21: Ángel de alas amarillas

14K 1.4K 544
                                    

—Colin

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

—Colin.

—Eh, Howie.

El chofer lo sorprendió en la entrada de Golden Hill mientras esperaba a Emma.

—Tengo órdenes de llevarte —anunció.

Colin frunció su entrecejo y verificó su teléfono.

Emma no le había dicho nada al respecto. En realidad, Emma andaba bastante desaparecida desde la cena con su familia. Le había mandado un solo mensaje a las 3:00 p.m. que decía «Nos vemos en la puerta de tu torre a las 8:00 p.m.», y no respondió cuando él le preguntó cuál era el plan. Pero, después de Howie, todo se puso más claro que el agua; Emma estaba preparándose para llenar su noche de colores, sea cual sea el significado de esa metáfora.

En el vehículo, Howie se dobló para verlo y le pasó un antifaz dorado que decía Emma.

—No quiere que descubra a dónde me llevas —asumió Colin, mirando el antifaz sin agarrarlo.

—Son órdenes de Emma. Póntelo —exigió, moviendo el antifaz.

Colin se colocó el antifaz sin protestas. El antifaz olía a Emma.

—No te estreses. No pienso mirar —se acomodó en el asiento trasero. Le gustaba la idea de sorprenderse y de descansar tranquilo mientras lo raptaban voluntariamente.

—Tengo órdenes de no responder preguntas —comentó mientras ponía el automóvil en marcha.

—¿Más órdenes? —habló con sus brazos cruzados y su cabeza recostada en el asiento.

Howie no respondió.

—Tengo miedo si no me hablas, Howie.

—No puedo responder preguntas —reiteró.

—Pero no te hice preguntas, Howie.

Más órdenes llevó signo de interrogación.

—Dios. Sí trabajas para el papá de Emma.

—Y es un placer.

En el camino, Howie lo vigiló todo el tiempo. Colin esperó con impaciencia; cambió de posición al menos treinta veces; entabló charla con Howie sobre cualquier cosa, pero no se quitó el antifaz en ningún momento.

Transcurrido los minutos, secó sus manos con sus jeans azules. Sentía ansiedad, pero de la buena.

No quería imaginar a dónde iba a parar, pero le fue imposible con tantos minutos sin hacer nada ahí atrás. Todo apuntaba a que iban a cenar juntos en algún lugar espectacular, no pensaba que fuera un restaurante, ni siquiera el más elegante, pero tampoco podía imaginar el escenario.

—No te quites el antifaz. —Howie le advirtió.

Habían llegado a destino. Colin lo dedujo por cómo frenaron.

El Novio De Emma© #2Where stories live. Discover now