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1O

Segundo mes de embarazo...

Algo que a Hero le gustaba era ver como el vientre de Josephine se iba formando, tal vez ahora no estaba muy grande, pero ya se le estaba formando un bulto en la parte baja.

Josephine le estaba dando un propósito a Hero, uno por el cual tendría que esforzarse.

— ¿En que piensas? — le preguntó Josephine a Hero.

Ambos estaban sentados en la sala de espera de la clínica, esperando que los atendieras, era la segunda revisión de Jo y ella se encontraba nerviosa, sabia que todo se encontraba en orden con ella y con el bebé, pero eso no evita que le suden las palmas. Sabia que por mas minima cosa que pasaria iba a ser culpa suya y de nadie mas.

Cuando les toco el turno, la primera en pasas fue Josephine, Hero era el mas emocionado.

— ¿Cómo ha ido todo? ¿Algunos sintomas? — pregunto la ginecóloga sacando la historia clínica de Jo de uno de sus cajones.

— Todavia no. — respondió Jo, y antes de que pudiera decir algo más Hero habló.

— ¿Es malo? — su tono era de preocupación.

— No, cada mujer lleva un embarazo de forma diferente. ¿Le hiciste caso a la dieta que te di? — Josephine asintió. La ginecóloga comenzo a escribir en la historia clínica. — vamos a pesarte.

La ginecóloga los guió hasta un rincón del consultorio, hizo que Jo de quitara los zapatos y la subio en la balanza, tal como el primer mes.

— Haz subido dos kilos, para la proxima revisión tendras que subir un poco mas. — la ginecóloga anoto el peso en la historia. Midió el vientre de Josephine para ver su habia crecido. — crecio unos pocos centímetros. — murmuró y anoto de nuevo.

Le indico a Jo que se pusiera los zapatos y la llevo ahora a la camilla que tenian para hacer las ecografías.

Josephine se recostó en esta y subio su blusa, Hero estaba a su costado sentado en una silla.

El miraba atento a la pantalla esperando ver algo, pero fue cuando la ginecóloga puso el aparato en el vientre de Jo que pudo ver un punto, en el primer mes no habia podido ver casi nada, y ahora solo podia ver un poco mas de antes. Pero eso no evitó que el corazón se le acelerara y que unas lagrimas picaran sus ojos.

— ¿Se puede escuchar su corazón? — preguntó Hero. Josephine se habia quedado callada todo el momento, no queria abrir la boca porque sabia que lloraría.

— Todavia no, al partir del tercer mes ya podran escucharlo. — siguió mirando la pantalla y moviendo el aparato. — mide tres centímetros y pesa tres gramos. — explicó la ginecóloga. — en este tiempo se formaran los brazos y piernas, y sus ojitos tambien. Algunos órganos se irán desarrollando y su cerebro también. — Hero estaba maravilla con todo lo que escuchaba. Estaba con una sonrisa enorme y con los ojos aguantando las lágrimas. Su sueño estaba a meses de convertirse en realidad.

Cuando la doctora capturó la pantalla e imprimió la ecografía hizo que Josephine se limpiara el gel y se bajara la blusa. Con ayuda de Hero se bajo con cuidado y se fue a sentar de nuevo.

La doctora les dio las nuevas indicación y la foto, se fueron de ahí.

— ¿Quieres cenar? — le preguntó Hero a Jo. Este estaba manejando mirando al frente, aunque de ves en cuando la miraba a ella, aunque la rubia no se daba cuenta.

— Si, la señora Celia cocino mucho hoy, estoy segura que sobro un poco. — Jo se acarició el vientre de solo pensar en la deliciosa comida de la señora.

— En realidad decía que si quieres ir a cenar, me gustaría salir un rato. — dijo Hero una vez que pararon en un semáforo.

— Ehh creo que estaría bien. — Jo no sabia que mas decir, esa propuesta la habia tomado desprevenida.

— Espero que no te moleste si mañana hay fotos de nosotros en todos lados. — Josephine pensó que a ella no deberia molestarle, si no a él. Total vivía encerrada en su casa y no podía salir.

— No es como si las fuera a ver tampoco. — Jo recostó la cabeza en la ventana.

— ¿Por qué no? — pregunto Hero.

— No es como que salga, las unicas noticias que veo son de política, el chisme no me interesa. No entro a Instagram hace mucho. No tengo por donde ver los chismes. Además a mi no me interesa, a ti si deberia de hacerlo. — Jo se cruzo de brazos e intento dormir, cosa que no funcionó.

— En realidad estoy acostumbrado a todo, supongo que debiste haber investigado ¿no? — Hero sonrió, aunque era una de burla.

— Creo que era lo más lógico, pero no importa, al fin conseguiste lo que querías. — Hero asintió.

— Si, pero sigues reacia con querer renunciar a tus derechos. Sabes que al final lo voy a conseguir ¿verdad? — algo que ella odiaba de él era que su actitud a veces era muy tierna y linda, pero después era cínico y creído.

— ¿Sabes que voy a seguir luchando? No me doy por vencida tan rápido. — Jo vio como el auto se detenía frente a una calle donde habian diversos restaurantes.

— Si, pero al final del día, siempre gano. — él le guiño un ojo. — elige un lugar. — dijo y salió del auto.

Antes de que Josephine pudiera abrir su puerta Hero la abrió y le extendió la mano para que pudiera salir.

— ¿Elegiste? — dijo cuando cerro la puerta del coche.

— Quiero comida italiana. — no se dijo más y Hero la llevó a la entrada del restaurante.

Ingresaron sin ningun problema, y tomaron asiento en una mesa en el centro. Para la mala suerte de ambos habían reconocido a Hero ni bien entró. Tal vez no los interrumpían, pero si cuchicheaban sobre y la chica con la que estaba.

— ¿Listos para ordenar? — la camarera que los atendía tenia la mirada puesta en Hero.

— Yo quiero Rissoto. — dijo Hero. — ¿Qué se le antoja al bebé? — esa pregunta hizo que la chica bajara de la nube en la que estaba. Josephine por su parte se sonrojó.

— Una lasagna esta bien. — la chica anotó rápidamente y se fue lo más rápido que pudo.

Cuando llegó la comida, cenaron en silencio, solo se escuchaba el sonido de los cubiertos y los vasos.

Cuando Hero pagó, salieron del restaurante, pero no fueron directo al auto.

Él la había llevado a una tienda de bebés.

— Creo que ya tiene muchas cosas. — dijo Jo viendo a Hero hurgar entre varios ganchos.

— Yo creo que no. — saco un conjuntito de Jean que había visto hace unos dias y no pudo comprar porque no habia la talla.

Una vez que pagó se fueron ahora si a casa.

Josephine entendió que nadie podría quitarle la emoción a Hero.

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HOLA!

Dos dias seguidos de capitulos, que milagro je.

Espero VOTEN Y COMENTEN MUCHO. Je.

Den opiniones y sugerencias.