Capitulo 9: Soledad

Start from the beginning
                                    

Me acerco donde se escucha los ruidos entrando en una especie de sala donde no había entrado antes. Cuando dirijo la mirada a la esquina me encuentro a un Stephen cabreado pegando un saco. Me acerco alarmada al ver que no lleva guantes y sus puños están ensangrentados.

- ¿QUÉ HACES? STEPHEN PARA- hace como si no me escuchara y sigue golpeando mas fuerte. En un acto impulsivo de valentía me pongo en medio entre el saco y su puño esperando el impacto. Pero cuando no siento nada abro los ojos encontrándome el puño a milímetros de mi cara.

- ¿¿ESTAS LOCA?? TE PODRIA HABER DESTROZADO LA CARA

- Y TU TE ESTAS DESTROZANDO LOS NUDILLOS

- ESO A TI NO TE IMPORTA, METETE EN TU PROPIA VIDA- dice alejándose de mi.

- ERES UN GILIPOLLAS, SOLO ME PREOCUPABA POR TI

- ¿POR MI? NO ME CONOCES ASI QUE DEJA DE PARECER LA NIÑA BUENA QUE NO ERES Y BUSCATE UNA VIDA PORQUE A MI NO ME IMPORTAS- no sé por que pero sus palabras me han dolido más de lo que debería.

- ¿Sabes? Pensaba que después de todo íbamos a empezar a llevarnos bien pero tienes razón no debería preocuparme por alguien que me detesta tanto. Tranquilo que no me acercare más a ti- siento una lagrima caer por mí mejilla pero la limpio antes de que pueda verla y salgo disparada de esa habitación. No merece la pena.

POV STEPHEN

Joder, joder, joder. Vuelvo a coger el saco hasta que mis manos no pueden más soltando todo lo que tenia dentro. ¿Por qué siempre tengo que cagarla tanto? ¿Por qué un ángel como el se tiene que preocupar por mí? Claro que me importa pero cuando he escuchado que aceptaba una cita con ese estupido entrenador no he podido controlar mi furia. Esta semana he tenido que arreglar problemas que tiene mi madre con la custodia de mi hermana, el maldito de mi padre quiere quedarse con ella pero antes por encima de mi cádaver. Verlo otra vez en persona ha hecho revivir mis momentos más oscuros, las pesadillas han vuelto el triple de fuertes y la sensación de querer matarlo todavía no ha desaparecido. Creí que había salido de esa oscuridad que me consumía pero no es así y no puedo arrastrarla conmigo.

No puede acercarse a mi, no soy bueno para ella. No sé en que momento pude aceptar ser amigo suyo pero las cosas tienen que volver a como estaban antes. Cada uno por su camino no me puedo permitir desarrollar algún tipo de cariño. En este mundo lo peor es tener una debilidad y no quiero involucrarla, a ella no.

- ¿¡¿Se puede saber que coño ha pasado?!?

-Dejame tranquilo David no necesito tus charlas

- No, tu lo que necesitas son dos hostias bien dadas. Explícame por que Carol ha salido de aqui llorando- levanto la mirada sorprendido.

- ¿Estaba llorando?

- Eres un jodido gilipollas

- Es mejor asi, si me odia no va a querer acercarse a mi- se sienta a mi lado mas relajado pero sigo sin mirarle, mi vista esta fija en un punto de la pared.

- Stephen no te hagas esto, hacia mucho que no te veía reír y esa niña lo consigue cada vez que esta contigo. Estos últimos dias que erais "amigos" te he visto como hacia tiempo que no te veía. Estabas relajado y apostaría lo que sea que ese angelito te importa mas de lo que te gustaría admitir- aprieto la mandíbula ante sus insinuaciones.

- No me importa una mierda, lo único que quería era llevarmela a la cama y como no lo he conseguido no quiero saber nada mas de ella- sé que lo que estoy diciendo no es cierto pero no quiero involucrar mas a nadie en esto. Me estoy metiendo en unas peleas que no me gustan ni un pelo pero necesito el dinero y ya no sé que más hacer. Conseguí el dinero que me hacia falta para comprarle las pastillas a mi hermana pero necesita mas cosas y me estoy volviendo loco. Mi madre no sabe nada y prefiero que siga así, ya trabaja mucho y no quiero que se sobrecargue si puedo hacerlo yo por ella.

DESTINOWhere stories live. Discover now