Mi hermoso tormento

Lo siento

Menos mal que dijo que lo iba ha intentar, porque íbamos a 200 km/h mínimo. Esquivó coches, se subió por la acera, se pasó semáforos y se metió por atajos hasta llegar al almacén donde nos conocimos. Al menos eran las cuatro de la mañana y no había gente por la calle... A lo lejos vi a gente discutiendo y peleando, pero paramos junto a un coche antes de llegar. Zack se encontraba apoyado en el capó con los brazos cruzados y mirando el espectáculo desde lejos. Chico listo.

- Baja - Hice caso - Te quedarás con Zack aquí. Luego paso a por ti - Me quitó el casco, asentí y se lo colocó él - ¿ Dónde está ? - Preguntó a Zack, quién apuntó al almacén de enfrente, donde estaban todos peleándose.

Axel bajó su cristal impidiendo ver su rostro y aceleró hasta el almacén. Miré a Zack quién no se había movido de su posición, me coloqué a su lado.

- ¿ Que ha sucedido ? - Pregunté mirando en la misma dirección que él.

- Una banda se creía mejor - Se encogió de hombros - Drevraj se apostó una pelea con uno de ellos y... ya ves, los chicos tienen mal perder - Sonreí.

- ¿ Tú no vas ? - Está vez me apoye en el capó junto a él.

- ¿ Eso significa que quieres que me peguen una paliza ? - Elevó una ceja haciéndome reír.

- Serían ellos los que tendrían que temer - Bromeé.

- Exactamente, deberían estar aliviados de que no esté ahí. Al menos está Liam, no es tan bueno como yo, pero se las sabe arreglar - Me guiñó un ojo.

- Ajá - Asentí dándole la razón a todo.

- ¿ Que tal estás ? - Preguntó cambiando de tema.

- Bien... aunque cada vez que cierro los ojos todo se vuelve a repetir - Este hizo una mueca.

- Bueno, sabes que puedes confiar en nosotros para lo que quieras. Más en mí, porque soy el mejor, pero no hace falta que te lo diga ¿ verdad ? - Sonrió dándome un pequeño empujón con su hombro.

- Hoy tienes mucho ego - Me reí al ver que se hacía el ofendido.

- Son las cuatro de la mañana ¿ Qué quieres ? - Se escuchó unos disparos y los dos miramos hacia la pelea. Miré el lugar y fruncí el ceño.

- Oye... - Este me miró de reojo - Vuestro almacén no sería ese de allá - Apunté uno a lo lejos.

- Así es - Volvió a mirar el panorama con el ceño fruncido. Estaba preocupado.

- ¿ Y de quién es aquel almacén ? - Apunté frente a nosotros.

- De ellos - Se encogió de hombros. De repente se escuchó una gran explosión a nuestro lado - ¡ Abajo ! - Zack me puso una mano en la cabeza y me obligó a agacharme junto a él.

Los almacenes fueron explotando en cadena sin razón alguna. Levanté la mirada viendo a la gente corriendo hacia nosotros huyendo de las explotaciones, pero ninguno era Axel, lo que me empezó a preocupar. Zack se levantó de un salto, me hizo una señal para que no me moviese al ver que otro cerca de nosotros explotó haciendo que laminas de metal cayeran cerca, muy cerca. Liam apareció corriendo hasta Zack.

- ¿ Estás bien ? - Me preguntó preocupado al verme en el suelo.

- Sí, eso creo - Este sonrió ayudándome a levantarme y miró a Zack.

- ¿ Y Axel ? - Preguntó Zack mirando a nuestra espalda.

- Sigue dentro con Drevraj y el líder de la banda - Miré el almacén asustada ya que las explosiones se acercaban a ellos.

- ¡ Hay que avisarles ! - Cuando iba a ir estos me lo impidieron.

- No puedes hacer eso, puede explotar en cualquier momento - Lo miré aterrada - Vale, no he pensado bien las palabras - Liam le dio una colleja.

Se escuchó una moto haciendo que los tres miráramos. Pero era Drevraj, él sólo. Este se levantó el cristal pudiendo ver su rostro algo magullado.

- ¿¡ Y Axel !? - Preguntó Liam.

- Sigue dentro - Dijo haciendo una mueca - Le dije que tenía que salir ya, pero quiso encargarse del matón ese - Nos explicó.

- ¿¡ Qué !? - Gritó Zack asustado - ¡ Está apunto de... ! - Explotó. El almacén explotó, haciendo que mi corazón se parará junto al de los presentes que cortaron su respiración viendo como las llamas consumían la mitad del lugar.

- Axel... - Susurré sin aire en los pulmones.

Se escuchó una moto acercándose a toda velocidad hasta pararse junto a Drevraj chocando los puños con él. Este se quitó el casco viendo su rostro sonriente. Mi corazón volvió a latir y el aire impregnó mis pulmones con normalidad.

- ¿ Y esas caras ? - Nos miró sin entender.

- ¿¡ Y esas caras !? ¿¡ Y esas caras !? - Gritó Zack cabreado. Liam lo sujetó interponiéndose en su camino - ¡ Sueltame que lo mato ! ¡ Lo mato ! - Axel lo miró con una ceja levantada.

- ¿ De verdad creíais que había muerto ? - Se rió bajando de la moto - Por favor... Soy el puto Ángel de la Muerte... - Dijo con soberbia.

- ¿¡ Y qué !? - Todos me miraron sorprendidos por mi grito - ¡ Sigues siendo humano, no un ángel ! - Este abrió la boca para decir algo, pero no encontró que decir - ¡ No eres inmortal ! - Apreté los puños con fuerza - ¿ De verdad crees que tú vida no vale nada como para que no te preocupes por ti mismo ? - Este se sorprendió por mi pregunta - ¡ Si es así estás equivocado, porque a mí me importas ! - Dije con impotencia.

- Fiona...

- ¡ No ! ¡ Ya he visto morir a mi familia, no quiero verte a tí también y que encima no te importe ponerte en peligro ! - Este sonrió dulcemente.

- Bien, tienes razón... Lo siento - Se disculpó sorprendiendo a los chicos - Ahora volvamos a casa antes de que venga la policía - Miró alrededor.

- Al menos nuestro almacén está a salvo - Dijo Drevraj sonriente.

- Lo que no entiendo es porqué todo ha salido por los aires - Dijo Zack más calmado. Axel me acercó a él y me colocó el casco con la atención de todos.

- Yo vi a uno de ellos disparando a unas bombonas - Dijo Axel ayudándome a subir a la moto.

- Por eso hemos escuchado los disparos... - Dijo Liam pensativo.

- Ahora que lo pienso... Mañana tenemos clase - Dijo Zack subiendo a su coche - Y vienen los exámenes finales - Dijo con asco - Por lo que no podemos faltar - Axel se encogió de hombros.

- Yo no tengo problema con los exámenes - Subió frente a mí pudiendo abrazarlo.

- Pues nosotros sí tenemos un problema... - Dijo Drevraj mirando a los chicos - Bueno, nos vemos, se escuchan ya las sirenas - Este bajó el cristal de su casco y aceleró hasta desaparecer de nuestra vistas.

- Nos vamos mañana - Se despidió Axel, yo simplemente me despedí con la mano.

Este aceleró, pero esta vez no muy rápido, camino a su casa.