Capítulo 35:

3.6K 360 111
                                    

Hoseok amaba las noches estrelladas, subía hasta lo más alto de las colinas y veía como las estrellas brillaban iluminando la noche, había visto muchas estrellas fugaces y siempre pedía el mismo deseo.

"Que mi bebé nazca sano"

Hace varios meses ya qué Hoseok se había ido del pueblo, el padre de Yoongi había enviado a destruir la casa en la que vivió con sus padres y tuvo que salir hasta el bosque para empezar a vivir en una pequeña choza qué él mismo había construido, pasaron dos meses y se dio cuenta que un cachorro estaba creciendo en su vientre, sentía tanta felicidad que corrió en busca de Yoongi olvidando un pequeño detalle, él ya estaba casado.

Había ido a su casa y toco la puerta eufórico y cuando la vio todo su cuerpo se congelo volviendo a la realidad, la cruda realidad de que ellos ya no eran nada. La Omega ni siquiera tuvo que preguntar, el aroma de Hoseok lo delataba, estaba embarazado.

-Yoongi no es el padre de esa cosa -dijo ella cruzando sus brazos mirándolo con desdén- Seguramente te acostaste con un Alfa por ahí y vienes a tratar de que mi Alfa se haga cargo del cachorro pero eso no va a pasar.

-Quiero hablar con él -dijo agachando la cabeza avergonzado.

-¡Él no está aquí! ¡Ahora vete de mi casa y no vuelvas! ¡Ese bebé bastardo no entrará en mi casa jamás! -Hoseok sintió su rostro mojado y noto que la Omega le había echado una jarra con agua, empezó a irse cuando Suran empezó a gritar y recoger cualquier cosa del suelo para lanzarselo- ¡Es mio! ¡Jamás volverá a ti! ¡Es mi esposo! ¡Es mi Alfa no tuyo! ¡Yo seré la madre de sus cachorros no tú! ¡No me quitaras a Yoongi hijo de puta! ¡Largo!

Hoseok se fue demasiado avergonzado y con el corazón hecho trizas, se sentía un amante en busca de consuelo, regreso a ver a la casa y noto a la Omega en el suelo llorando, Yoongi no estaba y seguro ella no le diría nada.

Yoongi estaba en la casa, escuchando todo aguantando la mirada enojada de su madre mientras veía a Hoseok irse de su casa con el cacharro de ambos. Fue tan cobarde qué ni siquiera lo fue a buscar los días siguientes.

-¿Cómo que estas esperando un hijo? ¿Te das cuenta de lo que dices maldito sinvergüenza?

-Señora por favor váyase, jamás dije que fuera de su hijo.

-Créeme que si fuera tan idiota como no estuviera aquí. No puedes tener a ese niño, va arruinar el matrimonio de mi hijo, dando gracias el escandolo no lo escucho nadie. Aborta.

-¿Qué? -Hoseok la miro y ella estaba tan segura de sus palabras qué él solo pudo reír ofendido- Mire señora usted no tiene derecho a venir aquí, su esposo se encargo de echarme del pueblo pero aquí ustedes no tienen poder, ahora váyanse y déjenme en paz.

-Te dije que no quería verte, pero fuiste a la boda y luego fuiste a buscar a mi hijo para decirle de ese bastardo qué crece en tu vientre, por suerte mi hijo no lo sabe pero te diré algo, mientras yo viva tu no vas a pisar mis tierras y no tocaras a mi hijo o juro por buda qué me conocerás Jung Ho...

-Kim -interrumpió levantándose de la mesa enojado- Soy Kim Hoseok, cuide sus palabras.

-Tú siempre serás del reino Jung, siempre seras un cobarde, un don nadie y sobre todo siempre serás la zorra de mi hij...

La mano del Omega fue directo a la cara de la mujer enfrente de él. Hoseok gruñó ofendido sobando su mano pero él reacciona al ver el rostro enfadado de la Omega, la mujer se aguanto las ganas de llorar y respiro profundo. Hoseok sabía que había cometido un error, quería pedir, suplicar perdón pero las palabras no salían de su boca, su lobo y él estaban tan asustados.

Sempiterno [Omegaverse] COMPLETA Où les histoires vivent. Découvrez maintenant