ATRAPADOS EN LA ESFINGE

EN EL CUARTO DE ELLA... COMPLETO

Asami pensaba, es temprano, pero esta noche, te quitaré esos sentimientos inútiles que están invadiendo tu cabeza mi hermoso Akihito. Aprenderás a no meterte en la boca del lobo, por qué serás completamente devorado. Aparte quiero enseñarte cuan loco me traes..

El adulto quita su boca del pene de Akihito le sube sus dos piernas y lo embiste –Akihito agárrate de mí cuello, lo suspende y se lo lleva con su miembro adentro a la tina de baño, prende el agua caliente y se mete con el menor a tomar una ducha.

Dentro de la tina de baño, estos se tocaban mutuamente, el menor había caído rendido a las caricias de su amado.

El chico lo abraza y deja de acariciar al adulto, arrecuesta su cabeza en el pecho de Asami, sobándolo tiernamente con sus manos.

-Asami, quedémonos así un rato.

-Como gustes pequeño. - Aunque su miembro aún seguía duro dentro del pequeño.

Akihito rompe el silencio,

-Sabes antes de venir a Tokio, había leído mucho sobre ti, en realidad quería hacerte muchas preguntas, sobre tus comentarios de los descubrimientos donde tú habías participado.

-¿Sí?, cuál fue el que más te gustó

-Todos, no puedes decir que estrella del cielo es más interesante, viéndolas desde el punto de vista de personas comunes y corrientes que ven el firmamento. ¿Conociste a la señora Joselina en alguna expedición?

-Por qué no me preguntas que sentí el primer día que entraste perdido a mi salón de clases. Te veías tan hermoso, eras como un nativo nacido en un lugar o una comunidad considerada exótica o primitiva y tú mi precioso Akihito te habías escapado de tu hábitat y estabas llegando a plena civilización a la luz del día.

-Cállate, ese día me perdí y estuve dando vueltas por toda la universidad, estaba asustado y cansado, pero tú solo me avergonzaste......Akihito meditó en lo que acababan de decir, ¿idiota me ves como un animal exótico acaso?

-¿yo?, jamás, pero, no te dicen Mono Araña, el dos veces animal. -Akihito se sonrojó pero también se enojó. Estúpido Kou pensó, él me decía así en el pueblo...Si hubiera sabido que ese nombre me seguiría de por vida, le hubiera reventado la boca.

-NO diré nada, pero eso era una broma solo eso. Asami dime, ¿has estado aquí con la señora Joselina?

Asami lo ve, suspira, su miembro palpitaba en el orificio del menor, lo besa, lo pone en cuatro y comienza embestirlo,

-¿Estás celoso Akihito?, no me digas que los celos, son los que te tienen tan rebelde. ¿Quieres que te demuestre como me pongo al sentir tu cuerpo mocoso?, ¿quieres que te demuestre que tan loco me pone estar aquí contigo ? en estos momentos, solo somos tu y yo..

El adulto sabía que no podía permitir que Akihito se sintiera mal, no le convenía a ninguno de los dos, ya había escudriñado los sentimientos del pequeño y él era un chico, noble, sincero y de alma pura.

-¿te has puesto muy caliente verdad?. -le dijo al oído, el chico se estremeció y se avergonzó de verse tan caliente. Asami aprovechó y lo embiste masajeando su pene.

Akihito no aguantó más, cerró sus ojos, dejándose llevar por la seducción de Asami. Se dedicó a gemir y sentir el deseo que su cuerpo provocaba en ese hermoso y seductor hombre.

Akihito no decía  absolutamente nada, Asami estaba que rebozada de felicidad, ese gato araña, estaba siendo poco a poco domesticado. Lo embestia sin tregua, el chico aún estaba muerto de verguenza pero esto excitaba más al adulto.