Capítulo 48

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20 minutos más tarde me encontraba subida a un taxi, sudando de nervios, indicandole al chofer que conduciera lo más rápido posible y volteando constantemente para ver sí el auto de Harry aún nos seguía, y sí, sí nos seguía.

Sabía que debía apurarme, sí Harry estando drogado y medio ebrio tenía sus reflejos al máximo, no quería imaginarme que hubiese sido de mi sí lo hacía cuando él estaba en todos sus sentidos.

Finalmente el taxi disminuyó la velocidad en cuanto se acercaba al aeropuerto internacional de Londres, y el auto de Harry estaba a más de 3 cuadras, tendría algo de tiempo, así que saqué de mi bolso 200 dólares y los dejé sobre el asiento.


-Es mucho más de lo que costó.

-Considerate afornutado, estoy apurada –Dije agitada.


Salí del taxi y corrí dentro del aeropuerto dónde buscaba mi identificación, paré en una de las ventanillas de boletos y pregunté por esos pequeños cajeros que hay siempre en los aeropuertos por cualquier emergencia.

Una vez me dijeron dónde estaba, me dirigí allí súper rápido, y mostrandole mi identificación a la banquera, le pedí 2000 dólares de mi cuenta bancaria.

Una vez con los billetes en mano, salí de allí y los guardé, pero antes de salir me quedé helada, Harry estaba afuera, le pasé el pequeño pestillo a la puerta para que no pasara y lo saludé timidamente a través del cristal, frunció el seño.

Miré a todos lados y ví otra salida, así que corrí hacia ella.

Salí a toda velocidad de allí y lo primero que hice fue dirigirme a una ventanilla de boletos hacia mi país natal, Estados Unidos de norte América.

Saqué el primer boleto en el primer vuelo, que salía en diez minutos, y corrí hacia allí, la mayoría de las personas ya estaban subiendo al vuelo, así que sin dudarlo subí yo también y cuando volví la vista atrás lo ví a Harry.

Me senté en mi asiento en el vuelo, estaba junto con una señora no tan mayor, le pedí el lado de la ventanilla y aceptó con gusto.

Miré a través de la ventanilla y ví a Harry mordiendose el labio de furia, lo saludé energeticamente con mi mano, de forma victoriosa y me enseñó su dedo del medio, por alguna razón, sabía que él aún no se rendiría, já, claro que no, no sería tan fácil.

Harry giró sobre sus talones y se alejó placidamente, y por más que su acción de alejarse me resultara relajante, por alguna razón, me inquieto más, no sólo por su forma de caminar, sí no porque en el estado que estaba, era capaz de cualquier cosa.

Anunciarón en el alta voz que despegaríamos y las puertas se estaban cerrando, y me alivié, porque Harry en menos de segundos no estaría allí.

Era de noche, y un poco relajada, me quité mis zapatos y los deje a mi lado y apoyé los pies sobre el frío suelo, no es nada fácil huir de un acosador en serie sobre tacones.

Me recosté sobre el mullido asiento y cerré mis ojos lentamente, hasta quedar completamente dormida.



***



Horas después, aproximadamente 3 o 4 más tardes de las que había subido al avión, la voz en el alto-parlante me despertó.


-El vuelo ACC-USA-238 tendrá una demora de aproximadamente tres horas por turbulencias, disculpen las molestias. –Informó la azafata.

-Agh, cuando hay demoras nunca nada bueno pasa –Gruñó la señora a mi lado.

-Ya lo creo, necesito irme de éste continente lo antes posible –Admití.

-Haces bien niña, allí hay muchos locos sueltos.

-Creame señora, que lo sé.

-Eso es bueno.

-Sí, supongo –Dije encogiendome de hombros.

ObservadaWhere stories live. Discover now