El omega perfecto #1 |Namjin|

•Inesperado •Capítulo 14

Un par de semanas habían pasado y Seokjin aún podía sentir la sangre que marchaba sus manos, acompañados con los gritos de agonía de Youngjae. Por un momento pudo sentir el pánico apoderarse de él pero sabía que no podía dejarse dominar y menos cuando dos vidas dependían de él. El proceso de parto sólo pudo ser descrito como bestial, la falta de tecnología moderna hacia que el sufrimiento de los omegas fuese mayor al debido, tuvo que usar todos sus conocimientos para salvar la vida de ambos y se sintió aliviado cuando su arduo trabajo rindió frutos.

El sostener a la frágil criatura le brindó la mayor alegría posible, el mirar el rostro cansado de Youngjae y el agradecimiento silencioso de Jaebum pese a sonar egocéntrico le recordó la razón por la cual insistió en aprender el oficio el vivir a través de otros sensaciones que nunca podría experimentar por cuenta propia, quizás se torturaba a si mismo con dichas acciones pero no se preocupaba por ello.

Las cosas habían dado un vuelco breve y quizás en agradecimiento por salvar la vida de dos miembros de su manada su Alfa le permitió algunas libertades que no creía posible, era libre de ir y venir a reuniones con los omegas de la manada y se le había dado un puesto como ayudante del viejo médico, él sabía que bien podria hacer un mejor trabajo que el viejo beta pero no quería forzar su suerte al expresar sus pensamientos en voz alta. Cada mañana recibía los agradecimientos por parte de las personas que recibían su tratamiento y podía sentir como ellos de a poco lo aceptaban como su igual. Lejos de sentirse a gusto la sensación de culpa lo invadía, el no podía permitirse a si mismo formar grandes lazos con personas a las que tarde o temprano debería traicionar por orden de sus padres, el era el elemento clave en un intrincado plan y sólo debía actuar como era debido, sus emociones como siempre debían ser dejadas a un lado.

Era irónico como pese a saber que pronto los estaría apuñalando (metafóricamente hablando) se permitía a si mismo breves intervalos de tiempo donde imaginaba viviendo en aquella manada sin tener que jugar con una doble identidad.

El olor de Jackson y su andar lo despertaron de sus cavilaciones, en el breve intervalo que se permitió observarlo pudo entender el porque su Alfa había caído preso de los encantos de aquél beta, el no era ajeno a la historia que ambos habían compartido. Omegas indiscretas habían sido las responsables de contarle el suceso dejando entrever su alegría al ver que su Alfa había recapacitado ante tal error garrafal, parecía que el único que nunca noto o quizás no aceptó los sentimientos fue el propio beta.

-Seokjin, ¿estas ocupado? —Pregunto Jackson mientras le mostraba una amable sonrisa, extendiendo su mano para ayudarlo a levantarse del suelo donde se encontraba limpiando los rastros de sangre que habían quedado de su última intervención médica.

Seokjin lo miro por un momento y dejó que el beta lo ayudara a levantarse. Le dolían la espalda por haber estado en dicha posición durante tanto tiempo pero se negó a demostrarlo.

—Acabo de terminar en realidad, ¿sucede algo?

—Quería pedirte que vinieses a casa a revisar a Mark, últimamente no se siente bien y estoy algo preocupado. El se niega a decirme lo que le pasa, quizás es para no preocuparme pero lo he notado muy débil estos días. ¿Vendrias por favor a revisarlo?

Seokjin lo penso por un momento, el mismo había notado en su amigo (puesto que ambos compartían más tiempo juntos) el letargo que parecía dominarlo, tenía sus sospechas sobre las causas de la enfermedad pero preferiría cerciorarse por si mismo antes de emitir un diagnóstico errado.

—No tengo problema alguno en ir solo tendría que avisarle a mi Alfa.

—Tan formal como siempre Seokjin—Dejó escapar una carcajada ante el tono formal que usaba el omega para referirse a su pareja. —Ya le avise a Namjoon y dijo que nos encontraría más tarde en casa así que puedes venir sin problemas. —Sacudió la cabeza al no entender del todo como funcionaba aquella relación.