𝐁𝐫𝐚𝐯𝐞 𝐒𝐨𝐥𝐝𝐢𝐞𝐫 𝐁𝐨𝐲 [Editando]

Capítulo 28

P.o.v Kanjii

El hambre se estaba volviendo insoportable, escucho la puerta metálica de su celda abrirse con brusquedad y un plato estrellándose contra la sucia pared.

-Tu comida, salvaje-le dijo el guardia mirándola y burlándose de ella

Kanjii recogió lo poco que no había caído al piso y comenzó a comer con desesperación, se sentía demasiado débil.

No sabia cuanto tiempo iba a poder resistir todo esto, no quería morir.

Luagn no podía quedarse huérfano.

La necesitaba y quería ir con él.

¿Pero como escaparía?.

Era imposible.

En ese estado y los guardias siempre custodiando su celda, no podría ir muy lejos.

Las lagrimas en sus ojos volvieron a caer, y no lo reprimió, desde que Azula le contó la verdad del por qué Lu Ten no regreso a su lado, todo su ser se habia terminado por derrumbar, su corazón estaba tan lastimado.

Apretó los dientes con fuerza, ante el mero recuerdo.

Le habían arrebatado a el único ser que finalmente le había correspondido.

A veces, por las noches, aun extrañaba el roce de las yemas de sus dedos por su piel o la calidez de sus brazos sobre ella.

Solo quedaban los recuerdos.

Nunca volvería a amar.

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-Me amas...?- pregunto con recelo, mientras lo miraba fijamente.

Él tomo su rostro entre sus manos callosas y ásperas, pero calidas.

Tardo unos minutos en responder, vio mil emociones pasar por esos ojos oro

-Si, si lo hago- respondió con sinceridad

Pero ella aun no le creía.

-Venimos de naciones enemigas, tú país quiere conquistar al mío, han asesinado a un montón de personas, no creas que no he llegado a pensar que estás conmigo para sacarme información al respecto-se soltó de su agarre, alejándose para evitar su mirada, por que si estaba perdidamente enamorada, pero tenía miedo, ¿qué tal si solo la estaba usando?

No podía dejar que sus sentimientos le nublaran el juicio.

Aunque...

Después de todo le salvo la vida en tres ocasiones.

Había retrasado la avanzada al muro interno.

También la ayudó a evacuar a mucha gente, sobre todo niños, atraves de unos túneles que ellos mismo había descubierto hace un tiempo.

¿Por que, entonces se preocuparía por unos simples civiles?

si solo deseaba su tierra.

Necesitaba saber la verdad.

-¿Que fue lo que te hizo cambiar de opinión sobre la guerra, Lu Ten?- pregunto mientras se cruzaba de brazos, pasaron unos minutos de silencio, hasta que finalmente le respondió.

-Tenia un concepto muy diferente de lo que era la guerra, como alguna vez te dije: creía que estábamos compartiendo nuestra gloria con ustedes...-vio que Kanjii iba a protestar algo ofensivo- No, espera-le dijo que se tranquilizará por que aún no terminaba-hasta que dos semanas antes de volverte a ver, encontré a un niño corriendo entre los escombros, tropezó e intente ayudarlo, pero cada vez que me acercaba él se alejaba, sus ojos se llenaban de lágrimas, y me decía que tenia una semana de no comer, sus padres habían muerto y él solo deseaba comer aquel duro pedazo de pan, me suplicó que le permitiera llenar su estómago si es que iba a morir....- Esas palabras me hicieron abrir los ojos a lo que realmente estábamos haciendo-susurro bajando la cabeza avergonzado-realmente solo hemos traído miseria y dolor a todo el mundo-podía entender a que se refería.

El genocidio de los nómadas aire.

La caza de maestros agua.

Y ahora la colonización del reino tierra.

-He tratado de convencer a mis camaradas de replantearse lo mismo que yo , ¿realmente quien es el enemigo aquí? Y solo puedo vernos a nosotros, por ahora he podido ganar algo de tiempo-el tono lúgubre, le hizo replantearse sobre lo que sucedería en el futuro, cuando lograrán derribar el muro interno- he mandado cartas a mi padre, pero el piensa que estoy equivocado y que no vuelva a darle vueltas en el asunto- finalmente alzo la mirada, aun tenía el brillo de preocupación en sus ojos, la verdad que todo esto no iba a terminar bien, pero tendrían que intentarlo.

Una apretón en su cintura la hizo girarse para encontrarse entre los brazos de Lu Ten -Tambien fue por ti Katsumiko-uso su verdadero nombre, provocando que se desconcertara y bajara la guardia- tú tambien ayudaste a apagar la llama de destrucción en mi...

-Lu...- no pudo terminar por que la beso repentinamente, ninguno se dio cuenta cuando la vela se terminó por consumir.

Pues esa noche fue su primera vez juntos.

Y se dieron cuenta de la belleza que había en cada nación, con tan solo conocer la piel del otro.
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Un fuerte ruido y los gritos de los guardias la despertaron momentáneamente, algo estaba ocurriendo.

Todo quedó en un silencio escalofriante, su cabeza le martilleaba provocando que tuviera náuseas y comenzara a sudar frío.

La puerta se abrio con un gran estrépito.

Se abrazó a sí misma, al ver a una sombra musculosa acercarse, abrió los barrotes de su prisión con fuerza, logrando traspasar el único impedimento entre ambos, Kanjii se cubrió la cara esperando lo peor, pero solo sintió como era suavemente acunada.

Alzo la vista.

Se encontró con unos ojos oro intensos que la miraban con calidez.

Como los de su amado.

Ahora sabia a quien los había heredado.

-¿General Iroh?-su voz sonó ronca ante la falta de agua

El hombre asintió y la cargó en sus brazos

-Es hora de salir de aquí mi querida Kanjii...-la pobre mujer deseo poder echarse a llorar de alivio, pero el padre de su amado no se lo permitió-Debemos salir de aquí, aproverachermos el eclipse para escapar-la deposito en el piso una vez fuera de la celda-¿puedes caminar?- la mujer asintió- entonces vamos- lo siguió por el largo pasillo, le echo un vistazo a los guardias que estaban en el piso noqueados, no dudaba y era obra de Iroh.

-¿A donde iremos?- pregunto ella, tratando de ir más rápido

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-Con la orden del Loto Blanco- le respondió con una sonrisa
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Nota: ay ya se este capítulo fue muy romántico/triste 🥺💕