¿Eres una sasaeng? (2da Parte) [TERMINADA]

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- Opino lo mismo- dije sonriendo complacida.

Abrí las puertas que dividían aquel infierno del mundo real y solo vi las espaldas de Kang Hoon y de la señora Dispatch que se veía agitada hablando en su móvil.

- Señora Dispatch- llamé la atención de aquella mujer que cortó al instante la llamada dirigiendo su atención a mi.

- Hanul- dijo mirándome completamente- veo que has perdido peso- hizo una mueca al ver mi cabello con el horrible tinte de hace dos años- no tenemos tiempo, debemos de irnos.

El abogado sólo me hizo una leve reverencia y caminamos hasta un automóvil negro, muy lujoso.

- Irás a una estética ahora, pedí una cita para ti, irás con mi conductor, deja que te vean todo lo que quieran, no te harán nada y la cita ya está pagada- dijo la mujer al subirnos- me puedes llamar Hae Won, es mi apodo. Mientras te examinan, puedes pensar en el tuyo.

- Disculpe, pero tengo muchas preguntas que quisiera hacerle...- hablé con miedo y ella me miró confundida.

- Lo sé, pero responderé cuando te veas mejor- dijo chasqueando la lengua- Espero que nunca más uses ese tono con nadie.

La miré perpleja y con más miedo.

- En esta industria, el que tiene miedo pierde o muere...- dijo poniéndose unas gafas de sol- bienvenida al caos.

En todo el trayecto hice silencio, solo los griterío de Won hacían ruido, hablaba en su móvil y. le ordenaba a alguien que vaya a algún lugar, no entendía de qué hablaba realmente. Luego de una hora más o menos Won y Hoon bajaron frente a un enorme edificio tenía algo escrito pero no vi muy bien, suponía que era Dispatch.

- Iremos al salón - me avisó el hombre que conducía.

- ¿Sabe qué me harán? - pregunté y sólo vi que presionaba un botón y cerró una ventana que nos dividía.

No quería hablar. Qué amable su forma de aclararlo.

Pasaron unos largos minutos antes de llegar y un chico con traje esperaba.

- Él le dirá todo- dijo el conductor al abrirme la puerta.

No sabía dónde estaba ni en qué me estaba metiendo.

- Hanul- me habló el chico haciendo una reverencia- llámame Joon. Soy fotógrafo de Dispatch.

- Hola Joon ¿Qué hacemos aquí?- Fui directa.

- Solo te mirarán aquí y allá, nada fuera de lo común y te arreglaran el cabello- sonrió- seré tu guía durante todo este proceso de adaptación, así que no te preocupes, si algo es peligroso o sufrirás, te lo advertiré con anterioridad.

- ¿Y la mujer vendra? - hablaba mientras miraba hacia los lados en un intento de localizarme, pero no pasó a más de ser solo un intento.

- La Ceo Hae Won está ocupada siendo eso, Ceo- dijo riendo y me hizo un ademán para que entre y es lo que hice- sé quién eres y qué hiciste, creo que todos lo saben, es por eso que empezarás desde cero y eso incluye, cambio de imagen y así podrás pasar desapercibida.

Arrugue el ceño y el solo se acercó a una mujer mostrándole una tarjeta. Otra mujer nos atendio y me guió hacia una habitación.

Era un lugar muy elegante, así que deduje que era costoso. En la habitación solo había una camilla y una mesa de metal con muchos artefactos quirúrgicos que según recuerdo, en la universidad decían que era para cirugías plásticas.

- Quitese toda la ropa, necesito que se quede desnuda, solo puede ponerse la bata- me ordenó señalando una bata y el baño.

Esto era totalmente incomodó para mi pero me mordí la lengua haciendo lo que me había dicho. Cuando volví, pude ver que ella sostenía una cámara y eso me alertó completamente.

- Aleje esa cámara- dije cubriéndome lo más que pude.

- No se preocupe, solo tomare fotos de todos los lunares que tenga- dijo sonriendo- ah si tiene tatuajes también, no se preocupe y calmese. Es para que en unos días te lo quitemos.

En el rostro solo tenía uno diminuto cerca del labio inferior pero en mis brazos y piernas tenía unos dos o tres, pequeños. Pero tenía dos tatuajes que me hice en prisión, uno en la muñeca que me lo hicieron obligatoriamente ya que era como una marca que hacían a todos, era un código de barras, era horrible, me sentía como un objeto que podías comprar en un supermercado. El otro tatuaje era un simple corazón que lo tenía detrás del hombro izquierdo, era pequeño pero me lo había hecho porque quería.

Me acosté boca arriba y ella abrió mi bata como si fuera de lo más normal, tomaba fotos de todos mis lunares, los media y anotaba en su computadora. Hizo lo mismo cuando me di vuelta.

Tardó casi una hora en analizar todo.  Al salir de esa habitación me llevaron a una sala donde me lavaron, destiñeron, cortaron y vuelto a teñir el cabello en un color marrón oscuro. No era muy distinto a como me veía antes a excepción de que mi melena ya no llegaba hasta mi cintura, ahora apenas tapaba mis hombros.

- Les agendare una cita en dos dias- dijo la mujer que suponía era la recepcionista del lugar con una gran sonrisa.

- Paseme el presupuesto a mi móvil- dijo Joon sonriendo.

Era muy apuesto y utilizaba su belleza para chantajear a la mujer. Podía notarlo a leguas.

Salimos del lugar y fuimos a el automóvil que aún nos esperaba afuera así que solo subimos.

- Estos son tus documentos- dijo Joon pasándome una billetera la cual abrí.

En él estaba mi cédula de identidad, dos tarjetas raras y cuatro tarjetas de débito que nunca había visto.

- ¿Qué son?- pregunté.

- La única de la cual puedo hablarle, es de ésta- señaló una de las tarjetas extrañas- es de su nueva casa. Es a donde nos dirigimos, es en Seúl.

- ¿Es mi viejo departamento? - pregunté confundida.

- No, claro que no. El día en que usted fue sentenciada, fue el día en que el abogado Hoon terminó todo trato que tengas con quien sea, y ahí fue tu departamento. Ahora tiene una casa en Cheongdam-dong y todo lo que esta dentro, incluyendola, está a su nombre, no se preocupe. Ya está bien equipado, y no hay cámaras si es que eso le preocupa-   quitó un celular de su bolsillo- esto es tuyo, está intervenido por la empresa así que no haga ninguna llamada a personas ajenas a la empresa. Si quiere hablar con otras personas... Es mejor que se consiga uno nuevo pero espere unos días. Mañana debe de ir a la empresa, ahí le explicaran cómo usar las tarjetas y se le aclararan todas las dudas.

- Entiendo, gracias- dije cogiendo el celular para luego desviar la mirada hacia las calles- ¿Qué es eso? - pregunté al ver una aglomeración de personas.

- Estamos pasando detrás del edificio de JYP, las personas vienen a ver a Twice, tendrán su comeback este mes- respondió Joon arrugado la nariz- tu casa está muy cerca de JYP y SM...

Parecia que algo le inquietaba por sus gestos.

- ¿Algo que no sepa?

- Varios idols de JYP están en nuestra mira.

Les regalo el segundo capítulo.
Gracias por leer y apoyar el libro💜