Estúpido Quirkless

27: Topo infiltrado

Un día nuevo, la misma y no tan vieja rutina. Izuku se levantó, hizo sus ejercicios, se arregló y terminó en el trabajo. Por alguna razón Karin no se comportó como siempre, sino que le trató como cuando recién se conocían, dándole su espacio. La jornada del trabajo fue bastante pesada, pero por suerte cerraron antes por los pocos ingrediente que quedaban. Justo a tiempo, pues el día siguiente sería fin de semana y volvían a surtir en la cocina.

Izuku estaba agotado en la estación del tren esperando regresar a casa cuando su celular vibró. Podría ser su mamá, pero aún era bastante temprano como para estar preocupada por su llegada, también existía la posibilidad de que ocurriese un accidente.

Sacó el teléfono algo alertado por sus propias conclusiones, pero solo era Mina. Irónico. Suspiró aliviado. No sabía qué querría la chica, si recién la había visto el día anterior.

"Midoriyakun!!! Adivina qué pasó en Yūei!!! Fue una locura *o* me asusté mucho".

Izuku se confundió un poco, pues la chica parecía más emocionada que asustada. Contestaría solo ese mensaje y luego continuaría la plática estando en casa.

"Hola, Mina san ¿Qué sucedió?".

Bloqueó el teléfono y se dirigió a casa con algo de prisa. Quería llegar a acostarse, a comer algo dulce y dormir. Su teléfono vibró varias veces en el camino, y sabía que se trataba de Mina, probablemente enviando un montón de mensajes por separados en lugar de todo en uno solo, contando lo que posiblemente era una historia larga.

Dicho y hecho, llegó a casa para aventarse en su cama, luego de saludar a su mamá y dejar su mochila en su lugar, claro. Abrió los mensajes de Mina mientras respiraba un poco para aliviarse del cansancio.

"¡Yuuei fue atacada!
En realidad estábamos todos en el usj, que es como un edificio con más edificios adentro, como un campo de entrenamiento o algo así. Se supone que nos supervisarian tres maestros, y uno de ellos no fue. Entonces llegaron villanos y todos peleamos contra todos, hasta que nos revelaron que querían matar al maestro que no fue que era all migth!!! pero después fue y nos salvó a todos junto a más maestros !!!!!!!!peleó contra una cosa gigante casi tan fuerte como él, escuché que lo llamaron nomu o algo así, allá migth lo derrotó pero no murió, los héroes y policías lograron contenerlo!! Fue increíble, casi muero.
Y bueno, habían muchos villanos muy feos, y había uno que se teletraportabs y así fue como entraron, al parecer se puede teletrasportsr sin que las alarmas suenen o algo así.
Nadie sabe com o consiguieron la información de que estaríamos ahí a esa hora. Se rumorea que hay un intruso, un topo que está colando information pero no sabemos si es real.
Además!!! Recuerdas a chako y tsuyu? Ellas ayudaron muy valientemente en la pelea principal junto a 3 compañeros, fueron increíbles!!! La próxima vez seré yo la protagonista.."

En cuanto leyó lo sucedido, se levantó a encender la televisión de la sala, poniendo los noticieros. Si acababa de pasar ese día, aún deberían seguir hablando al respecto, pero nada. Los noticieros estaban tranquilos, hablando de cosas que sucedían cotidianamente. Unos que otros intentos de robos y accidentes, pero nada relacionado con Yūei.

Probablemente no le habían dicho a los medios de comunicación, tal vez Yūei quería guardar ese hecho, o tal vez dirían algo al respecto más adelante. Decidió contestar el mensaje.

"¿Están todos bien? Qué extraño, ¿Por qué querían matar a All Might?" Para Izuku era claro que nunca podrían matarlo, después de todo, era el número uno. Estaba más preocupado por los demás, por Katsuki.

"Te tardas bastante en contestar :( ?estabas ocupado?
Todos estamos buen
Bien*
Solo dos maestros se lastimaron muy grave y ya son tratados. Los villanos se hicieron llamar la liga de los villanos, muy original.
El líder dijo que quería matar a All might, y que nos mataría a todos, pero no sabemos sus motivos. Él parecía débil ya que no hizo nada para pelear y le dejó todo a sus secuases. Tal vez lo hará por venganza?".

Izuku suspiró. Mina realmente escribía un poco feo. Pero principalmente suspiró de alivio al que ningún alumno compañero de Mina fue lastimado. Aunque los héroes... era un riesgo que debían tomar para salvar a otros.

Luego releyó el mensaje, donde decía que algunos compañeros ayudaron al héroe número uno. Recordó lo que había estado pensando la noche anterior. Tal vez y uno de ellos era Katsuki. Sonrió por fuera, dejando libremente que sus mejillas se tiñeran de un ligero carmín. ¿Sería buena idea preguntar? No perdía nada, además de que él solo ya había comenzado a arruinar las cosas desde hace un par de días al involucrarse demasiado, qué era solo un poco más.

"Mina san.
¿Conoces a Bakugō Katsuki?"

Lo envió, creyendo que sería mejor solo preguntar de forma directa para no darle tantas vueltas al asunto.

"Bakugō? Lo conoces?!!!! 'o' genial! Va en mi salón, son amigos?"

Izuku seguía sonriendo, creyendo que su decisión había sido buena.

"¡Sí! Es mi amigo, sospechaba que se conocerían desde que supe que ibas a Yūei jeje. Solo un pequeño favor ¿Podrías no decirle nada al respecto? No le digas que me conoces."

"ehhhhh?!!!! Y por qué? Quería decirle :(((( "

"Bueno, no creo que le guste la idea de que me haga amigo de sus compañeros. Seguro ya conoces su temperamento. Es un poco difícil de comprender."

"esta buen!! Entonces no diré nada jijiji 6w6"

Izuku se echó al piso de la sala, que solo era acompañada por el sonido de la televisión encendida. Estaba de ensueño, se imaginaba todas las posibilidades que existían al tener un contacto que le cuente todo sobre el rubio mientras está en su escuela. Conocería esa parte de él siendo heróico y aprendiendo a rescatar y pelear con villanos. Era una enorme ventaja, estaba realmente feliz. Después de todo el día le había terminado bien.

—¿Hijo? ¿Con quién hablas? —preguntó la señora Inko, con un rostro pícaro para hacerle burla a su hijo—. ¿Es la chica con la que saliste?

—¡¿Eh?! N-no, no estoy hablando con nadie, estaba viendo la tele —intentó mentir, porque en teoría ella tenía razón, pero ese no era el motivo por el que estaba avergonzado.

—Jajaja, sí claro. La televisión te hace sonrojar —se burló con un tono enternecido, y se fue de ahí con algo de prisa para evitar las reprimendas de Izuku.

—¡Mamá! No es eso... Ay...

Suspiró, apagó la tele y volvió a subir a su habitación. Estaba exhausto. Más que nunca, no podía dejar de pensar en Katsuki, quería volver a verlo.