Mire de pies a cabeza a Minho antes de proponerle algo.

- ¿Quieres correr un poco?- dije segura después de ver sus prendas.

Él llevaba ropa cómoda que seguro lo utilizaría para las prácticas pero eran también adecuadas para correr.

- Estás loca...- dijo riendo mientras volteaba la mirada de hacia la ventana.

- Bien, esperame aquí y en una hora vuelvo- dije bajando un poco el cierre de mi sudadera para darme más respiro.

Iba a hablar pero no le presté atención, bajando así del auto para empezar a caminar mientras me estiraba.

Desde que salí de mi casa no había hecho ejercicio y hacer algo de cardio me venía fantástico y ahora que no había nadie, era una buena oferta.

El camino estaba realmente libre, no habían muchos autos ni personas.

Pasé por el puente del río Han hasta llegar a un parque donde paré a descansar.

Y ya que no había muchas personas, me quité la sudadera dejándome solo con mi sujetador deportivo que era el conjunto de mis leggins.

Mientras me estiraba un chico con tapabocas y un carrito para bebés apareció sentándose cerca de mi.

Lo escuchaba hablar con, no solo un bebé, sino más y me sorprendió porque no veía a alguna mujer cerca. Parecía un buen padre apodandolos "bebés" mientras los tocaba hasta que uno de sus "bebés" ladró haciendo que ría sonoramente.

- Lo siento, lo siento mucho- hice varias reverencias y él solo me hizo señas para que no me preocupara.

Desate mi cabello para volver a recogerlo ya que varios mechones se habían salido.

Me acerqué curiosa al carrito y vi a dos perritos. Uno de color blanco y otro de un color negro con marrón .

- ¿Cuáles son sus nombres?- dije acercándome solo un poco mientras me cubría nuevamente.

- Son Kkoming y Melo- respondió amablemente-. Mi nombre es Yesung- dijo tendiendome la mano.

Aunque no le podía ver el rostro. Con sólo ver sus ojos y su contextura física, sabía de quién se trataba.

El sólo recordar que uno de sus amigos sabía perfectamente lo que me iba a pasar e igual no me ayudó, hizo que mi boca se sintiera amarga.

Kyhyun no era un joven como yo así que dudaba que anduviera contándole a sus compañeros de grupo lo que había sucedido. Aunque no dudaba del chismoso de Heechul.

- Mi nombre es Han Mi- dije estrechando su mano.

Él no tenía la culpa de lo que sus estúpidos amigos hicieran.

- Es un gusto Han Mi- dijo al soltarme-. ¿Te gustan los perros?

- No. Prefiero a los gatos- dije sonriendo levemente.

- Tengo un amigo que también es amante de los gatos.

Sabía de quién hablaba pero sólo ignoré todo para que no se asuste al saber que yo sabía quién era.

- Si vives sola, te recomiendo que tengas un perro. Te harán sentir cómoda y protegida- dijo acariando a sus perritos. En serio los quería y ellos a él.

- Lo tendré en cuenta- dije sacando mi móvil para ver la hora-. Debo irme. Fue un gusto conocerlo.

- Espero volver a verte- se despidió de mi con una reverencia al igual que yo.

¿Eres una sasaeng? (2da Parte) [TERMINADA] Where stories live. Discover now