[NANOFATE ] La Mentira Qué Nos Separo

CAPÍTULO 72

Vivio miro fieramente a la rubia frente a ella, estaba agachada y le sostuvo la mirada. Habia extendido su mano hacia ella como si fuera un gato asustado y temeroso, Nanoha le habia instado a acercarse. De pronto le vino a la cabeza muchas cosas; ¿Por qué no le dijo su madre que su padre estaba vivo? ¿Donde habia estado todo este tiempo? Realmente nada tenia sentido, se cuestiono todas esas cosas.

Pero estaban esos sueños! Recordaba uno donde le susurro que pronto volvería por ellas, que estarían juntas de nuevo. Eso era! Su padre al fin habia vuelto por ellas. Podrían ser una familia, salir de paseo los sábados y o domingos, Fate podría recogerla de la escuela. Cuando llegara la noche regresaría su padre de trabajar y diría "E vuelto a casa, familia" besaría a su madre y a ella en la frente. Seria una vida perfecta ahora solo se interponía ese hombre oscuro.

-¿Eres... mi padre? -susurro acercándose a la rubia.

-Yo... ahm. - miro a Nanoha y esta asintió. -Sí, Vivio.

La pequeña cobriza soltó unas lagrimas y se echo a correr hacia Fate y la abrazo.

-Papa! Papá! Oh papá has vuelto!

Fate quedo pasmada en su lugar y lentamente cerro sus brazos alrededor de la pequeña. Los espasmos de su cuerpo era por su llanto desenfrenado. Lynne se impaciento pero Einhart le detuvo con la mirada y le frunció el ceño, podían esperar un poco a que se calmara la pequeña.

***

Vivio se domino y separo de Fate que le sonreia con ojos algo distantes.

-Vivio, necesitamos que respondas unas preguntas, estamos algo apresurados. -dijo Hayate tocandole el hombro.

Cuando volteo a ver a la cobriza se dio cuenta de la presencia de Einhart en la habitación iba a sonreirle pero se detuvo, sus cabellos  ya no eran verdes sino rubios. Estuvo a punto de preguntar por eso pero la presencia de Nanoha le distrajo.

-Hija, no tenemos mucho tiempo.

Vivio asintió y miro a Fate con expresión deslumbrante y dispuesta a cooperar.

-Dime, como entrabas... -dudo - hija. Viste algo raro o increíble?

-Pues... -camino a una esquina pegada al escritorio. -Aquí hay un pequeño túnel secreto que lleva a los jardines, detrás de la escultura esa de la mujer sin brazos.

Hayate soltó una risilla burlona y murmuro un "Eso explica como le hacia Fate para escaparse del trabajo para verte, Nanoha-chan"  la cara de la cobriza se puso escarlata hasta el cuero cabelludo y competía con su cabello. Fate no comprendió el significado pero miro a Nanoha en busca de una explicación peor esta tenia las manos en la cara por lo que se centro en Vivio.

Recreó como si entrara, se levanto sacudiéndose las ropas y se dirigió a los cajones y los contó uno a uno, eran ocho y lo dijo en voz alta. Luego se sentó en la silla reclinable y abrió el cajón de la derecha próximo y lo abrió, saco un chocolate y se lo comió, saco una caja de allí y la dejo en el escritorio, estaba envuelta de papel estraza sin abrir.

-Eso hago. -dijo mirando a Fate. -No se que hay allí pero es la única cosa de los cajones que no esta abierto, suena como algo metálico dentro y suelo preguntarme que seria. Las iniciales en ella son curiosas.

De: S.I.S

Para: T.H.F

Fate se acerco al escritorio, al mirarlas se puso derecha y de inmediato tomo la caja envuelta, la sacudió y algo metálico hizo clink. Rompió el papel con cuidado que se pudo conseguir y una cadenita dorada cayo en la mesa, todos se acercaron con excepción de Lynne.