EL SOCIO DE PAPÁ

Capitulo 28

Nos miramos sin decirnos nada. Cada uno esperando que el otro hablara primero. Sacudí mi cabeza despertando de mi transe.

-¿Qué haces aquí? – Pregunté fríamente apretando mi mano en la toalla que traía.

-Tu padre ha salido…

-No pregunté eso…

-¿Por qué no me dijiste que no querías salir conmigo porque ya tenías planes con él? – Preguntó como respuesta a mi pregunta.

-No sabía que íbamos a ir allí. – Respondí tratando de no perder mi frialdad.

-¿Ah no? – Levantó una de sus cejas y soltó una irritada sonrisa. Se puso de pie y caminó hacia mí.

-N-no… - tenerlo al frente me había puesto nerviosa. “Amelia, vamos, fuerte” me dije a mi misma.

-¿Entonces porque no me avisaste? No contestaste a mis llamadas. – Su mano acarició mi mejilla. Él sabe cómo puede manipularme con sólo tocarme.

-¿Cómo te iba a avisar con él allí? – Traté de no mirarlo a los ojos o ya estaba perdida.

-No lo sé, ¿un mensaje?

-Dejé mi celular en el carro – mentí.

-¿Pasó algo de lo que tengo que enterarme?

-No

-Mírame, Amelia. – Buscó mi mirada. Lo miré a los ojos y él sonrió. – Mientras sigas siendo mía y él no te ponga un dedo encima, no tengo problemas.  – Asentí y él se acercó a darme un beso en los labios. Respondí a su beso y luego me alejé.

-Es mejor que salgas… Papá puede llegar en cualquier momento…

-No lo hará. Me pidió que te cuidara un rato mientras no estaba. – Me tomó de la cintura y me acercó de nuevo a él. Me dio un beso en la mejilla. - ¿Quieres que me valla ya? – Me susurró. No sé si sabe aún cuan débil que soy hacia él. Miraba sus labios y ojos alternamente.  Negué con mi cabeza. Él sonrió y me besó. Su lengua buscó de la mía mientras acariciaba mi pelo. Me apretó hacía él soltando un pequeño gruñido. Llevé mis manos a su cuello y lo abracé. Sus manos bajaron hasta el borde de mi toalla y la dejaron caer. Una vez más, estaba desnuda para él…

Me desperté un poco desorientada. Miré hacia mi lado y él no estaba. Suspiré y me levanté. Mordí mi labio al sentir un poco de dolor. Esta vez no había sido tan delicado como antes, aunque no puedo negar que fue de mi agrado. Me di un baño y me cambié. Tomé mi celular, tenía un mensaje varios mensajes. Contesté a pocos de ellos y me decidí a bajar hasta el comedor para comer algo. Escuché unas risas en la cocina. Entré y Alicia estaba prácticamente subida en la espalda de Matt mientras  él la agarraba por los muslos dándole vueltas. Sentí algo que no fue celos. Sentí lastima por mí misma. Un nudo en la garganta apareció, tragué y tragué aguantándome las lágrimas. Él me vio y paró, mas no la bajó. Entré y pasé por su lado como si no hubiese visto nada. Tomé un vaso de leche tibia y salí de allí sin decir una palabra. Sabía que si iba a mi habitación iba a caer en llanto. Así que salí al patio sin importar cuanto frío hacía. Llamé a la primera persona que me vino a la mente “Ian”.

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¡Feliz año nuevo!

Espero que este año entre lleno de bendiciones y alegrías para cada una/o de ustedes. 

Gracias por sus hermosos deseos de año nuevo♥ 

Les quiero dar las gracias por tomar unos minutos de su tiempo y leer esta novela. Esto va para largo, espero que no se cansen de mi  y que me tengan paciencia. Tardo pero no olvido. Les debo una grande♥ Les prometo que muy pronto estaré subiendo capítulos más largos. 

Comenten que les ha parecido♥ 

Beso & abrazos♥ 

~Gracias por leer~♥