ATRAPADOS EN LA ESFINGE

AKIHITO EN CASA DE JOSELINA

Asami llegó a su casa, esperando que fuera ya de mañana para poder estar con Takaba Akihito

Por su parte Akihito llegaba al departamento, Kou y Tao estaban en China así que él se bañó y se acostó.

No podía dejar de pensar en lo que había pasado. Su corazón le dolía y se sentía la peor basura del mundo. Lo que si estaba seguro que estaba enamorado de Asami y eso él ya no lo podía controlar.

Era de madrugada cuando un sonido despertó al pequeño Tabaka, se estiró de la cama y por un momento se olvidó de todo lo que había ocurrido el día anterior.

Entró al baño y de pronto sus pensamientos llegaron hasta su encuentro con su jefa, su tio Sakita y el Sensei Asami; suspiró, le esperaba un gran día, un día lleno de muchas emociones. En realidad se le había quitado toda el animó que tuvo al despertarse.

Desayuna y ve que en su celular había un mensaje, hace una llamada.

Brrr Brrrr

-Akihito que bueno que me llamas, no quise molestarte, te envié el mensaje que me llamaras apenas lo leyeras, como sabrás estoy  a escondidas, no puedo dejar que nadie sepa que estoy hablando de trabajo, mi doctor y mi esposo me lo han prohibido, pero ayer se me olvidó decirte algunas cosas importantes.

-Está bien señora Joselina, no diré nada a nadie.

-Bien, ese es mi muchacho! – Joselina se sentía una mocosa, haciendo una travesura, le dice al pequeño: -Llama a mi esposo y dile que te oriente en cuando llegues a la casa, que te indiqué donde queda cada parte donde tendrás acceso para que te familiarices con todo, ya sabes que en mi casa no entran extraños, pero en ti tengo mi entera confianza, siéntete en libertad de pedirle a mi esposo lo que necesites, ya le dije que te compre comida hecha o por hacer, que te brinde una llave para que puedas entrar y salir a discreción, si necesitas algo más le avisas a èl.

Asami envía una señora que nos limpia tres veces a la semana, si quieres que la señora te ayude lo dices, no te guardes nada. Quiero que te sientas en tu casa, aparte de mi esposo, eres de mi entera confianza, a mi cuarto no puedes entrar, ya sabes cosas de mujeres, pero después la casa es toda tuya......

............Akihito ¿estás escuchando? - El chico se había quedado mudo. Esa señora era muy buena, estaba haciendo lo posible por hacerlo sentir muy bien, en cambio él era un traidor.

-Sí, disculpe anotaba todo lo que me decía. Lo lamento. - Joselina sonrió y quedó satisfecha con la respuesta del pequeño.

-Recibirás una llamada de mi esposo. Suerte Akihito, ahora te cierro, recuerda estarás en tu casa, aparte hazme un informe de los últimos acontecimientos recientes, todo está en la carpeta del escritorio de mi computadora, dice "recientes hallazgos" Asami te dará la clave....Tengo que cerrar viene la enfermera. -Cerró.

Akihito se quedó en el comedor con la cabeza en sus manos, cuando Joselina le dijo que Asami le llamaría, su corazón se escapó y empezó a divagar, sonaba como tambor en pleno desfile patrio. El pequeño no descifraba si era miedo, alegría o tristeza, un ruido lo saca de su dilema. El chico se levantó de la silla y se acercó a la puerta.

-¿Quién es?

-Soy Kerishima Kei , vengo a buscarlo joven Takaba, debo llevarlo a la casa del Sr. Asami y darle algunas instrucciones.

-Voy - El chico por un momento se tranquilizó, por supuesto Asami estaba ocupado y no tendría tiempo para darle el recibimiento y la ayuda que le dijo la señora Joselina, él suspiró. Llevó todo lo que necesitaba y se dirigió a la casa Asami.

Por un momento todo estuvo en silencio,

-Dime Kerishima, ¿dónde está tu jefe? - Kerishima lo quedó viendo por el retrovisor pero no dijo nada.