso espero...

-hasta entonces- Legolas se tomo mi mano y luego se inclino para besarla, ¿alguna vez dejare de sonrojarme ante él?

-adiós Legolas- tímidamente me acerque a él y le di un beso en la mejilla, él pareció sorprenderse, yo me gire avergonzada y entre en mi habitación. Me quede recargada contra la puerta sintiendo mi corazón en la garganta y con los ojos cerrados esperando a que mi respiración se normalizara...

-Buenas noches, Miriel- una voz en mi habitación delante de mí, me tomo por sorpresa y lentamente abrí los ojos para encontrarme con mi padre sentado en mi cama...

-oh, buenas noches padre... ¿Qué haces aquí?

-hable con la casamentera, y me ha comunicado dos cosas que no puedo pasar por alto...

-lo que sea que te haya dicho esa señora estoy segura de que...

-Guarda silencio!- me grito y yo retrocedí unos pasos

-lo siento- agache la cabeza

-para empezar la casamentera opina que eres muy distraída, y algo desaliñada... debes poner más cuidado en lo que haces ¿entendido?

- lo haré padre, lo prometo

-por último, y más preocupante... la casamentera me ha dicho que tienes un pretendiente- puse los ojos en blanco y me quede muda esperando lo peor

-padre yo...

-¡¿Cómo te atreviste a rechazar a Beren?! ¿Al príncipe del reino?

-¿de eso se trata todo?

-Miriel, no hay mejor opción que él, no hay nada mejor en tu futuro que él... ¿no lo entiendes, podrías pertenecer a la familia real? No existe mayor orgullo que le puedas brindar a tu familia!

-pero padre yo no quiero hacerlo! Él no me gusta, ni siquiera como amigo, no puedo estar con alguien solo por su cargo

-que cosas tan disparatadas dices niña! Que no lo entiendes, es un PRINCIPE, que diablos quieres si no es eso?

-no lo sé... yo- baje la mirada pues mi padre me intimidaba

-oh no- dijo mi padre- ¿te gusta alguien más?- oh oh, pregunta incomoda, espero que crea lo que sea que vaya a inventar a continuación

-no, por supuesto que no

-Miriel no mientas!- me dijo con tono grave- ¿Quién es él?

-no voy a decírtelo- wow ¿eso salió de mi? Esta es la primera vez que retaba a mi padre

-¿Qué?

-padre, se trata de mis asuntos privados, solo diré que no tienes nada de qué preocuparte...

-no tengo idea de quién te has creído para hablarme de esta manera jovencita, dímelo AHORA!- me grito mientras me tomaba del brazo fuertemente y me sacudía, lastimándome

-No!

-bien, pues entonces lo vas a considerar en tu habitación sin cenar esta noche, y en la mañana te arrepientas de esta falta de respeto tan grande- de un empujón me hizo a un lado y se fue azotando la puerta que por supuesto cerro con llave, bien me quedaría sin cenar esta noche, pero al menos mi padre no se había enterado de que me gusta Legolas...

****

owwwwww <3 Espero que les haya gustado! y si alguien esta por ahi, por favor comenten si les gusta como va la historia o si quieren saber algo :)

primer comentario subo el siguiente cap...  


Continue Reading

You'll Also Like

191K 16.3K 35
|𝐀𝐑𝐓𝐈𝐒𝐓𝐒 𝐋𝐎𝐕𝐄| «El amor es el arte de crear por la sensación misma, sin esperar nada a cambio,más allá del placer mismo del acto creativo...
628K 58.2K 45
"ADAPTACIÓN" Me ví obligado a casarme con el hombre más frío, cruel, orgulloso, prepotente y multimillonario de todo el país solo por un contrato que...
891K 105K 121
Después de que esa persona se fuera de su vida estaba sola. Pasó toda su adolescencia con ese hecho, y es que su condición la obligaba a no entablar...