Observada

Capítulo 35

Jade luego de prepararse almorzó con Liam y Louis, se despidierón de Wendy y Niall, prometiendo volver a contactarse con ellos, cargaron los bolsos en el auto y comenzarón a salir del pequeño campo, dirigiendose a la carretera que conducia de nuevo a al hotel de Glasglow.

Jade iba sentada atrás y Louis y Liam iban adelante haciendo estúpidas bromas que Jade no lograba pescar, o mejor dicho, no ponía interes en hacerlo tampoco, así que buscó entre sus cosas su celular, abrió sus mensajes y algo la desconcertó, no era su celular, era el de Louis, hasta ahora no había notado que los dos tenían un iphone negro, pensaba que el de Louis era azúl, pero la intriga invadió y volvió a abrir los mensajes y vió a alguien llamado 'Edward', quien se encontraba segundo, y oh por dios, Jade se preguntó sí era el mismo Edward que ella pensaba.

El último mensaje era de Edward y decía; «¿Estás seguro de que tienes todo bajo control? Algunas cosas se quedan en las profundidades de una persona, para ser más exactos, en las profundidades del agua, pero no te preocupes, te veo después de las navidades»

O sea, sí, era el mismo Edward. Pensó Jade.

Jade se apresuró a buscar la foto del contacto, pero por alguna extraña razón, era la única foto que no cargaba, así que disgustada, guardó el celular de Louis en dónde estaba y sacó el suyo.

-¿Qué hacías? –Preguntó Louis mirandola y Jade se sobresalto.

-Yo... Buscaba mi celular –Dijo Jade moviendolo en su mano.

-Me pareció verte con el mío.

-¿Tuyo? ¿Tenemos el mismo celular? –Preguntó Jade disimulando saber y Louis asintió –¿Negro? –Louis volvió a asentir –Bueno... Que sorpresa.

-No lo creo, dame mi teléfono.

-No sé dónde está.

-Yo sí, y está entre tus cosas por alguna rara razón, dámelo.

-Ya... Lo husmeé. –Admitió Jade.

-Ya lo sabía, pero igual lo quiero, necesito hablar con alguien... –Jade levantó una ceja –Sí, Edward, vamos ¿Me lo darás o te lo quito?

-Ya.

Jade sacó el celular de Louis de sus cosas y se lo dió.

-Aquí tienes.

-Gracias –Dijo Louis agarrandolo.

-Oh dios mío, tienes modales.

-Sí, muy graciosa –Dijo Louis poniendo los ojos en blanco y acomodándose en su asiento de adelante.

Jade estaba muerta de vergüenza porque Louis la había pillado husmeandole el celular, se recostó a lo largo en el asiento y miró por la ventanilla, y hasta llegar al hotel, pensó en lo extraño que había sido el beso con Edward debajo del agua.

Sé que es un poco corto, pero el domingo, sí tengo tiempo haré una maratón TAL VEZ, aún no estoy segura