Naomi es una niña de 5 años. Le gusta jugar con su osito "Eddie" y escuchar los cuentos que le lee su mamá Helena. Pero no todo es de color de rosa. Nuestra pequeña vive en una casa donde el infierno se manifiesta cada vez que viene su padre, Alex...
—Se llama Andrea Mancini—dijo serio pero con una sonrisa dibujada en la cara.
Todos miramos a Maira y ésta enseguida empezó a teclear. Delante de la mesa larga donde todos teníamos nuestro sitio, se encendió la pantalla que estaba conectada al ordenador. De ésta forma podíamos ver todo lo que hacía Maira. Comprobé que buscó primeramente si tenía antecedentes penales.
—¡Bingo! —chilló la mujer triunfal.
—Andrea Mancini tiene delitos por conducir de forma temeraria y varias multas por exceso de velocidad.
—¿Tiene otro delito? —preguntó el jefe.
—No, está limpio pero...—dejó la frase en el aire cuando apareció una ficha con la foto de Andrea— algo pone de su pasado.
Nos quedamos mirando la foto. Después de tantas operaciones para cambiar su aspecto, algo quedaba de ese Álex del pasado. Aunque su mirada era diferente. El de la foto era una mirada tierna, inocente y muy triste. Mientras la mirada que tiene ahora es desafiante, arrogante y llena de ira.
Maira tecleó y salió un apartado diferente. Se encontraba recortes de periódicos, revistas y expedientes escolares. Carraspeé para aclararme la garganta y poder leer en voz alta.
—Andrea Mancini nacido el día 18 de agosto del 1978 en Siena de la región de la toscana, Italia. Hijo de Marco y Stella Mancini. Nació en una familia muy humilde apenas podían subsistir. Marco conocía a Enrico Bernandino por tratos agrícolas. Éste último, con el tiempo, le introdujo en el mundo del narcotráfico otorgando así unas riquezas extremas.
—Enrico Bernandino...—susurró Kaimi para sí.
Ese nombre me sonaba demasiado. Mi cabeza iba a mil por hora. Mi mente vagó por los recuerdos y llegó al día que nos infiltramos en el molino. Cuando hablamos con Dante Bernandino, el más grande dueño del mundo de tráfico de drogas en Italia.
—Maira ¿Puedes buscar información sobre Enrico Bernandino? —pregunté con toda la educación que pude.
Ella asintió con la cabeza y abrió otra pestaña en el ordenador. Sus dedos volaban por encima del teclado, parecía que lo acariciaba. En un tiempo record apareció una esquela.
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ENRICO BARNANDINO ROMANAZZI
Presidente de Deliza di Fumo*
(1958 – 2014)
Toda laToscana está de luto por el presidente de la famosa fábrica de tabaco. Fue un hombre trabajador, buen padre de familia y con un don para los negocios. Su muerte se está investigando y la familia exige todo el peso de la ley para el asesino. Que descanse en paz.
—Su hijo es Dante Bernandino. Hace pocos años que éste se adueñó de todo el imperio de su padre. Aunque se dice que se ha retirado de la delincuencia y está volviendo alzar la fábrica de Deliza di Fumo, El Molino en Barcelona, entre otras empresas en diferentes lugares del mundo—acabó hablar Maira.
