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Fred enciende las luces de la casa

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Fred enciende las luces de la casa. Para haber estado tan solo dos semanas en donde nuestra abuela lo sentí como si hubiese sido un mes completo. Estiro mis extremidades antes de subir las maletas e ir a mi cuarto, necesito una ducha urgentemente. Con cuidado de no tropezarme abro la puerta, pero el reflejo de una persona asomándose en mi cama me hace detenerme de golpe. Pestañeo muchas veces al ver que la persona se ha levantado y se está acercando hacía mí. Doy un paso hacia atrás con el miedo de que me haga algo, pero tan solo alarga su mano y enciende las luces. Todo el aire sale de mis pulmones al ver que es mi mejor amiga con una sonrisa en su rostro.

—Estaba a punto de llamar a la policía —le comento dejando mi maleta a un lado para luego abrazarla fuertemente —. Te he extrañado un montón, no sabes cuánto me hacías falta.

— ¿Hace cuánto no te habla Colin? —me separo de ella. Esta chica me lee la mente o algo parecido porque siempre sabe lo que me ocurre.

—Desde que me fui, ni siquiera me mandó un mensaje estando allá, ya no sé qué más hacer.

—Tengo la solución para tus problemas —levanto una de mis cejas para que ella de un paso hacia al costado mostrándome un conjunto de ropa sobre la cama —. Iremos a la última fiesta antes de entrar al instituto.

—Es una broma, ¿Verdad?

—Claramente que no y las chicas ya vienen en camino.

No la mato solamente porque no tengo las fuerzas para hacerlo.

—Están locas, no iré a esa fiesta —paso por su lado para abrir mi armario y sacar dos toallas.

—Estará Colin —me detengo de golpe y la miro intrigada—, será en su casa.

Sería una oportunidad para arreglar lo que sea que tengamos porque lo único que he pensado en todas estas vacaciones es sentir sus brazos rodeándome y sus besos; Dios mío extraño mucho sus labios.

—Iré, pero búscame otro conjunto de ropa, quiero ir más cómoda —le digo saliendo de mi cuarto y entrando al baño.

Me termino de arreglar en media hora después. Blair me dejo lista y un poco más presentable de como llegue. Me miro en el espejo para arreglarme el cabello y me echo un poco de perfume. Escuchamos la bocina del auto de Violet. Me despido de mi padre y le digo mis planes, no quiero que me castigue por mentirle. Las chicas nos abren la puerta, cuando estamos adentro Violet arranca tan rápido que no alcanzo agarrarme y choco contra el asiento de adelante.

—Amiga amo que tu madre te haya prestado el auto, pero podrías bajar un poco la velocidad, que en cualquier momento me quedare sin dientes —me miro en el reflejo del teléfono para cerciorarme de que todo esté en orden y que no me falte nada.

—Lo siento, lo siento.

— ¿Y cómo te fue en las vacaciones? —me pregunta Winner mirándome por el espejo retrovisor.

Bésame sin sentirOpowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz