Pixeles Sobrevivientes

Almacén De Cráneos

NARRA CHARLOTTE

Esperé a que Bertha y sus amigos se reunieran conmigo, estaban tardando mucho pero no se me hacía raro, Blake no confiaba en mí y no dudo que ellos tampoco.

—Lo siento, no encontraba a Kellet.

Dijo Bertha, el mencionado cruzó los brazos.

—No es mi culpa que no escuches bien, te dije que estaría afilando mi espada.

Respondió rodando los ojos, Bertha se encogió de hombros.

—Bueno, entonces estamos todos listos. A la carga.

Dijo Bertha a la vez que apuntaba hacia al frente con su espada de madera como quien está a punto de luchar en una batalla.

—Como si fuéramos a encontrar algo.

Se quejó Blake cuando comenzamos a seguir a la energética chica que encabezaba la búsqueda. No dije nada para no crear conflictos, pero su actitud no me gustaba nada.

Caminamos bastante hasta que encontramos una zona donde había miles de armas tiradas por el suelo. Flechas, arcos rotos, espadas.

—Parece que alguien desató toda una batalla en este lugar.

Comentó Kellet inspeccionando el suelo y las armas, que en su mayoría estaban rotas.

—Algo me dice que deberíamos quedarnos en la fortaleza y alejarnos de los problemas.

Dijo Blake mirándome de reojo. Bertha se dio cuenta de lo pesado que se estaba poniendo el ambiente.

—Vamos, todo el tiempo hay batallas contra esos que quieren dominarnos, no es nada nuevo. Mejor sigamos buscando ese portal, ya no está tan lejos.

Dijo mirando el mapa y continuando el camino. Si decía la verdad y estábamos cerca entonces podía asegurar que ese portal ya no existía, en especial por la batalla que al parecer hubo en ese sitio.

Caminamos un poco más antes de que Bertha se detuviera, sin decir nada me miró como disculpándose conmigo.

—Esto es una pérdida de tiempo.

Dijo Blake dando media vuelta para regresar.

—Blake...

Lo regañó Bertha, pero la interrumpí.

—Tiene razón, es una pérdida de tiempo. Podría asegurar que ya ninguno de esos portales existe y que en los alrededores encontraremos restos que nos digan que hubo muchas muertes en enfrentamientos. Lo que necesitamos es alguien que pueda construir.

Dije, Kellet me miró como si acabara de hacer una broma de mal gusto.

—Claro, como existe alguien así.

Dijo, asentí con la cabeza.

—Esos portales no aparecieron de la nada. Los enderman y los humanos pueden construir cosas.

Dije, ellos me miraron como si hablara en otro idioma.

—Linda, estamos todos muy nerviosos. Mañana continuaremos buscando. No pierdas la esperanza.

Dijo Bertha intentando tranquilizarme, negué con la cabeza sintiendo la impotencia.

—Olvidemos todo esto, no tiene caso si ninguno de esos sujetos va a venir a ayudar o los portales no existen. En lugar de eso debemos pensar en cuál es el motivo de todo esto, ¿por qué los destruyeron? ¿Por qué mataron a todos ellos? ¿Quiénes son y qué es lo que buscan?