siete

3K 238 43
                                    

Justin frenó el auto sin fijarse si quedó bien estacionado y corrió para tomar a Jessica.

—¿Te duele algo? —Preguntó mientras corría al interior de la clínica.

—Si, y sigo sintiendo que sale sangre —Sollozó.

Justin cerró sus ojos con dolor y comenzó a buscar un médico por todos lados.

—¡Un médico por favor! ¡Está teniendo una pérdida! —Gritó.

Una enfermera se acercó a ellos con una silla de ruedas. Algunas personas que estaban en la guardia se quejaron, pero no podían dejar esperar a alguien que estaba perdiendo su embarazo. Justin sentó a Jessica en la silla de ruedas y se la llevaron rápidamente.

—Espere aquí un momento señor —Pidió la enfermera y cerró la puerta en su cara.

Justin se tiró del cabello y comenzó a caminar por la sala rogando que su hijo estuviese bien.

—Señor, mientras tanto puede ingresar a su esposa —Dijo un doctor apareciendo detrás de él—. Y tranquilo, seguro todo estará bien —Finalizó y se fue por las dos puertas donde anteriormente se habían llevado a Jessica.

Justin caminó hacia la recepción y comenzó a dar los datos de Jessica.

—Señor, necesito que me pase su nombre —Dijo la recepcionista sacándolo de sus pensamientos.

—Justin Bieber —Respondió—. ¿Cuándo puedo pasar a ver a mi esposa? —Preguntó.

—Seguro es un rato más, mientras tanto puede tomar asiento.

—Gracias por la ayuda —Dijo con sarcasmo y caminó hacia los asientos.

Sacó su celular de su bolsillo para ver si su vecina le decía algo sobre Ava, pero no había nada. Lo guardó nuevamente en el bolsillo y se pasó una mano por el cabello. Se sentía culpable de eso porque había hecho poner nerviosa a Jessica.

Los minutos pasaron y Justin estaba por perder el control hasta que vio a un doctor que caminaba directo hacia él. Justin se levantó rápidamente.

—¿Usted es el señor Bieber? —Preguntó.

—Así es —Respondió—. ¿Cómo se encuentra mi esposa? —Preguntó.

—Le hemos hecho unos análisis que estarán en unos minutos. Por ahora quedará ingresada —Explicó—, ¿Quieres ir con ella? —Preguntó.

—Si —Respondió Justin.

El doctor asintió y comenzó a caminar seguido por Justin. Ingresaron por las dos puertas que daban a un pasillo. Caminaron varios metros hasta parar frente a la habitación. Entraron y ahí Justin pudo ver a Jessica, quien tenía los ojos rojos e hinchados.

—Bebé —Dijo Justin y se acercó rápidamente a su esposa—. ¿Cómo te sientes?

—No lo sé —Negó con su cabeza.

—En un momento volveré con los resultados —Dijo el doctor y se retiró.

—Creo en que todo estará bien —Dijo Justin y colocó su mano sobre el vientre de su esposa.

Jessica sólo asintió. Ella pensaba que ya no había nada en su interior. Su sentido de madre se lo decíay eso le destrozaba el corazón.

Los minutos seguían pasando y Justin se dedicaba a acariciar la una Jessica que estaba perdida en sus pensamientos. La puerta se abrió y por allí ingresaron el doctor seguido de una mujer.

—Tenemos los resultados —Avisó la mujer mirando su carpeta.

Jessica se sentó rápidamente en la camilla. Justin rogaba con todo su ser que su hijo siguiera ahí.

Teacher ➵ j.bWhere stories live. Discover now