12.1 • Sobre una confesión inesperada.

10 3 4
                                    

—Hola, Savka. Antes de que preguntes, vengo a entregar un cuadro —respondo al mismo tiempo que la chica del cuadro aparece detrás de ella. Tal vez sea su hermana.

—¿Arthur? —pregunta. Asiento y ella sonríe—. Soy Bárbara, la que encargó el cuadro. Espero que lo tengas.

Intercambiamos algunas palabras, en la que le deseo un feliz cumpleaños. Ella recibe mi cuadro emocionada, pero Savka no me deja apreciar su reacción porque me lleva con ella a otro lado.

—¿Por qué no me dijiste que venías? ¿de cuándo a acá conoces a mi hermana? ¡Y la pintaste! ¿De cuándo a acá?

—Primero, calma. Segundo, no la conocía, por si no lo notaste, nos acabamos de conocer. Ella me contactó por internet, nunca la había visto en persona. En cuanto a tu casa, quería sorprenderte, así como yo me sorprendí cuando Barbara me envió la dirección.

—Pues, lo hiciste. Y también hiciste que una noche de preguntas venga a mí. Barb no se quedará con un "sí, nos conocemos" cuando me pregunte sobre ti.

—¿Y cuál es el problema?

No obtengo respuesta alguna más que un par de ojos en blanco, por lo que una pequeña sonrisa aparece en mi rostro.

—¿Harás algo ya mismo? —pregunto.

—En un rato llegarán algunos familiares de nosotras y amigos de Barb. Y mis padres, que están haciendo unas compras. ¿Por qué lo preguntas?

—¿Quieres salir a caminar un rato?

Ella duda, pero asiente. Salimos de casa, no sin antes notar la mirada de Bárbara en nuestras espaldas.

Comenzamos a caminar sin rumbo alguno, pues al fin y al cabo, no podemos ir muy lejos, debe volver pronto.

—¿Cómo estás, Sav? —pregunto para cortar el silencio.

—Estoy... bien, Arthur. ¿Y tú? ¿Cómo te trata la vida? —me causa gracia la manera en la que la pregunta, por lo que me río antes de contestar.

—Me trata muy bien, gracias por preguntar —pasan unos segundos antes de que vuelva a hablar—. Esta formalidad me recuerda al día que nos conocimos.

—Vaya, han pasado unas cuantas semanas desde ese día.

—Sí... —pasan algunos minutos hasta que volvemos a hablar, y siendo sincero, no me esperaba la declaración que hace a continuación.

El arte que encuentro al mirarte.Where stories live. Discover now