-¿Quién ese chico Eda?
-Nadie...-Adam se acerca a mí y saluda a mi hermano sin saber quien es
-Buenas noches, soy Adam, ¿y usted?
-Buenas noches, soy Eren, hermano de Eda.
-Mucho gusto, yo soy asistente y mano derecha de Eda.
-Así que tú eres la pareja de mi hermana- guiña.
-¿Pareja?
-No solo es mi acompañante - digo nerviosa
-¿Segura Eda?- pregunta Adam mientras me mira
-No es necesario que mientan sé que ustedes... ya sabes.
-Hermano, creo que será mejor que vayamos a beber algo.
-Nos vemos luego Adam, espero conocerte más- galo a mi hermano de su saco y lo llevo hasta el bar.
-¿Qué te pasa?
-Nada solo estaba diciendo lo que me dijiste indirectamente.
-No deberías hablar de ese tema frente a los demás.
-¿Por qué? Es normal tener un acompañante- ríe
-Hermanito es el mi secretario.
-No entiendo, ¿es tu secretario o asistente?
-Él es secretario, asistente y mi mano derecha.
-Hermanita, me parece genial que no me estés deprimida y estés con alguien más.
-Aún me siento un poco mal por lo de Leonard.
-Sé que amabas mucho a Leonard, pero es hora de que pienses en ti.
-Ya han pasado 2 años, supere todo, pero aún me falta algo por superar.
-¿Qué es lo que te falta por superar?
-Este año nos íbamos a casar, pero él murió.
-Hermanita, deberías saber de qué aún estás joven y puedes casarte con quien tú quieras.
-Lo sé, pero él era la persona perfecta para mí, él me entendía y era amable.
-Yo también te entiendo y soy amable, así que también puedo ser tu chico ideal.
-Sí, serías un chico ideal, pero la verdad, me sigue doliendo un poco, estoy tratando de superar. Y creo que me está yendo bastante bien en ese sentido.
-Tú siempre has superado todo lo que te ha pasado en tu vida, creo que es el momento de que le digas adiós a Leonard y esta vez para siempre.
-Para siempre, no creo que eso sea para mí.
-Te apuesto que este año encuentras el amor de tu vida.
-No lo creo.
-Yo nunca me equivoco. Mañana tenemos muchas cosas por hacer Eda.
-¿Muchas cosas por hacer?
-Sí, hay que arreglar el hotel.
-Pensé que lo habías solucionado hoy día.
-Hay que poner más seguridad al hotel y al casino.
-Entonces, es una cosa, no son varias.
-No son solo eso, hay más de una.
-¿Y cuáles son?
-Mañana lo sabrás, por ahora terminamos beber y vayamos a la piscina a divertirnos un poco.
-Es noche no creo que nos dejen estar en la piscina.
-No necesitamos permiso de nadie, solo el de la dueña del hotel.
-Qué gracioso, bueno, está bien, vayamos.
Nos llevamos dos botellas de vino, corremos por el césped sin zapatos hasta llegar a la piscina, cuando llegamos nos sentamos en el borde de la piscina mientras bebemos de la botella.
-Aún no puedo creer que tú y mi padre se pelearan por este hotel.
-Él quería saber a qué punto llegaba por lo que yo quería.
-Él quería pagar diez veces más la cantidad que tú ofreciste, pero al final se rindió y le dio ese dinero a su amante y ahora ese viejo está en la tumba.
-Pobre, infeliz de la amante, le puse un juicio para que me devolviera mis joyas, mi casa y lo que dejo mi padre.
-Supongo que tú le ganaste.
-Claro, ella no sabía que mi padre dejo la casa a mi nombre desde hace 20 años, antes de que ella apareciera- bebemos de la botella- ¿Y tu hermanito?
-¿Yo qué?
-¿No tienes novia, ni amante?
-No tú sabes que eso no es para mí.
-Te apuesto de dentro de poco conocerás a una persona que será para ti.
-No gracias, no quiero que me pase lo mismo que a Henry.
-Así que sabes lo que paso.
-Sí, casi todos lo saben, pero creo que la prensa aún no.
-Pobre de él, me dijo que le iba a proponer matrimonio justo el día que se fue con todo el dinero.
-Siempre pasa algo en esa familia.
-Si y ahora por culpa de él tengo que fingir una relación.
-Cuéntame más sobre esa relación.
-Su padre quiere reforzar la imagen de su hijo ante la prensa y supuestamente yo soy la única que puede hacer eso porque tengo una imagen perfecta ante todos.
-Es cierto, tú tienes una imagen perfecta antes todos, cuando se trata de trabajo eres una mujer casi perfecta.
-Solo ante los demás me muestro así, cuando estoy con personas cercanas a mí soy distinta.
-Sí, ¿desde hace cuanto que no hablas con él?
-Hace años que no hablo con él y de la nada su padre quiere que esté con él.
-¿Y por qué aceptaste?
-Su padre insistía y tuve que hacerlo, por eso hice un contrato con reglas para que no pase nada, si Henry aceptaba yo le daría lo que él quería.
-¿Reglas?, ¿lo que él quería?
-Sí, las reglas son fáciles de entender y él quiere encontrar a Sahara.
-Supongo que es la chica que huyo con todo el dinero.
-Exacto, mande un agente del FBI a que la encontrara y la siguiera, cada vez que hace algo relevante le tengo informado a Henry.
-¿Qué pasará si ella regresa?
-Él quiere casarse con ella, pero primero quiere saber por qué lo hizo.
-Es un idiota, como haría algo así cuando esa mujer huyo con todo lo de su familia.
-Y sabes que es lo peor, que ella huye con su mejor amigo, con todo el dinero y la persona que la sigue dice que ellos tienen un romance.
-Sí que Henry es un imbécil.
-¿Mencionaste mi nombre?-volteamos y vemos a Henry - caraspeo para no ahogarme con el vino
-¿Henry? ¿Qué haces aquí?- me levanto rápido.
-Yo digo lo mismo, ¿qué haces bebiendo a esta hora?
-A ti que te importa acaso no puedo beber con mi hermano.
-Después de años te veo Henry.
-Vuelve a repetir lo que dijiste Eren.
-Sí. Eres un imbécil- Henry tira de una patada a Eren, empujo a Henry
-¿Qué te pasa? Es mi hermano.
-No me importa quien es, no permito que me insulten.
-¿Desde hace cuánto están escuchando nuestra conversación?
-Solo escuché lo que dijo Eren.
-¿Por qué viniste Henry? - pregunto molesta
-Vine por tú eres mi novia.
-Es por tu padre que viniste, ¿verdad?
-Él me dijo que mandaría fotógrafos hasta aquí, así que no me quedo de otra que venir.
-Entonces desde ahora el contrato se terminó.
-No, recuerda lo que dijiste en el auto.
-Lo recuerdo muy bien- me acerco a ayudar a Eren.
-Dijiste que, si venía contigo, se acabaría, pero tú te referías si iba contigo en el auto y en el jet.
-Siempre encuentras un punto ciego y haces que todo esté de tu lado.
-Exacto, así que el contrato no se ha acabado Eda.
-Te salvaste esta vez, pero la próxima no será igual.
-Henry
-¿Qué?- Eren se acerca y lo tira a la piscina
-Recuerda que yo no me quedo tranquilo si me hacen algo malo a mí o a mi familia.
-Maldito.
-Vamos a beber a otra parte Eda.
-¡Eda! -grita Henry, ti regreso a verlo
-¿Qué quieres Henry?
-No puedes beber, mañana estará aquí la prensa.
-¿Y si no dejo de beber?- sale de la piscina, me toma del brazo y me lleva hasta el ascensor, mi hermano va detrás de mí, pero una persona lo intercepta.
-Suéltame.
-No. Yo pensé que venías por trabajo, pero me doy cuenta de que solo viniste a divertirte.
-Si no sabes mejor no digas nada- el ascensor se detiene en el piso 10, salgo corriendo, Henry viene detrás de mí, logra alcanzarme y toma mi mano.
-¿Por qué corres?
-Porque quiero liberarme de ti y seguir bebiendo con mi hermano y además porque vi un chico guapo en el casino.
-No dejaré que te embriagues, sé cómo te pones cuando bebes.
-Déjame tranquila.
-No, mañana si quieres salimos a un club
-No quiero ir a ningún club.
-Solo ve a tu habitación Eda.
-Está bien iré a mi habitación.
-¿No harás nada más?
-No, iré a mi habitación.
-Solo falta 5 pisos para llegar a tu habitación, así que te cargaré para que no escapes.
-No hace falta- me carga sobre su hombro para llevarme hasta el ascensor- ¿ya me puedes bajar?
-Aún no llegamos al piso 15.
-No voy a salir corriendo, te lo prometo.
-Tu cuerpo tiene una fragancia única.
-¿Eeh? ¿Gracias?- el ascensor está por el piso 12, deja de cargarme, se acerca a mi cuello empezando a rozarlo con su nariz y labios.
-Hueles tan bien que...- toca mi cuello de modo que me eriza la piel, baja su mano hasta mi cintura para acercarme más él, se detiene antes de continuar.
-Tu respiración me está dando cosquillas- sube sus labios a mi oído
-¿Y ahora qué sientes?- lo dice con voz ronca
-Siento un poco de calentura en mis cachetes y puede sentir lo mojado que estás- me pone, contrata la pared de ascensor, nuestros labios están tan cercas no aguanto las ganas y lo beso