Capítulo 4 "El segundo error"

352 49 76
                                    

—Dios,que incómoda me sentí cuando estábamos con aquellos chicos—dijo Elizabeth mientras le daba un sorbo a su frappuccino de cajeta

—¿De qué hablas?—pregunté yo,sin entender muy bien de lo que hablaba.

—No fingas demencia Scar,ese chico...¿Cómo se llama?—puso sus dedos en su barbilla,pensando

—¿Blake?—pregunté yo,mientras la imagen de sus ojos pasaba fugazmente por mi cabeza

—Exacto,ese,joder ese chico te mira como si fueras un trozo de carne,pareciera que en cualquier momento se te echa encima

Mi cara ardió—Estas loca

—La verdad no es una locura

—Como sea,te equivocas—rebatí

—No fingas,que no te encanta el chico

—No...,para nada—hable en tono sereno

—Scarlett,está bien,si te gusta,no hay nada de malo.No es como si fueras a casarte con él

—Es demasiado rápido,como para que me guste—dije yo

—Por supuesto que no,a mí me gustan los chicos con verlos una sola vez,es muy normal.Por qué gustar es una cosa y querer es otra,para que te guste una persona solo basta un vistazo,pero para querer se necesita tiempo

—Yo,me pongo nerviosa cuando lo veo—admito

—Es totalmente normal el chico podría derretir una piedra con la mirada,apuesto a que se te deshacen las bragas y piensas en muchas cosas sucias—sonríe coqueta alzando una ceja

Sentí la cara caliente de nuevo

—¿Por qué eres así?

—No tiene nada de malo,nena,el sexo es delicioso y lo más natural del mundo,nunca te avergüences de ser sexualmente activa

—Es que,ya sabes yo...

—Cierto,eres virgen,pero...¿Sabes? La virginidad está demasiado sobrevalorada.Es cierto que para muchas chicas es muy importante y está bien,pero para otras no y,eso también está bien,ser virgen no te hace más valiosa que otra y,no serlo, tampoco te hace menos que otra.Que un hombre prefiera a una virgen,es puro ego y machismo,los hace sentir importantes,esos son los hombres que no valen la pena por qué necesitan de ese tipo de cosas para sentirse especiales,si algún día un hombre cuestiona tu virginidad,corre de ahí,no vale la pena,el día que te sientas lista para hacerlo,hazlo y déjate llevar

—Eres mi ídola Beth—Sonreí ampliamente

—Solo te digo la verdad,para eso son las amigas,¿No?

—Si,es cierto

—Prometo siempre decirte la verdad—afirmo ella

—¿Por más jodida que sea?—pregunté curiosa

—Si eso te ayuda,si,por más jodida y dolorosa que sea,lo haré—respondío la castaña con naturalidad

—Tal vez me rompas el corazón

—Recogeré cada uno de los pedazos,para juntarlos de nuevo,cariño—guiño el ojo y sonrió

Aunque Beth pocas veces era cariñosa y, cuando lo hacía,lo decía de una forma,qué tal pareciera que no importaba.Pero yo la conocía lo suficientemente bien,para saber que hablaba en serio,era una promesa,una promesa que ni siquiera necesito ser prometida,por qué esto ya estaba escrito entre nosotras,ella lo sabía y yo también,siempre seríamos las dos juntas,contra todo y todos,si perdía a Beth,la buscaría hasta el último rincón del mundo.

Lo Que SomosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora