Capítulo 52.

8K 758 936
                                    


Parte 1/2.

Jeremy.

─Ángel, ¿Te importaría explicarme qué fue eso?─ Me senté frente a Carter con un suspiro, luego de la acalorada discusión con Nicholas, donde le había llamado de todo menos lindo─. ¿Conozco a ese muchacho?

─Daddy... No me siento listo para hablar al respecto─ mustié. No quería que todo lo que habíamos hablado por la mañana se cayera a pedazos tan rápido por culpa del imbécil de Nicholas─. ¿Podemos hablar de otra cosa?

─Te hice una pregunta, Jeremy.

─Es el chico con el que sale Oliver─ refunfuñé, apretando mis manos entrelazadas sobre la mesa. No tenía otra opción que contestar─. O al menos eso creo.

─ ¿Ese es?─ rió con sutileza, más la sonrisa prevaleció en su rostro cuando alcé la vista para mirarle con algo de molestia plasmada─. No le culpo, el niño con el que está parece mucho mejor partido que Oliver.

Se llevó la taza a la boca, con una tranquilidad irritante. Parecía estar hablando del clima, y no de las desgracias de mi amigo.

─ ¿Perdona?

Arqueó una ceja cuando espeté mi cuestionamiento, por la manera en la que lo hice.

─Vamos ángel, son el agua y el aceite. Los ves y te das cuenta─ Intentó sostenerme la mano sobre la mesa, más la aparté antes de que pudiera hacerlo─. Te estás poniendo difícil últimamente, ¿Serán algunas influencias?

─Oliver es mi amigo.

─ ¿Y por qué todas nuestras conversaciones tienen que ser entorno a él? ¿Mh?─ No, me era imposible no molestarme. Siempre estaba difamándole─. Tarde o temprano tendrás que elegir con quién quedarte, no te aseguro que estaré disponible siempre para ti si en lo único en lo que piensas es en esa lacra.

─ ¿Por qué tienes que ser tan malo con él todo el tiempo? Sólo no lo entiendo, parece que te gusta saber que la pasa mal.

─Él no me escucha, así que me da completamente igual.

─No me parece justo.

Rodó los ojos, soltando un bufido. Cada vez me soportaba menos, y lo tenía claro. No me hacía feliz saberlo, ni mucho menos admitirlo, porque yo apreciaba a Carter, más sus actitudes me resultaban difíciles de digerir cuando se refería de un modo tan despectivo a Oliver. El rubio nunca hablaba mal de él, ni siquiera se había mostrado molesto por saber que yo salía con quien en algún momento fue su Sugar Daddy, cosa que podría fastidiarme incluso a mí si en el futuro llegara a conocer a la futura pareja de Carter.

─Cariño, ¿Por qué no me hablas un poco de tus padres?─ El drástico cambio de tema consiguió erizarme la piel. No tenía idea de a qué se dirigía la cuestión─. Llamabas a tu padre entre sueños, háblame de eso.

─ ¿Por qué hablaríamos de eso?─ Él tamborileaba los dedos sobre la mesa, a la expectativa de mi respuesta. Yo, por otro lado, permanecía un poco a la defensiva─. No hay una buena relación, no veo necesidad de...

─No quieres hablar conmigo, ¿Cierto? Porque no veo otra razón para que evadas cada tema que decido tocar.

─No es que no quiero hablar contigo, mi padre abandonó a mi madre antes de que yo naciera, es una conversación algo sensible─ Crucé mis brazos. Enterarme de la historia había sido devastador, había sido pocos días antes de decidir irme de casa─. Y quién yo siempre creí mi padre resultó mi padrastro, eso explica el favoritismo con mis hermanos menores.

Entrenando al Baby Boy.Onde histórias criam vida. Descubra agora