11 - Año nuevo, hogar nuevo

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Un nuevo años comenzaba. Y como era de esperar por las fechas, Kazuma fue junto a su familia a visitar la casa de sus abuelos. Los cuales, obviamente, él no conocía de absolutamente nada.

— ¡Waah! ¡No puedo creer lo que dijo! — Exclamó sorprendida Raiha mirando la televisión — ¿Escuchaste eso, hermanito? ¡Dijo que la ama! ¡Y le dio un beso!

 — Sí, sí, que emoción — El muchacho se encontraba recostado en el piso al igual que su padre, dándole completamente igual todo. 

— Oh vamos, Kazuma ¿Eso son los ánimos para empezar el año? — Mencionó su abuela con una sonrisa.

— Después de todo lo que pasó el año pasado... creo que ya solo puede mejorar, abuela. 

— ¡Kazuma, Raiha, feliz año nuevo! — Saludó su abuelo entrando a la habitación — Toma pequeña, tu mesada de año nuevo.

— ¡Wii! ¡Muchas gracias, abuelito! — Agradeció contenta la pequeña, mientras su hermano la miraba con envidia.

— (Maldita injusticia... ser el primogénito para esto) — Se quejó Satou, para luego acercarse a su padre — Papá, ¿falta mucho para que nos vayamos? Ya llevamos un rato.

¿A qué viene tanta prisa? — Preguntó el mayor en voz baja — Además, todavía falta visitar aquel lugar.

Al rato, y tal como había mencionado el adulto, los tres se dirigieron hacia el santuario mas cercano para realizar sus agradecimientos. Allí, la familia aprovechó para sacar un omikuji y ver que tal seria su fortuna este año.

— Tsk, suerte incierta — Dijo su padre al leer el papel.

— ¡Oh, me ha tocado excelente buena suerte! — Exclamaba contenta Raiha — ¿Y que hay de ti, hermanito? lee el tuyo.

— Mmm, a ver... — Kazuma desenrolló el pequeño papel y lo leyó en voz alta — "Buena suerte. Viaje: Encontraras la paz en tus próximas vacaciones. Estudios: Mantendrás buenas notas, pero no deberías confiarte. Disputa: Estarás en medio de una muy grande, pero saldrás bien parado. La persona que estas esperando: Puede estar mas cerca de lo que crees"... Y eso es todo.

— Eeeeh ¡Pero si deberían decir cinco cosas, no cuatro! — Protestó la niña — ¡Vamos, dilo completo!

— Ugh, bien... *suspiro* "Amor: Es hora de que vayas abriendo tu corazón. La posibilidad de encontrar a tu pareja próximamente es muy real."

— Vaya, vaya, hijo e' tigre — Isanari se acercó a su hijo y rodeó sus hombros con su brazo — Me pregunto quién será la afortunada.

— Viejo, es solo una tonta hoja de papel — Señaló el chico — Estas cosas están hechas para ilusionar a lo tontos. Dudo que ninguna de estas cosas se hagan realidad...   

En ese momento, acompañado de una ligera brisa, escucharon el sonido de pisadas cerca de ellos. Y al fijarse de quienes eran, se percataron que se trataba de nada mas ni nada menos las quintillizas Nakano, las cuales iban vestidas de manera tradicional. 

— ¡¿Por qué siempre apareces a donde sea que vayamos?! — Se quejó Nino.

— Lo mismo me pregunto... — Coincidió Kazuma.

— ¡Kazuma, Raiha! ¿Qué tal si vienen a nuestra casa? — Propuso Yotsuba.

— Gracias, pero creo que pa- — Antes de que el muchacho pueda rechazar la idea, su hermana pequeña se adelantó.

[Konosuba x Go toubun] ¡Dios bendiga a estas maravillosas quintillizas! 2Where stories live. Discover now