Life goes on (Kookjin)

Capitulo 3 ~

"- ¡Jungkookie! He traído comida ¿sabes que celebramos? - el nombrado levantó la cabeza de lo que estaba leyendo y solo negó ante la pregunta de su amigo.
- Pasaron dos cosas. La primera obtuve la nota más alta en la evaluación de la semana pasada y ... - hacia una pausa dramática para que su mejor amigo le pusiera toda su atención, cosa que cuando consiguió siguió hablando - resultante que Mi-suk aceptó salir conmigo mañana- decía emocionado comenzando a sacar la comida de las bolsas - ¿que debería ponerme? - le preguntaba a Jungkook que muy poca sabía de moda pero igual intentaba ayudar a Tae.
-La camiseta blanca que te regalo Hyung y esos pantalones de vestir café que son algo ajustados - decía Jungkook acercándose a la comida que tenía tan rico olor "*

Le tomo por lo menos dos semanas y varias noches de desvelo tener el valor para agarrar las llaves del antiguo departamento de su hermano e ir.

No le había avisado a sus padres solo había salido con Tannie en su pequeño bolso de transporte y emprendió el camino hacia el lugar.

Le había mandado a Jungkook un mensaje para avisar, pero este no marcaba ni siquiera un check por lo que ni le había llegado.

Tomo al autobús que lo llevaría e intento no pensar en lo que encontraría en el departamento y menos en la habitación. Tampoco quería pensar en el cereal y el ramen que aún guardaba Jungkook en la despensa como si Tae fuera a entrar en cualquier momento por la puerta.

Cuando estuvo parado al frente del edificio, tomó varias respiraciones e intentó tranquilizarse, luego de unos minutos vio que no surgió efecto, por lo que no perdió más tiempo intentando serenarse y tomó las llaves que sostenía con firmeza en su mano izquierda levemente tiritona y abrió la puerta de acceso.

Espero pacientemente el ascensor y cuando llego, marco el número del piso, dándose cuente que ahora le temblaba aún más la mano.

Estar al frente del departamento era devastador, no entendía como Jungkook lograba vivir ahí.
Jin no tenía tantos recuerdos en ese departamento comparado con el mejor amigo de su hermano, pero aún así sintió que le faltaba la respiración y que el perrito estuviera inquieto y ladrando solo empeoraba las cosas.

Cuando abrió la puerta y dio unos pasos dentro y grito el nombre de Jungkook. Pero seguramente el chico  estaría trabajando como el mismo le había dicho ya que no hubo respuesta y solo el silencio del lugar le daba la bienvenida.

Se apresuró a soltar a Tannie que seguía inquieto y el perrito salió corriendo por todos lados olfateando cada esquina del departamento.

Jin paso la vista por la cocina y sala de estar del pequeño departamento, para sus ojos todo estaba normal, pero era obvio que no era así, si todo hubiera estado normal su hermano estaría acariciando la cabecita de su perro y contándole de la última vez que había ido a una fiesta.

Sacudió su cabeza intentando con ello dejar atrás sus pensamientos, estaba todo realmente ordenado, casi no había loza sucia y en la mesa solo había una caja de pizza del lugar donde trabaja Jungkook, por otro lado todo lo demás estaba en orden.

Avanzó lentamente hacia la pieza de su hermano y vio la puerta cerrada y le partió un poquito más el corazón ver a Yeontan rasguñando la puerta, como avisándole a la persona del otro lado del dormitorio que lo había olvidado y que estaba afuera.

Jin sintió sus piernas temblar y pensó que de verdad no estaba preparado para dar este paso, había apresurado las cosas, como siempre, por lo que hizo lo único que se le vino a la cabeza.
Se sentó al lado de Yeontan e intentó controlar su errática respiración, esperando juntar un poquito de valentía y que llegara el momento en que se atreviera para abrir esa puerta.

No sabían que si habían pasado segundos, minutos o horas ahí sentado solo sabía que no se había movido de la dichosa puerta.

Inhalo y Exhalo 5 veces seguidas tal cual lo había visto en un video en YouTube y sorpresivamente a la quinta respiración ya se encontró un poco más calmado y había vuelto en si. Ahora solo debería decidir si pararse para salir de ese departamento y no volver más o si debería intentarlo nuevamente y abrir la dichosa puerta.

Se paró suavemente poniéndose sobre sus rodillas y luego apoyándose en la puerta logrando quedar completamente de pie, por el movimiento Yeontan había despertado y también estaba de pie observando a Jin mientras movía su colita.

Así que sin pensar y sin tiempo para contradecirse tomo una valentía que no sabía que tenía y giró la manilla de la puerta, abriéndola rápidamente como tratando de no arrepentirse de sus propias acciones.

Inmediatamente se le empañaron los ojos con lagrimas, la cama estaba desecha recordó lo mucho que su hermano odiaba tender la cama antes de irse a la universidad y lo hacía cuando volvía.

Encima de la cama había una camiseta blanca, Jin sabía cual era, el mismo se la había regalado, sabía que si la daba vuelta tendría en letras negro escrita la palabra "Celine"

Dio unos pasos dentro y tomó del velador un perfume que estaba destapado, se lo acercó a la nariz y olía a su hermano, agarró la tapa que estaba tirada en el suelo y lo volvió a su lugar.

Había un poco olor a encerrado en la habitación, así que cuidadosamente camino hacia la ventana, corrió las cortinas y abrió levemente la venta para dejar pasar un poco de aire.

Vio cómo Yeontan se subía a la cama y se echaba sobre una de las almohadas que tenía la parte de abajo del pijama de su hermano.

Era una imagen algo dolorosa por lo que  desvió la vista hacia el escritorio, estaba lleno de post it, hojas de cuadernos arrancadas, libros marcados por todos lados y destacadores, claramente había estado estudiando la noche anterior a que todo pasara.

Entre todo ese desorden vio un regalo envuelto en un paquete rojo y negro, estaba envuelto prolijamente, con una cinta azul que desentonaba totalmente, lo tomó entre sus manos, sintiendo que era una caja delgada de forma rectangular. Estaba tan concentrado en el regalo que saltó asustado como un conejo cuando sintió una voz.

-Es tuyo - era Jungkook en el marco de puerta, no lo había sentido entrar, podía ver como el menor bajaba la mirada y suspiraba temblorosamente - yo lo acompañé a comprarlo, lo iba a mandar como sorpresa para Japón - decía mientras sorbía por la nariz.

-Por mi cumpleaños - era todo lo que podía decir Jin, recordando cómo quedaban dos semanas para su cumpleaños cuando se entero que no volvería a ver nunca más a su hermanito.

El menor solo asentía y se daba la vuelta dirigiéndose hacia la sala en silencio.

Jin no quería seguir ahí adentro por el momento, quizás otro día vendría a buscar las cosas de su hermano, antes de salir de la pieza agarró la camiseta blanca, el perfume y el regalo, le hizo una señal a Tannie para que lo siguiera y cerró la puerta de la habitación.

-Intente avisarte pero no me contes ... - hablaba para justificarse frente al menor, pero la imagen frente a sus ojos le consiguió romper un poquito más su débil corazón, en el sofá estaba Jungkook en posición fetal llorando como nunca lo había visto antes.

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* Los recuerdos estarán en cursiva y entre comillas y casi siempre estarán al comienzo del capítulo.