•Capitulo 6•

672 29 1
                                    

20 de enero del 2020
🌎 Ciudad de México, México.

Me pongo mi chaqueta y me encamino a la cocina lista para tomar mi licuado. Que vendría siendo todo lo que desayunaré por hoy.

Estoy bastante emocionada y siento muchas mariposas en mi estomago, ustedes me entienden.

Giovanna se está encargando de empacar, la Chuc abandonará Ciudad de México por tiempo indefinido y está en busca de algún nuevo proyecto.

Miro mi whatssap mientras me tomo mi licuado, estoy bastante nerviosa. No se que es lo que me vayan a decir en la reunión que es lo que vaya a pasar, ¡Nose! Y toda esta cosa de misterio hace que me altere.

Camino con mi licuado por el departamento hasta llegar a la habitación de mi amiga. La mía ordenando sus cosas en una maleta, es difícil hacer una mudanza de una ciudad a otra. La entiendo completamente. 

—Hola— la saludo entrando, ella se gira a verme y me sonríe —¡Ay! No quiero que te vayas— si, en este caso, ya me había acostumbrado a convivir con alguien más en mi departamento. Era realmente difícil.

—No dudes que yo también te extrañare un montón amiga— me dice. —Me encargue de preparar lo esencial. El viernes en la mañana sale mi vuelo, ya en la semana termino de empacar— dice.

—Vale, amiga. ¿Extrañas mucho a tu familia?— le pregunto y ella asiente haciendo un puchero.

—No sabes cuanto— dice.

—Cuando yo me fui a Argentina, deje de ver por mucho tiempo a mi papá y a mi hermano. Creo que eran las dos personas más importantes para mi hasta la fecha, pero me acostumbré. Entre los viajes más largos de mi vida y por poco tiempo, creo que fue difícil— le digo. —Pero todo vale la pena— le digo sonriendo.

—Si, yo también creo lo mismo.—

Miro su reloj en la mesita de noche, doy un brinco para pararme y me acerco a depositar un beso en su mejilla.

—Te miro, ya que termine la reunión— le dig rápidamente —Voy tarde.— ella se carcajea.

—Te veo al rato— salgo rápidamente de la habitación y llego a la cocina, donde tomo mi bolso y celular.

<<<>>>

Había sido todo un reto en llegar en 15 minutos a la disquera. Agradezco que no había tanto tráfico, aún así me dio un ataque de nervios.

Entro al edificio, miro a la chic ay me entrega mi gafet.

—Hola, señorita Sevilla— me saluda. Me pongo mi gafet y salgo de ahí dándole las gracias.

Me apresuro a llegar al elevador, m presionó el botón del piso y este sube rápidamente. Las puertas se abren y me apresuro a caminar hasta la oficina donde me citaron. 

—¿Karol?, ¿y eso que viniste?— escucho la voz de Chucho a mis espaldas, giro sobre mis talones y lo miro ahí parada. A tan solo unos pasos de mi.

—Tengo una reunión— le digo —¿y tú?— le pregunto y el frunce el ceño.

—Vine a Grabar y en 30 minutos tengo una reunión con Fernando— asiento y miro la hora en mi reloj.

—Yo tengo una reunión en cinco minutos— le digo riendo —Debo de entrar— el asiento y me despido para tocar la puerta de la oficina.

Rápidamente se escucha un pase y me apresuro a entrar. Está Fernando, July mi manager y amiga, Juan Carlos, y Pedro.

—Pensamos que no llegarías— dice July. Le sonrió inocentemente mientras me siento en la silla libre.

—Lo siento, me quede platicando con alguien y no me dic eu ya del tiempo— digo riendo.

Me vas a ver ||Ruggarol Where stories live. Discover now