Capítulo 44 - Aquí, contigo

258 74 67
                                    

Cuando llego a casa subo las escaleras bastante animada ya que por fin los exámenes han finalizado. Dejo la mochila sobre la mesa y me deshago la coleta, a continuación sacudo mi cabello pasando los dedos por él para que me quede bien puesto.

-¿Qué tal el último examen? -Dice mi tía apoyada en el quicio de la puerta.

-Yo espero que bien -suspiro soltando una sonrisa -, pero ya se verá. Por cierto, te quiero comentar algo.

-Claro, dime.

-No voy a pasar la noche aquí, me voy con Caleb a un hotel. Resulta que Jackson tenía una reserva para ir con Madison pero no han podido ir así que nos lo ha dado a nosotros.

-¿Y cuándo te vas?

-A las cinco. Creo que tenemos incluida la entrada al balneario también.

-Está bien cielo pero ya sabes -arquea una ceja.

-Lo sé de sobra -sonrío.

Cuando estoy apunto de cerrar la pequeñ a maleta que me he hecho escucho unos gritos en la calle. No puedo evitar asomarme porque esas voces se me hacen bastante conocidas.

-¡¿A dónde te crees que vas?! ¿Quieres escucharme un momento? ¡Deja de comportarte como un crío! -Dice Jack bastante furioso en la entrada de su casa mientras observo a Callum poniéndose el casco de la moto.

-Ya te he dicho lo que te tenía que decir -espeta -. Ahora llamaré diciendo que hoy no podré ir, que iré mañana.

-Así no se hacen las cosas Callum.

Callum ignora a su tío, se sube a la moto y arranca saliendo con dureza de la urbanización. Niego con la cabeza y continuo preparándome las cosas. Poco después escucho el claxon de un coche, me asomo por la ventana cerciorándome de que es Caleb. Me despido de mi tía y salgo de casa. Antes de subir al coche dejo en los asientos de detrás la mochila.

-¿Lista?

-Sí. ¡Por fin se han acabado los exámenes, no me lo puedo creer!

-Y por fin te voy a tener esta noche para mí -Caleb coge mi mano besando parte de mis dedos mirándome intensamente, mi corazón revolotea contra mi pecho mientras me muerdo el labio.

Unos minutos más tarde cuando llegamos, me quedo totalmente alucinada ante el hotel que está delante de nosotros.

-¿De verdad es este el hotel? ¿No te has equivocado? -Pregunto observando el edificio y posteriormente la entrada.

-No, es este el hotel. ¿Bonito, verdad?

Caleb coge su cámara de fotos acercándoselo al rostro, en concreto al ojo derecho y salta el flash.

-Vamos, ponte -me anima.

-Aquí no, luego -sonrío y cojo su mano guiándolo conmigo hacia la entrada.

La entrada está rodeada de pilares y cuando te diriges a la puerta giratoria, el suelo está de color azul. La entrada del hotel es una pasada: hay como una estrella gigante arriba en el techo y la recepción es de color verde mientras que el suelo es de color rojo con puntos blancos alrededor. Caleb da su nombre, nos hacen firmar unos papeles y le dan la tarjeta de la habitación. Cuando entramos observo la habitación: las paredes son de color salmón, no es muy grande pero hay un balcón con vistas a Milán.

Close  ✔️Where stories live. Discover now