*Para leer este capítulo les recomiendo que escuchen We all knew, Labrinth.
-¿Qué va a pasar si no vuelves?
A Miriel le extraño que Legolas le hiciera esa pregunta, él nunca era tan abierto sobre lo que le consternaba así que pudo adivinar lo aterrado que debía estar. Se recostó más cerca de él, presionando su mejilla contra el pecho de Legolas.
-Volveré, no tienes que preocuparte por eso meleth nin*- le dijo en un tono dulce que ocultaba sus propias preocupaciones.
-Sé lo que pasara conmigo si no lo haces... y tú también lo sabes.
-No te desvanecerás- Miriel le contesto firme - Tienes amigos y familia a los que les importas demasiado, ellos jamás permitirán que eso te ocurra.
-Pero mi corazón pertenece a ti únicamente... no hay nada que puedan hacer ellos respecto a eso- al escuchar eso Miriel se levanto un poco para poder verlo a la cara.
-¿Recuerdas la carta que escribiste?
-Sí.
-Todo lo que decía... ¿era en serio?- Él la miro y una pequeña sonrisa apareció en sus labios.
-Cada palabra.
-No estabas asustado de lo que pasaría contigo, dijiste que encontrarías una manera de volver a mí.
-Eso dije- contesto él bajando la mirada un poco como si recordara el momento en que escribió esas palabras.
-Bueno ¿Qué te hace pensar que yo no haré lo mismo?- Miriel acaricio sus mejilla haciendo que la viera a los ojos- si algo malo llega a sucederme...
-Es que no puedo dejar que eso pase... no lo permitiré... Quiero que estés bien, quiero que estés a salvo... y no está en mi naturaleza fallar- Legolas puso su mano sobre la de Miriel, en sus ojos podía verse la desesperación que sentía a pesar de la determinación de sus palabras- por largos años he ayudado y salvado a otros ¿por qué no puedo salvarte a ti?
-Meleth, sin importar cuánto te esfuerces nunca podrás protegerme de todo... inevitablemente un día nos separaremos, siempre lo supimos- Miriel hablaba con un tono dulce, pero lo único que Legolas pudo notar era su voz entrecortada. Bajo la mirada decepcionado, no había nada en este mudo que no haría para quedarse juntos por siempre, el problema era que no había nada que él pudiera hacer; y Legolas se odiaba por eso. Por su expresión Miriel pudo adivinar lo que Legolas pensaba y acariciándole una mejilla suavemente lo hizo mirarla a los ojos -... No es tu culpa. Desearía que no fueras tan duro contigo mismo.
-¿Cómo?- le pregunto él con sus brillantes ojos azules inundados de dolor.
-Bueno- dijo ella con voz dulce, y tratando de contener las lágrimas en sus ojos con una pequeña sonrisa- tal vez podrías empezar por dejar de pensar en todo lo malo que me ha pasado y comenzar a ver lo inmensamente feliz que me has hecho... Me gusta mi vida Legolas, amo el mundo que me mostraste y a todas las personas que he conocido, es más mucho más de lo que jamás hubiera soñado. Siempre supe lo que me esperaba si me quedaba en ese castillo gris... prefiero una vida llena de amor por corta que sea que pasar largos años envejeciendo sin afecto alguno.
Legolas no dijo nada simplemente la miró y acarició su rostro dulcemente, entendía perfectamente cómo se sentía, él también había hecho esa elección y no se arrepentía, no se arrepentía en absoluto. Juntando sus frentes murmuro "Gi melin" de una manera tan suave que se sintió como una caricia. Se quedaron así por un instante, pero pronto su tranquilidad fue interrumpida por el sonido de un cuerno que indicaba que debían prepararse para partir en breve.
-Se nos acaba el tiempo- dijo Legolas apesadumbrado mientras se separaban.
-No te desanimes meleth- le contesto Miriel- aún tenemos una última oportunidad de pelear.
***
-¿Cómo?- Brandir hablaba tratando de contener la ira que sentía mientras se pellizcaba el puente de la nariz- Puedes explicarme cómo es posible que hayas partido hacía la batalla con una absoluta y completa ventaja sobre el enemigo, ¡y de alguna manera te las has arreglado para volver huyendo asustado y derrotado, y con solo la mitad de los hombres con los que partiste!
-Todo paso tan rápido- fue lo único que Beren atino a contestar, tenía la mirada baja notablemente avergonzado mientras su hermano le gritaba- estaba completamente seguro de que venceríamos, y entonces apareció ella con un ejército de elfos.
-El rey debió llegar a socorrer a su hijo- Brandir comento con ironía.
-El rey estaba ahí, pero no era él quien los dirigía, la seguían a ella- Beren hablaba extrañado sin poder creer aun lo que sus ojos habían presenciado, su hermano bufo maliciosamente divertido.
-Tú sabes lo que eso significa ¿verdad?- Beren lo sabía bien y lo hacía enfurecer- ese elfo te quito a tu esposa y ni siquiera después de eso pudiste acabar con él... ni siquiera pudiste quitarla a ella de su lado.
Brandir le echaba en cara lo mucho que había fallado y para Beren cada una de sus palabras se sentían como puñaladas, la situación comenzaba a sobrepasarlo y sentía que hacía rato había perdido el control, se estaba volviendo loco.
-¡¿Crees que no lo intente?!- grito Beren arrojando a un lado con fuerza la mesa entre ellos- Hice todo lo que pude, aproveche bien cada oportunidad que se me presento ¡maldición! Incluso mate a Haleth.
-¡No lo dudó! Solo hace falta mirarte, la culpa te está comiendo vivo- Brandir contesto gritando igualmente y mirando con desprecio a su hermano- eres patético.
La expresión de Beren se quebró, sabía que Brandir tenía razón. Pero no iba a admitirlo, de una forma casi sobrehumana se obligo a ignorar lo que sentía porque sabía que si se permitía verse débil frente a su hermano perdería todo su respeto.
-Bueno tu tampoco fuiste de mucha ayuda- Beren le reprochó- Este plan era de ambos, ambos deseábamos que Gondor cayera y que los elfos se marcharan para siempre... ¿No es por eso que mataste al rey de Rohan?
-Lo hice- contesto Brandir con el más frío desinterés- a diferencia de ti no lo dude ni por un instante.
-Entonces ¿Dónde estabas cuando todo se salió de control? ¿Por qué no te encargaste del capitán de los Rohirrim? Dijiste que no era más que un criminal cualquiera ¿Dónde estabas cuando esas bestias con plumas arrasaron nuestras topas sin piedad?
-No trates de culparme cuando ambos sabemos que la única razón de que nos encontremos en esta situación es tu completa y absoluta incompetencia- contesto Brandir fastidiado- Así que será mejor que pienses que harás antes de que ellos lleguen, y créeme llegaran pronto.
-... mandare a la gente del pueblo- dijo Beren después de meditarlo por un instante- todos los hombres tienen entrenamiento militar, enviare al frente de batalla a cada hombre que pueda levantar una espada, con eso incrementaremos el numero de nuestras filas.
-Bien... esperemos que estén listos para morir defendiendo su tierra, y a su rey- contestó Brandir, Beren asintió para luego darse la vuelta y salir de la habitación. A solas Brandir dejo salir un suspiro mientras murmuraba para si mismo- porque yo no.
***
-Mírenlos, son demasiado jóvenes para estar al frente.
Aragorn habló, fue lo primero que dijo cuando sus ojos finalmente alcanzaron a ver a las topas de Beren plantadas a la entrada del reino, listos para defenderlo de los invasores. Habían llegado con el amanecer, el cielo era una revoltura de color gris y morado y aunque el viento soplaba el aire se sentía caliente.
-Son demasiado jóvenes incluso para pelear- añadió Eowyn montada en su caballo junto a Aragorn y el rey Thranduil.
-No creo que esos sean soldados- comentó Aragorn con pesar-iré al frente junto con los soldados de Beren que se quedaron de nuestro lado, intentaremos persuadirlos de no pelear, con suerte se darán cuenta de que no vale la pena y entregaran a Beren.
-Ten cuidado Aragorn- le advirtió Eowyn- si las cosas van mal no dudes en dar la señal y los jinetes de Rohan tomaran la línea ofensiva, somos la caballería y estaremos justo tras de ustedes.
-Lo sé, estoy contado con eso tenlo por seguro- le agradeció, para luego dirigirse al rey Thranduil- Así como cuento con usted majestad.
-Mis soldados están listos para cualquier desenlace.
-Le agradezco nuevamente, sé que esta no es su pelea pero...
-Mis soldados fueron llamados a pelear, y por voluntad propia han acudido- contesto el rey Thranduil antes de que Aragorn pudiera terminar- como su rey es mi deber guiarlos.
-Tomo la decisión correcta majestad, para su gente y para su hijo- contesto Aragorn con una pequeña sonrisa.
-Mis tropas cubren el flanco izquierdo, esperamos por su señal tal como ha sido acordado- contesto Thranduil para luego dirigirse hasta donde se encontraban los elfos.
-Estamos listos, mi señor- dijo Eamon, capitán de la guardia de Minas Tirith acercándose hasta Aragorn en su caballo- Todos los hombres de Gondor están en posición a su derecha.
-Bien- contestó Aragorn- puedes retomar tu lugar al frente de ellos.
El hombre asintió para luego volver por donde había venido. Luego Eowyn procedió a hacer lo mismo no sin antes dirigirle una última mirada a Aragorn que decía "Se cuidadoso".
- ¿Dónde crees que se encuentren?- Aragorn escucho que Gimli le preguntaba colocándose a su lado.
-Probablemente estén llegando a los límites del castillo.
-¡Es una locura!-Gimli bufo- corren un gran riesgo... sobretodo ella.
-Lo sé, pero me temo que ninguno estarían más a salvo aquí amigo mío- contesto Aragorn y entonces pudo escucharse un cuerno que anunciaba a los hombres del norte preparándose, el sonido helaba la sangre- Sea cual sea el fin que tendrá esto, está muy cerca ya- Aragorn murmuro.
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Holaaa!!!
Volví... Ya esta!!!! Ya por fin puedo decirles que está terminada. Aun así hay algunas cosas que tengo que aclarar pero lo haré hasta el final, por ahora no es importante.
Quedan seis capítulos y subiré uno por día así que me ayudarían mucho si votan y comentan en cada capítulo... Estoy muy emocionada y muy nerviosa porque lo lean 😳
De verdad espero que les guste
❤ VOTEN Y COMENTEN ❤