Donde YoonGi con 18 años entra en celo siendo violado a la fuerza por un poderoso Alpha mujeriego, quedando embazado, iniciando con una difícil vida para un Omega que sin marca empieza a serse responsable de su único amor, su pequeño hijo de 3 años...
Un fuerte estruendo logro que todo mi cuerpo cayera al suelo, adormeciendo todos mis sentidos. Los cuales parecían desgastarse, después de un buen momento de tensión que sobre cargo mi cuerpo. Mis sentidos se encontraban apagados, y mis feromonas bañaban del pánico el lugar.
Sentía como mis parpados pesaban el doble, y mi vista por un buen tiempo me impedía ver mas haya del temor de mi Omega, que temblaba en mi interior, desgarrando todo a su paso, pidiendo piedad por las bruscas manos que toqueteaban de mi delgado cuerpo.
Por más que pedía que parara, mi cuerpo no reaccionaba, al parecer nadie querría escuchar de mis lamentos, de mis gritos ahogados.
Nadie hacia nada por el Alpha que se sobre pasaba con mi cuerpo.
Mis mejillas mojadas por mis lágrimas, parecían quemar de mi alma, ahogándose en mi garganta seca. Recordando el patético omega que era, y la desbastada vida que vivía en este mundo.
Mis posibilidades de escapar se acababan en cada momento de un fuerte golpe, para que me quedara tranquilo. Para que Chanyeol siguiera reclamando mi desnudo cuerpo, del cual era torturado por sus labios.
Mi omega desesperado lloraba en mi interior. Reteniendo las ganas de llamar a Jimin, mi orgullo me lo negaba, mi cuerpo me lo impedía, pero mi omega parecía necesitarlo, y ante el ultimo golpe en mi zona baja, mando a todos a la mierda.
Necesitaba de aquel idiota Alpha.
Y como si Jimin, esperara esta orden necesaria para intervenir en unos segundos bastaron para sacar al bastardo de Chanyeol de mi inerte cuerpo, dándome más asco del usual.
Solo pude tomar mis tambaleantes piernas, y estar en posición fetal. Soltando todo mi temor, el llanto que sentía, que me ahogaba de una forma casi errática.
Mis ojos tiritaban, y mi cuerpo temblaba, el frió no tardo en invadirme, congelando todo a su paso. Estaba perdiendo el control de mi cuerpo, y solo percibí el dolor de mi cachorro que lloraba a mi lado, para que todo colapsará en mi interior, empezando con una crisis contra mis temores.
En donde perdía contra mi mundo retorcido, cayendo en un vacío tan desconocido, reflejando el daño que contenía en lo mas profundo de mi corazón.
La única forma de despertar era dormir, y no parecía algo tan malo después de tanto sufrimiento.
¿Verdad?
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Jimin seguía atacando el cuerpo del oficial, el cual entre risas retaba al Alpha que cegado en su sed de venganza. No controlaba su fuerza, su lado Alpha estaba furioso, controlando su lado mas humano, no necesitaba saber que sino se detenía lo mataría y por más que aquello le gustara, que sus propios sentidos se lo pidieran, se lo exigieran.
Tampoco podía exponer al cachorro que asustado retenía a su ser amado escondido atrás de su cuerpo. Era una horrible batalla mental que retenía en su cabeza, terminando en la forma mas tortuosa que Park Jimin espero de parte del destino.
Al reconocer a la persona que ayudaba al oficial, interponiéndose entre su batalla con su malicia mirada, su sonrisa irritante y su manipuladora suerte de principiante.
Sin duda era "él", y en estos momentos su auto control se iría a la gran miseria, si pensaba que saldría vivo de esto.
Todo se volvió de un rojo marchito, un color opaco para un lugar lleno de luces de neón, manchas que jamás saldrían en las alfombradas baldosas de Lustrum, gritos de furia, gruñidos, golpes, y armas de lujos costos, para terminar con el panorama; con un inservible cadáver, "El cuerpo inerte de Jackson, el asesino de Jungkook"... y varios heridos que se interpusieron en aquella pelea.
Y un pasado desastroso terminando su ciclo, un alma era liberada.
