Rogue's Nation

Cap. 10: Poderes

Las puertas del ascensor se abrieron y James entró en su nueva guarida, allí pudo ver que Kate, Jet y Yuki observaban a Lon y a Mary que se habían colocado en la zona de entrenamiento.

–¿Qué hacen? –preguntó James.

–Entrenar –contestó Jet–, estoy tratando de conectarnos a alguna red de la policía para poder "debutar" lo antes posible.

–Que no te engañe –bromeó Yuki–, solo tenían ganas de probar el campo de entrenamiento.

Lon había usado su poder para generar dos pequeños escudos de metal en sus manos y con ellos detuvo varios ataques que Mary le lanzó con su bō, rápidamente logró golpearla y apartarla de él, ella trató de volver a acercarse, pero Lon cerró sus puños y generó pequeños fragmentos que luego le lanzó, Mary usó la velocidad para esquivarlos y después golpear a Lon y tirarlo al suelo.

–¡Qué habilidad! –aduló James.

–Gracias –agradeció dulcemente Mary.

–No me dijiste que era tan rápida –dijo Lon levantándose.

–Estamos hablando de Mary, ella no depende de la velocidad, la velocidad depende de ella–bromeó James.

–Hay algo que no me queda claro –dijo Yuki mirando a Lon–. ¿Cómo se supone que funciona tu poder?

–¡Ahí viene! –bromeó Kate.

–Excelente pregunta –respondió Lon–. Como sabrás, la sangre contiene hierro y mi poder consiste en poder sacar parte de ese hierro y darle forma con mis manos.

–Me esperaba algo más complejo –reconoció Yuki.

–Obviamente es mucho más complejo –señaló Jet–. Pero ninguno queremos una clase de biología.

Jet observó a Yaolan y después posó su vista en James, este le devolvió la mirada y supo qué es lo que quería.

–Jet, ¡no! –negó James.

–Jet, ¡sí! –afirmó Jet–. ¿Quién quiere ver pelear a James contra Yaolan?

Todos apoyaron la idea, tanto James como Yaolan rodaron los ojos al ver que los obligarían a pelear, así que se dispusieron a entrar en la zona de entrenamiento.

Yaolan se puso su traje y pudo ver que James no lo hizo.

–¿Vas a pelear así? –preguntó extrañada.

–Quizás... –respondió James.

–Cuándo quieran –dijo Jet.

James corrió en dirección Yaolan y también se acercó, sin embargo, él llamó a su fénix y cuando chocó contra su cuerpo saltó generando bastantes llamas, ella reaccionó rápido y usó sus manos para extender un escudo de hielo que la protegió del ataque. Al caer al suelo ya llevaba puesto su traje de Rogue.

–Odio que tenga un bioanimal para guardar su traje –dijo Yuki observando la pelea.

Rogue se abalanzó sobre ella con su espada de fuego, sin embargo, Akai Yuki enfrió sus manos y pudo agarrar el filo de la espada antes de que le golpease, hábilmente giró sin soltar la espada e hizo girar a Rogue para después lanzarlo contra una pared.

–¡Increíble! –se sorprendió Yuki–. He visto paredes mejores venirse abajo por menos.

–Estas son de Energaticu –respondió Jet.

Rogue y Akai Yuki continuaron intercambiándose golpes.

–¿Energaticu? –se extrañó Lon–. Pensé que la Corporación Energa cerró.

–Sí, pero el CIGE continuó haciendo sus aleaciones con titanio –respondió Yuki.

Akai Yuki lanzó varios trozos de hielo afilados, pero Rogue los detuvo rápidamente lanzándoles fuego.

–¿Lo habías notado? –preguntó Lon sin quitar ojo a la pelea–. Aún con todo el entrenamiento que recibió en Estados Unidos sigue teniendo miedo de sus poderes.

–¿A qué te refieres? –preguntó Mary observando a Lon.

Akai Yuki logró enfriar las dos manos de Rogue y congelarle uno de sus pies para inmovilizarlo.

–Él sabe que el potencial destructivo del fuego no hay que tomarlo a la ligera.

Mary observó extrañada cómo Akai Yuki se disponía a dar el golpe de gracia, pero en el último momento, Rogue logró descongelar su puño y golpeó a su adversaria lanzándola al suelo.

–Bueno, creo que ya ha sido suficiente –dijo James ayudando a Yaolan a levantarse.

–Sí –dijo Jet–. Pueden irse a casa... yo me quedaré por aquí a ver si logró que tengamos oídos en algún sitio policial.

James fue uno de los que regresó a su casa, sin embargo al llegar le esperaban sus padres.

–Ha llamado el padre de Kevin Daniels –dijo su madre enfadada–. Nos ha dicho que tuviste una pelea hace una semana.

–Puedo explicarlo –aseguró James–. Daniels estaba abusando de un chico más pequeño.

–Hijo... –habló el padre–. Entendemos que quieras proteger a los demás...

–...pero debes protegerte a ti mismo por encima de todo –terminó la madre.

–Entiendo –dijo James aguardando el castigo.

–Vete a tu habitación –ordenó su padre–. Aún tenemos que decidir qué hacer contigo...

James fue hasta su habitación y sus padres se observaron mutuamente esperando a que no pudiese escucharlos.

–¿Crees que quiere tomar el manto de Rogue? –preguntó Hikari preocupada.

–Espero que no –respondió el señor Rillen–. Pero si realmente ha hecho todo lo que dicen en las noticias... puede que le diésemos mal ejemplo...

–Nosotros actuamos cómo pudimos ante las amenazas –dijo Hikari–. Así que no te arrepientas por hacer lo que tenías que hacer.

Hubo un breve silencio.

–¿Cómo no iba él a querer ayudar a la gente? –preguntó Hikari acercándose a su marido para tranquilizarlo–. Ha heredado la bondad de su padre.

–Y la valentía de su madre –añadió el señor Rillen sonriendo.